20+ Historias donde los gatos y los perros decidieron ignorar los prejuicios para convertirse en los mejores amigos

Animales
hace 3 años

Mientras que las personas discuten cuál es mejor, el perro o el gato, sus mascotas no pierden tiempo con tonterías: no solo se pelean y se amigan, sino que también entran en conspiraciones “criminales” motivados por el deseo común de obtener algunas delicias. Asimismo, se unen en la lucha por la educación adecuada de los dueños e, incluso, establecen para toda la vida relaciones cálidas y amistosas entre sí.

En Genial.guru, siempre defendemos la amistad y el positivismo, por lo que es un gran placer leer historias o recopilar fotos sobre cómo los gatos y los perros viven en armonía. La parte más difícil en la preparación de este artículo fue detenerse y dejar de querer agregarle más y más de incontables “pruebas” de ternura y amor.

  • Llegué del trabajo con hambre, así que me preparé unos sándwiches, los dejé sobre la mesa y me volteé para servirme un té. De repente, escucho un sonido extraño, me doy vuelta para ver qué es, y allí estaba, mi gata sobre la mesa, comiendo un sándwich y tratando de tirar el segundo bocadillo para que lo comiera el perro. © Escuchado / VK
  • Soy una feroz amante de los perros. En casa tengo cinco y cada uno con su propia historia memorable sobre cómo ha llegado a nuestra familia. Y también tengo un gato que, un día, simplemente apareció en mi casa y se quedó porque así lo decidió. Sucede que ahora los perros literalmente lo adoran. Él hace lo que quiere con ellos. Los perros incluso se niegan a salir de la casa sin él, así que tengo que pasear a cinco perros y, al mismo tiempo, llevar en brazos a este caprichoso amigo peludo y observar cómo mis perros miran atentos cada minuto para asegurarse de que su irreemplazable amigo esté en el lugar donde tiene que estar sano y salvo. © Escuchado / Vk
  • Mi tío y su esposa tenían dos perros y una gata. A la gata le encantaba pasear por la noche y una vez pasó la noche un poco más divertido de lo habitual. Después de 9 semanas, nacieron unos hermosos gatitos. Así como un leopardo no puede quitar sus manchas, un gato no puede abandonar sus hábitos, sin embargo, dejar a los bebés desatendidos es irresponsable, y ella tuvo que encontrar la solución: se llevó a los gatitos a la cucha de sus fieles amigos caninos y ellos los cuidaban a conciencia hasta que su mamá volvía. © Walter Hartmann / Quora
  • A nuestra gata, a la que llamamos Basi, la recogimos cerca del portón de la casa. Un par de meses después trajimos a nuestro hogar un cachorro de raza corgi galés. Los primeros días, Basi lo provocaba al acostarse frente de la verja donde se encontraba el cachorro. Ahora son los mejores amigos. Recuerdo que una vez, cuando me tenía que ir, dejé al cachorro dentro de la verja por las dudas, pero no así a la gata. Al llegar a casa, abrí la puerta, y los dos me recibieron con tanto cariño, se notaba que estas dos linduras estaban muy cómodos uno con el otro. Dentro del departamento todo estaba en orden. Después de esto, no encerramos nunca más al cachorro, no hacía falta, ya que ahora lo dejamos bajo la atenta supervisión de Basi. © OdorediDolce / Pikabu
  • A mi perra le encantan los gatos. Mucho. Ella creció en compañía de un gato durante tres meses y sabe bien qué los gatos son excelentes interlocutores y compañeros. Luego, aparecimos nosotros y la llevamos a una casa que no tiene felinos. Ahora, cuando ella pasea por la calle, espera encontrar un nuevo amigo. Cada vez que ve un gato, se le acerca corriendo, ansiosa por conocerlo. Pero nuestros gatos callejeros no están muy acostumbrados a estos cálidos encuentros de parte de los caninos, así que huyen y se esconden en los árboles. Como mi perra no lo puede alcanzar ahí, se queda abajo mirándolo y aullando: “¡Simba! ¡Vuelve! ¡Al menos déjame dejarte mi tarjeta de presentación!” © sonna-yumo / livejournal
  • Cuando era pequeña, también teníamos un gato y un perro. Al gato lo recogimos en la calle cuando este apenas era un pequeño gatito, pero el perro ya era adulto. Entonces, el gato le ofrecía su amistad muy “insistentemente”. Pasó un tiempo y, como resultado, la amistad era tal que el sociable felino podía recostarse en cualquier lugar sin problemas, incluso sobre la cabeza del perro. En cambio, el perro recibía comida de lugares a los que le era imposible llegar, gracias al gato. Una vez, me encontré con este panorama: entro a la cocina bien temprano a la mañana, donde había una caja llena de papas bajo la mesa, el gato sentado sobre ella agarrando una papa con sus garras, mirando a los ojos del perro y arrojándole la papa. El perro come, mientras el gato lo observa y cuando este termina su “porción”, el gato le arroja una segunda porción de papa. © MarijaCh / Pikabu
  • Tengo tres gatas, un perro y muchos otros animales. A la gata, la que más tiempo tiene de conocer al perro, le encanta alimentarlo “en secreto”. En la cocina, en un estante, hay comida y golosinas para todas las mascotas. Ella sabe exactamente cuáles son específicamente para el perro, y cuando no hay nadie, de alguna manera abre el mueble, encuentra las galletas para el perro y las arroja para que su querido amigo las disfrute. © Escuchado / Vk
  • Mi gato y mi perro no juegan juntos, tampoco se abrazan, pero se aman profundamente. Cada vez que saco a pasear al perro, el gato maúlla debajo de la puerta hasta que regresemos. Si están en las habitaciones diferentes con las puertas cerradas, ambos arañan la puerta para que les abre y ellos puedan estar juntos. © lillian_amber / Reddit
  • Nuestro gato ama a los perros, bueno, al menos tanto como es capaz de amar un gato. Los lame, los abraza y “pelea” con ellos por diversión. Y eso es porque lo trajimos a casa siendo un pequeño gatito y, a veces, él se comporta como si fuera un perro. En algunas ocasiones, incluso me he llegado a preguntar, ¿no sería la hora de llevarlo a un psicólogo para resolver sus problemas de identidad? © CaptainDBaggins / Reddit
  • Traje al cachorro al departamento donde vivía con mi gato de tres años. El cachorro fue recibido con frialdad, y la primera semana, el gato lo ignoró por completo. En la segunda semana, decidió que se trataba de un indefenso cachorro y comenzó a cuidarlo. En cambio yo, durante un mes, fui ignorada por mi amigo felino, incluso prefería dormir en el piso que en la cama, como era de costumbre. Han pasado dos años, ahora el gato y el perro viven como dos almas gemelas y ambos duermen conmigo en la cama. © yona0kit / Pikabu
  • Mi mejor amiga tenía un gato, y luego, trajo a un perro de raza dogo. ¡Estos dos formaron un equipo envidiable! Funcionaban tan bien que “¡Madre mía!”. Siempre se las ingeniaban para abrir la nevera, incluso el microondas, donde habitualmente se escondía la carne para descongelar. Una vez, fui a visitar a mi amiga, y en mi bolso, aparte de notas y libros de texto, llevaba unas cuantas golosinas para mascotas. Entonces estos “parásitos” peludos removieron cuidadosamente el envoltorio de las golosinas, sin estropear ningún objeto dentro del bolso. ¿Quién de ellos dos se los comió? No se sabe, ¡pero se notaba que ambos estaban muy satisfechos! © Graystripe / Pikabu
  • Por la tarde, como de costumbre, habíamos salido a caminar con mi perra, un pastor alemán. En algún momento, ella se precipitó hacia los arbustos y comenzó a gruñirle a algo. Fui a mirar qué era y vi a un gatito muy pequeño. Tenía miedo de que mi perra, Xenia, lo mordiera, y comencé a arrastrarla hacia atrás. Pero ella se resistía y con un tirón, se precipitó sobre el gatito, lo agarró con la boca y me lo trajo. Yo estaba a punto de irme, pero Xenia nuevamente tomó suavemente al gatito en la boca y me lo acercó de nuevo, sentí que me estaba “acusando” por mi indiferencia. Y así lo repitió tres veces, hasta que me di por vencida. El gatito fue llevado a casa. Ahora es un gato adulto, su nombre es Defo, y más que nadie en el mundo, no me quiere a mí, sino a Xenia, y Xenia a él. © Habitación № 6 / Vk

¿Conoces historias conmovedoras que relatan el cariño y el amor entre nuestros hermosos amigos peludos? ¿Tal vez algunas tiernas imágenes? Compártelas con nosotros en los comentarios.

Imagen de portada OdorediDolce / Pikabu

Comentarios

Recibir notificaciones

Me encanta ver fotos de perros y gatos que se llevan bien

-
-
Responder

Tuve un gato que no se llevaba bien con los perros, excepto con el perro de mi hermana

-
-
Responder

Lecturas relacionadas