Cómo sobrevivir si caes desde las alturas y todo apunta a que no hay posibilidad de salvarte

¿Y tú qué piensas? ¿Desde qué altura puede una persona caer y mantenerse con vida? A pesar de que incluso una caída desde una planta baja puede acabar muy mal, la azafata Vesna Vulović logró caer desde una altura de 10 000 metros y sobrevivir cuando su avión explotó en el aire, debido a un acto terrorista. Ella resultó gravemente herida, pero luego, como si nada hubiera sucedido, volvió a trabajar en el sector de la aviación.

Decidimos aprender cómo se pueden aumentar las posibilidades de sobrevivir si caes desde una gran altura y parece que nada ni nadie puede salvarte.

Genial.guru encontró información que, por si acaso, bien vale la pena conocer, aunque, por supuesto, esperamos que nunca necesites tener que ponerla en práctica.

Si te caes por una ventana

• Mientras te caes, agárrate a todo lo te que sea posible. Esto dividirá tu caída en varios tramos y reducirá, en cierto modo, la velocidad. Y, si en tu camino te encuentras con un toldo, o un tipo de dosel de plástico o incluso de cristal, entonces, este, aunque te provoque algún daño, al menos, te ayudará a frenar.

• De acuerdo, sí, puede sonar como una broma, pero, mientras caes, no tenses tus músculos y relájate. Cayendo desde una gran altura, sobreviven mejor las personas ebrias y los niños pequeños. Primero, ambos no están completamente al tanto de lo que está sucediendo y, en segundo lugar, el alcohol inhabilita el pánico y relaja los músculos. En el caso de los pequeños, hay que destacar que los huesos son mucho más blandos que en los adultos y su cráneo, lo más probable, es que no se rompa al colisionar contra el suelo, se deformará.
• Dobla las rodillas (pero sin exagerar el movimiento), une las piernas para que, al impactar contra el suelo, toquen ambos pies a la vez y trata de aterrizar sobre las puntas de estos para amortiguar un poco el golpe. Probablemente, te rompas las piernas, pero este es el mal menor en tal caso. Y, bajo ningún concepto, hagas esto: estirar las piernas y abrirlas, o levantar una pierna, pensando que así salvarás al menos una.

• Mientras estás en el aire, cúbrete la cabeza con las manos. Cuando los pies toquen el asfalto (en el peor de los casos) o el suelo (esto sería mejor), es probable que rebotes un poco y luego vuelvas a caer. Por lo tanto, trata de caer la segunda vez de lado. Las manos, que previamente colocaste alrededor de tu cabeza, al menos, de alguna manera, la protegerán.

• Si has logrado sobrevivir, no cabe duda de que eres una persona muy afortunada. Ahora, debes permanecer en el suelo y esperar hasta que alguien acuda en tu ayuda.

Si caes desde un avión

La caída desde una altura de 10 000 metros te llevará un tiempo aproximado de entre 3 y 6 minutos y la velocidad que alcanzarás será de 190 kilómetros por hora. Desafortunadamente, las posibilidades de sobrevivir a ella son catastróficamente pequeñas, pero no está de más intentarlo.

• Primero, ten en cuenta que muchas personas que lograron sobrevivir ocupaban la parte trasera del avión.
• Así, si tu avión, ojalá no suceda, explota o es derribado en el aire, primero sentirás un rugido ensordecedor y un frío infernal a tu alrededor, después, comenzarás a caer. A esta altura hay muy poco oxígeno y es muy probable que pierdas el conocimiento, pero cuando te encuentres en las capas más bajas de la atmósfera, lo volverás a recuperar.
• Intenta sentarte en el asiento o "montar", como si fuera un caballo, en algún resto del avión, esto aumentará tus posibilidades de sobrevivir. Esto es lo que contó Larisa Savitskaya, una mujer de la antigua Unión Soviética, que sobrevivió tras caer desde una altura de 5 000 metros.

Aquellos que sobrevivieron después de un vuelo libre sin nada a su alcance, son dos veces menos (13 personas en total) que aquellos que cayeron al suelo, habiéndose aferrado a algún resto del avión. Una de estas personas fue el piloto militar Alan Magee, que cayó del avión, atravesó 6 000 metros y sobrevivió tras romper el techo de una estación con los pies. Si te encuentras en una situación similar, recuerda estos consejos:

• Adopta la postura en la que caen los paracaidistas, extiende los brazos y las piernas. Esto ralentizará la caída.

• Intenta dirigir tu vuelo: para moverte en la dirección opuesta, dobla las piernas, como si quisieras tocar la cabeza con los talones. Para moverte hacia la derecha, baja el hombro derecho e inclina tu cuerpo hacia la derecha.
• Intenta no aterrizar en un estanque, incluso si buceas bien: desde esa altura, el golpe contra el agua será similar a chocar contra un muro de hormigón. Dirige tu caída hacia el campo, la vegetación o un arbusto, aunque así exista la posibilidad de que un palo te acabe atravesando. La mejor opción sería un pajar o la nieve.

• Tras la caída, comenzará lo más difícil: tendrás que intentar mantenerte vivo y encontrar a otras personas. Juliane Kopcke, de 17 años, sobrevivió en los bosques del río Amazonas, después de haber caído desde una altura de 3 000 metros. Tenía rota la clavícula, en sus heridas aparecieron larvas y solo contaba con unos pocos bombones para alimentarse, pero, al fin y al cabo, tras pasar 9 días, encontró gente.

Además del conocimiento, por supuesto, es muy importante que tengas suerte, pero, en un principio, si has leído este artículo, ya puedes decir que tus posibilidades de sobrevivir en una situación semejante, cuanto menos, han aumentado significativamente.