13 Cosas que al principio fueron creadas para el uso de hombres o de mujeres, pero que ahora son unisex

hace 3 años

Algunas cosas nos parecen tan intrínsecamente femeninas o masculinas que la sola idea de usar uno de estos objetos puede hacernos parpadear con desconcierto. Sin embargo, la historia de estos artículos, que a menudo parece existir detrás de una barrera con base en el género, tiende a ser mucho más larga y unisex de lo que creemos.

Genial.guru investigó algunas cosas que en su momento parecían exclusivas para el uso masculino o femenino, y que a lo largo de la historia han cruzado de un lado a otro en la balanza, a veces incluso volviéndose cotidianas para ambos géneros.

1. Los zapatos de tacón fueron inventados para guerreros y carniceros

Originalmente, los tacones eran un calzado especial... ¡para los guerreros persas y los carniceros egipcios! La elevación del tacón permitía al carnicero local hacer su labor sin ensuciar sus zapatos. Eventualmente, los hombres del siglo XVII adoptaron el look, aprovechando los centímetros extra por varios años antes de que las mujeres se unieran a la tendencia.

2. El color rosa se consideraba un tono varonil

Originalmente un color varonil y elegante, el rosa era un tono estándar para los hombres. Sin embargo, la llegada del siglo XIX dio un cambio a la opinión con relación al color, identificándolo como romántico por su cercanía al rojo, convirtiéndolo así en un tono emocional, tierno y femenino.

Este cambio de percepción fue rápidamente aprovechado por las compañías de publicidad, quienes crearon gamas de productos de tonos rosas con precios y conceptos diferentes, lo cual instantáneamente los convertía en “objetos femeninos”. Esto aún puede verse en rastrillos, cepillos, gorros, o artículos de vestir.

3. El yoga fue diseñado por monjes y era practicado exclusivamente por discípulos hombres

Practicado por monjes como una disciplina que permitía conectar el cuerpo de sus discípulos a través de técnicas de respiración, meditación espiritual y posturas para alcanzar la flexibilidad, el yoga en realidad consiste en un sistema complejo que involucra espíritu, intelecto, respiración, y mente, transformando y adaptando sus preceptos a lo largo de las épocas y regiones por las que pasa.

En la actualidad, lo que se práctica más comúnmente como yoga es “Asana”, consistiendo en la parte física de posturas. Este fue popularizado como una forma de relajación y ejercicio, con una creciente popularidad entre las mujeres, aunque cada vez más hombres se unen a la disciplina.

4. Las botas UGG eran una moda entre chicos surfistas

Son suaves, cálidas y adorables. Quién hubiera pensado que estas botas tuvieron sus inicios en la cultura del surf en Gran Bretaña y Estados Unidos en los años 70, cuando eran usadas para calentar rápidamente los pies de los surfistas al salir del agua helada.

Eventualmente, la bota de piel de borrego tomó popularidad entre las novias de los surfistas, y el equipo de publicidad de la compañía Deckers aprovechó la oportunidad para pedir a varias celebridades que usaran la marca para elevar sus ventas.

5. Antes del siglo XIX, las mujeres occidentales no necesitaban rasurar su cuerpo

Si has visto alguna película o serie con temática anterior a los años 1900 con jovencitas bien depiladas, ¡es un error de vestuario! En efecto, depilar el vello corporal era algo casi exclusivo para los hombres, y esto a su vez tenía más que ver con el vello facial y mantener una apariencia pulcra, como en la época de Alejandro Magno, quien alentaba a los miembros de su ejército a rasurar su rostro, por ejemplo.

Dado que la gran mayoría de las mujeres no necesitaban cuidar de una barba, no fue hasta el siglo XX que las compañías de productos para afeitar comenzaron a lanzar campañas dirigidas a las damas, pues las tendencias de faldas más reveladoras y mangas más descubiertas dieron lugar al ideal de piel suave y limpia en las jóvenes.

6. El maquillaje era usado para acentuar y favorecer rasgos masculinos

Polvo, rubor, delineador, e incluso esmalte de uñas, todos estos cosméticos podían ser lo que hacía o arruinaba el look de un hombre. A lo largo de las épocas, varias regiones del mundo tuvieron tendencias que incluían el uso de cosméticos en los varones, como delineados de gato, piel blanqueada con polvo o mejillas sonrojadas con pigmentos rojos.

Fue en la era victoriana que el maquillaje se volvió una tendencia exclusivamente femenina, y en su mayoría considerada de mal gusto, volviendo a tomar tracción únicamente con las mujeres cuando la moda se volvió más liberadora y menos recatada.

7. Los relojes de pulsera fueron inventados para mujeres

Por regla, los relojes eran aquellos de bolsillo que los caballeros respetables sacaban de su chaqueta en las películas antiguas, mirándolos fijamente, cerrándolos con un decisivo clic, y regresándolos a un misterioso compartimento interior. Para las damas, sin embargo, no existía tal opción, hasta que la hermana de Napoleón, Caroline Murat, pidió a un joyero famoso que elaborara un bello reloj que se ajustara a su muñeca.

La practicidad del producto y la innovación de los mecanismos de relojes, lo que los volvía más resistentes y fáciles de ajustar, dieron lugar a que el accesorio se volviera un esencial para los soldados, añadiéndose al guardarropa masculino de manera permanente.

8. Nombres como Ashley, Leslie y Sasha eran para niños

Ashley era un nombre originalmente considerado masculino, antes de que, tal vez, por su misma popularidad, comenzara a utilizarse también para nombrar a las chicas.

Sin embargo, en algunas regiones, estos nombres se volvieron exclusivamente ’’de mujeres" (como en el ejemplo de Ashley Higgins, un músico nacido en los 60, cuando ese nombre era común y atractivo para los chicos, y Ashley Tisdale, actriz que nació en los 80, cuando el nombre ya se relacionaba inevitablemente con niñas).

9. Las toallas femeninas surgieron a partir de almohadillas diseñadas para tratar a soldados heridos

Algunas situaciones requieren flexibilidad, ingenio y practicidad, ¡y ser una enfermera en el ejército durante un conflicto ciertamente lo amerita! La falta de tiempo para estar constantemente lavando trapos sanitarios empujó a las enfermeras de Francia en el siglo XIX a crear una almohadilla de un material lo suficientemente barato para que pudiera desecharse sin generar demasiado costo.

La obvia ventaja del producto dio lugar a la industria que hoy en día provee todo tipo de artículos desechables y adaptados a distintas necesidades, siendo mucho más compactos, cómodos y convenientes.

10. Sombreros como los fedora y “Trilby” surgieron a partir de diseños exclusivos para mujeres

Estos sombreros fueron creados para beneficio de dos mujeres en específico, e incluso el fedora fue llamado así por el personaje de una obra de teatro para el que se fabricó, originalmente interpretado por Sarah Bernhardt.

La popularidad del personaje y el atractivo del estilo dieron lugar a que se crearan reproducciones del sombrero, cambiando ciertos detalles a lo largo de los años para convertirlo hoy en día en un accesorio que puede darle un toque único y fresco al outfit de chicos y chicas.

11. Los leggings eran una parte clave del atuendo masculino medieval

El uso de leggings como vestimenta ha formado parte de la indumentaria europea a lo largo de la historia, pues esta prenda resultaba práctica para los hombres que montaban a caballo, además de que estilizaba la figura, algo que los caballeros del medievo ciertamente sabían usar, combinando un par de mallas de colores complementarios y materiales variados para portar los atuendos más elegantes y vistosos.

Aunque los leggings nunca perdieron su lugar con los hombres en varios campos del arte o el deporte (como el ballet o la gimnasia), hoy en día son usados más por mujeres, ya sea con blusas largas, como indumentaria deportiva o debajo de vestidos, faldas y shorts.

12. La programación computacional se consideraba una labor femenina

La importancia de las computadoras en el siglo XX dio lugar al campo de la programación como una profesión femenina. Sin embargo, la recesión estadounidense de 1970 y las publicidades para las computadoras caseras se inclinaban a atraer a los hombres, desalentando a las chicas para que no entraran al área, a la vez que la idea del chico nerd tecnológico asentaba la programación como algo masculino.

La recesión de 1970 pudo haber provocado una disminución en el número de mujeres que querían ingresar al campo, ya que se trataba de la primera vez que los programadores no tenían tanta demanda. Por su parte, la publicidad de las computadoras caseras las posicionaba como “un juguete para chicos”.

Hoy en día, esta percepción perdura, aunque afortunadamente el interés por parte de las mujeres de entrar al campo ha puesto un poco de equilibrio en los números de chicos y chicas programadores.

13. Las pelucas eran parte de la vestimenta de los caballeros del siglo XVII

Si alguna vez viste a un juez en caricaturas, probablemente te venga a la mente la imagen de un señor en una túnica y con una peluca blanca. Esto es porque ese atuendo se basa en la vestimenta del hombre europeo del siglo XVII, cuando los hombres de élite lucían pelucas de pelo de caballo empolvadas, mientras que para los representantes de las clases media y alta era una tendencia. Las pelucas continúan siendo parte del atuendo formal de la sala de audiencias para los jueces y abogados en Inglaterra.

En la actualidad, usar pelucas en el día a día es una cuestión de moda, siendo populares en chicas y mujeres, especialmente gracias a celebridades como Katy Perry o Lady Gaga, quienes suelen portar modelos creativos y coloridos.

¿Qué es lo que te encantaría adoptar? ¿Qué cosa tradicionalmente femenina o masculina te da gusto poder usar?

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