Se recomienda masajear los pies por completo, no solo ciertos puntos. Para empezar, hay que calentar los pies: camina descalzo, ponte varias veces de puntillas, hazte un baño de agua caliente para los pies.
Frota todo el pie con movimientos suaves, luego empieza a oprimir cada punto activo (3-7 segundos), avanzando desde los dedos hacia el talón. También usa técnicas como estiramiento (en el masaje de dedos), golpeados ligeros (con el costado de la mano), pellizcos y amasado.
En el proceso podrás descubrir los puntos de dolor. Esto significa que los órganos por los que responden no están bien. Debes masajear estos puntos con mayor esmero.
La técnica de masajear las áreas de dolor es oprimir (con el dedo gordo) pausadamente; todo el procedimiento no debe tomar más de un minuto. El resultado de un masaje bien realizado es la desaparición del dolor.
Para masajear los pies existen las siguientes contraindicaciones: fiebre alta, alteración de la coagulación de la sangre, exacerbación de enfermedades crónicas, lesiones o arañazos profundos en la superficie de los pies.

21 Puntos en los pies que mejoran tu salud