Cuánto tiempo puede desafiar la gravedad la torre de Pisa

Curiosidades
hace 10 meses

Cientos de miles de turistas intentan empujarla hacia arriba para sacarse fotos geniales, pero ¿alguien realmente puede salvar a la torre inclinada de Pisa de caerse? Este es uno de los ejemplos más famosos de la arquitectura medieval y forma parte de un complejo llamado Plaza de los Milagros de Pisa. En el siglo XII, cuando comenzó a construirse, era bastante inusual que un campanario estuviera separado de la catedral. Pero esa no es, por supuesto, la característica más singular de la torre. En realidad, nadie planeó que se inclinara hacia un lado, pero son cosas que pasan. Empezó a inclinarse hacia el sur poco después del inicio de la construcción debido al suelo blando bajo sus cimientos. Este no pudo soportar el peso del pesado mármol blanco y empezó a hundirse. Los constructores decidieron ser creativos y añadir cada planta siguiente en ángulo para arreglar la inclinación, pero no sirvió de nada. Una vez terminados tres de los ocho pisos, la inclinación empeoró de forma tan evidente que tuvieron que detener el proceso para solucionar el problema. Debido a un grave conflicto entre Pisa y la ciudad-estado de Génova, la obra se detuvo durante unos 100 años. Este tiempo fue suficiente para que el suelo se recuperara. Un nuevo arquitecto se hizo cargo del proyecto y, en 1372, la torre estaba lista, inclinada 1,6 grados.

Una leyenda popular dice que Galileo Galilei, famoso astrónomo y físico italiano, dejó caer dos pesas diferentes desde la torre para demostrar que los objetos más ligeros y los más pesados caen a la misma velocidad. Si esa leyenda es cierta, lo habría hecho cuando la torre estaba inclinada unos 3 grados. Casi tres siglos después, un arquitecto que trabajaba en la torre quiso mostrar al mundo los bellos tallados de su base, con la esperanza de aumentar su valor. Lamentablemente, hizo que la construcción se inclinara como nunca. Uy. Pero a pesar de todo, el principal símbolo de Pisa consiguió sobrevivir al menos a cuatro terremotos masivos. Resultó que el suelo moldeable impidió que la torre sufriera con el movimiento del suelo de los terremotos. A mediados del siglo XX, cuando la torre ya estaba inclinada en unos 5 grados y medio, las autoridades italianas decidieron invitar a expertos para salvarla de su caída total. Llegaron ideas de todo el mundo sobre cómo preservar el antiguo monumento y se creó un comité internacional especial.

Se les ocurrió la idea de extraer tierra de debajo de los cimientos norte de la torre para volver a ponerla en posición vertical. El equipo realizó simulaciones por ordenador y decidió poner en marcha el plan antes de que fuera demasiado tarde. Los trabajadores envolvieron el primer nivel de la torre con bandas de acero para proteger la piedra. Pusieron una cantidad impresionante de pesos de plomo en el lado norte de la torre y los conectaron a cables colocados a gran profundidad bajo tierra. Después empezaron a perforar y remover el suelo, paso a paso. Este método funcionó y ayudó a tirar de la torre en dirección contraria a la inclinación. El equipo tuvo que repetir el proceso durante varios años en 41 lugares distintos alrededor de la torre. Eso sí que es perseverancia. En mayo de 2008, la torre terminó de enderezarse y por fin se quedó quieta. Perdió un total de 48 centímetros de inclinación, ¡nada mal! Los ingenieros creen que aguantará en pie al menos otros 200 años. Y con la tecnología del futuro, debería ser fácil arreglarla de nuevo y dejarla en pie otros 800 años. O, quién sabe, tal vez los robots descubran cómo conservarla para siempre. Así pues, no hay motivo para preocuparse por la torre inclinada de Pisa, pero sí por el futuro de otras torres inclinadas del mundo.

El campanario de la capilla de Suurhusen (Alemania) ostentó durante años el título oficial de la torre de iglesia más inclinada del mundo. Se construyó con granito hace más de 625 años sobre suelo pantanoso. Los cimientos eran troncos de roble. De hecho, el agua del suelo ayudó a conservarla. Cuando se drenó en el siglo XIX, la madera se deterioró y la torre empezó a inclinarse. Tuvieron que cerrarla para reforzarla, y funciona como iglesia desde que volvió a ser segura. En el verano de 2022, otra torre alemana batió el récord del campanario de Suurhusen. Una comisión especial midió la inclinación de la torre inclinada de Gau-Weinheim, y resultó ser de 5,42 grados. Es una torre fortificada medieval, y su campana sigue sonando tres veces al día. La torre del reloj más famosa del mundo, el Big Ben de Londres, también está inclinada hacia un lado. Por cierto, Big Ben es en realidad el nombre de la campana del interior de la torre, que fue rebautizada como Elizabeth Tower en 2012. En cualquier caso, la torre está ahora inclinada alrededor de un cuarto de grado hacia el noroeste. No parece nada, pero a largo plazo podría volverse inestable. Los expertos no saben qué está causando la inclinación. Hay una teoría que dice que la arcilla londinense sobre la que se asienta el Big Ben se está secando. El guardián del gran reloj mencionó que podrían pasar entre 4000 y 10 000 años hasta que la inclinación se convierta en un problema serio. Na, puedo esperar.

La torre del campanario de Brujas, otra construcción famosa, es una auténtica superviviente. Un rayo la alcanzó a finales del siglo XV, reduciendo a cenizas la aguja y arruinando las campanas. La nueva aguja también fue devorada por las llamas dos siglos y medio después. Así que lo que vemos hoy es el resultado de varias reconstrucciones. La torre tiene ahora 47 campanas. Antes desempeñaban un papel importante en la vida de la ciudad. Las campanas sonaban para anunciar la alarma de incendios, las horas de trabajo y los grandes acontecimientos. Si la inclinación de 86 centímetros no te molesta, puedes subir a la torre para disfrutar de las vistas desde lo alto. Y si crees que solo las construcciones de la Edad Media pueden inclinarse cuando nadie se lo ha pedido, conoce la Torre Millennium de San Francisco. Este rascacielos es el edificio residencial más alto de la ciudad. Ofrece apartamentos de lujo... y se inclina más de medio metro hacia el norte y el oeste. No tiene planes de dejar de inclinarse hasta ahora y sigue avanzando a una velocidad de cinco centímetros al año porque se hunde en el suelo. Y si nadie consigue resolver el problema, podría alcanzar una inclinación de 101 centímetros. Si se inclina más, los ascensores y las cañerías podrían dejar de funcionar. Lo más probable es que todo esto se deba a un error de construcción. La solución propuesta ahora consiste en instalar 18 tubos de acero hasta el lecho rocoso bajo la torre para detener y probablemente incluso invertir parte de la inclinación.

Algunos edificios están inclinados a propósito. La torre Capital Gate es una de las joyas arquitectónicas de Abu Dhabi (EAU). Esta belleza tiene una inclinación de 18 grados, lo que le ha valido el título del edificio más inclinado construido por el hombre. La torre tiene 35 pisos y simboliza la mezcla del mar y el desierto. Se supone que la construcción principal parece una espiral de arena, y el tejadillo curvado es una salpicadura de agua. Debido a esta forma única de la torre, cada planta e incluso cada habitación del interior tiene su propia forma y tamaño. La torre inclinada más alta hecha a propósito es la del Estadio Olímpico de Montreal, en Canadá. Tiene la mitad de altura que la torre Eiffel y se inclina la friolera de 45 grados. Parece bastante insegura, pero en realidad soporta la mayor parte del peso del tejado del edificio principal gracias a su diseño. La torre debía inaugurarse para los Juegos Olímpicos de 1976, pero su construcción se prolongó más de lo previsto. Sus tres últimos pisos albergan un observatorio con vistas panorámicas de hasta 80 kilómetros en todas direcciones. Un funicular puede llevarte hasta allí para disfrutar del paisaje, pero tienes que estar preparado para un viaje de 2 minutos. No te preocupes, puedes inclinarte sobre mí.

Comentarios

Recibir notificaciones
Aún no hay comentarios. ¡Puedes ser el primero!

Lecturas relacionadas