18 Cosas inútiles que la gente guarda durante años, aunque ha sido hora de deshacerse de ellas desde hace mucho tiempo

Consejos
hace 3 años

Hace un año, participé en una maratón de limpieza en línea que organizó una amiga. Durante 3 semanas de revisión sin prisas, saqué de nuestro departamento de dos ambientes 11 bolsas de basura que no necesitaba. Algunas de ellas fueron directamente a la basura, otras fueron a organizaciones benéficas y algunas cosas se vendieron por Internet. El departamento se volvió más espacioso y ahora es más fácil de respirar en él.

Lo principal es mirar tu casa como si la estuvieras viendo por primera vez. Cada caja, imán, papel. Y pensar si realmente los necesitas. Decidí compartir mi experiencia con los lectores de Genial.guru y contarte de qué cosas de tu departamento puedes deshacerte ahora mismo sin arrepentirte. Al final encontrarás un bono sobre cómo poner las cosas en orden en un mundo no físico.

Ropa de cama y toallas viejas

La ropa de cama no solo da forma al interior del dormitorio en gran medida, sino que también afecta la calidad del sueño. Te acostumbras a los conjuntos antiguos como si fueran parte de la familia, pero debes mirarlos desde un ángulo nuevo: por aquí hay bolitas de pelusa, por allá hay un agujero, y tus rosas favoritas en la funda ya se han desteñido hasta la indecencia. Elige un par de los conjuntos más impresentables para empezar y despídete de ellos. Esto te dará un incentivo para renovar tu ropa de cama.

No es necesario tirar la ropa de cama y las toallas viejas a la basura: se aceptan con mucho gusto en los hogares de ancianos (para hacer trapos) y en los refugios de animales. Así que puedes deshacerte de las pertenencias que ya no necesitas y hacer una buena acción al mismo tiempo.

Perchas de tiendas de ropa y tintorería

El hábito de no tirar nada nos ha sido transmitido a muchos de nosotros por nuestros padres ahorrativos, pero hoy en día, a menudo, no tiene sentido. Los colgadores de ropa endebles que se obtienen gratis al comprar cosas en una tienda o después de la limpieza en seco no mantienen bien su forma y se ven poco estéticos. Seguro hay algunas monedas en tu billetera para reemplazarlos por otros más presentables.

Cosas que han perdido su par

No importa cuán amados sean los calcetines, guantes o aretes, pero si han perdido su par, entonces no tiene sentido seguir conservándolos. Por supuesto que es mejor entregar el oro a una casa de empeño o fundirlo para hacer algo nuevo, pero puedes despedirte sin remordimiento de las manoplas, los calcetines y las joyas de poco valor que han quedado solos.

Tarjetas de presentación y de tiendas innecesarias

Muchas tiendas y servicios ofrecen tarjetas de descuento o bonificación, folletos para participar en promociones y otras pequeñas cosas. Si no te gustó el servicio o si la tienda está ubicada en un lugar donde es poco probable que vuelvas a ir, entonces no tiene sentido conservar estas tarjetas. Lo mismo ocurre con las tarjetas de presentación aleatorias, especialmente si las recibiste hace varios años y nunca las has usado.

Ropa interior desgastada por el tiempo

Incluso si solo tú puedes ver tu ropa interior, no hay necesidad de usar sujetadores estirados o bragas llenas de bolitas de tela. Una actitud tan despectiva hacia uno mismo reduce enormemente la autoestima, porque al aceptar lo peor, te privas de lo que realmente te mereces.

Además, la vida útil promedio de un sostén es de 6 meses a un año, y luego deja de cumplir su función de sostener el seno.

Empaques vacíos

Es difícil explicar por qué tantos de nosotros guardamos todo tipo de cajas. Es como la bolsa con bolsas: por si llega a hacer falta. Seamos honestos con nosotros mismos: es poco probable que vuelvas a necesitar la caja vacía de un televisor nuevo, patines de hielo, juego de construcción para niños o azucarero. Todas estas cajas se pueden entregar a un punto de recogida de residuos de papel y no solo cuidarás el medio ambiente, sino que también ganarás algo de dinero.

Ropa y zapatos que ya no se ajustan a tu estilo de vida

Antes me encantaba andar por la calle en minifaldas y vestidos cortos. Ahora la figura todavía me permite usar esta clase de ropa, pero no tengo ganas de mostrar mis piernas a extraños, y es poco probable que ese deseo me surja de nuevo. Así que revisé todo mi guardarropa sin piedad y me deshice de la ropa y de los zapatos que ya no encajan con mi estilo.

Vendí todo lo que estaba en perfecto estado a través de Internet y doné el resto al centro de ayuda de las familias numerosas (hay organizaciones benéficas similares en casi todos los distritos). Es agradable cuando las chaquetas de plumas que ya te resultan aburridas, los gorros comprados por impulso o las blusas adquiridas en una rebaja adquieren una segunda vida y se convierten en una adición deseada al guardarropa de alguien.

Cables y fundas de teléfonos viejos

Aquí vale la pena mirar las cosas con criterio: es poco probable que las fundas de los teléfonos antiguos de los que ya te has despedido vuelvan a serte útiles. Los cargadores aún pueden servir si usas modelos de la misma empresa; de lo contrario, es mejor dárselos, por ejemplo, a tus colegas. Las unidades flash y los discos rotos no tienen ningún valor, por lo que es mejor deshacerse de ellos.

Joyas y accesorios que no planeas usar

Me gusta la bisutería por su variedad y precios accesibles. Aquí puedes permitirte no elegir los clásicos eternos, sino algo que esté en el pico de la moda. Sin embargo, después de un año, queda claro que esas joyas están desactualizadas y definitivamente no las usaré en los próximos 20 años.

Lo mismo se aplica a los bolsos económicos, bufandas y chales, que se compraron por impulso y ahora no encajan en tus conceptos de lo que es la belleza. Tales cosas deben venderse o regalarse sin remordimientos, que le traigan alegría a otra persona.

Basura de papel

Los cupones de garantía que ya han caducado, los contratos de alquiler de 10 años de antigüedad, los cuadernos de estudio viejos y otros desperdicios de papel a menudo se guardan durante años, por costumbre. Todo esto, junto con las cajas descritas anteriormente, se puede convertir en papel reciclado o simplemente se puede tirar, en vez de cambiarlo de un lugar a otro.

Todo lo que haya expirado

Desecho los alimentos caducados de inmediato. Pero cuando decidí prestar atención a la fecha de fabricación de medicamentos, cosméticos, productos químicos para el hogar y productos de higiene, me esperaba una sorpresa desagradable: la mitad de las cosas terminaron en la basura. No sé cuál podría ser el riesgo de usar una crema facial o un limpiador de baño vencidos, pero ¿por qué experimentar con uno mismo y arriesgar tu salud?

Juguetes rotos o innecesarios

No siempre es fácil persuadir a un niño de que se separe de algunos de los juguetes, incluso de aquellos a los que no ha prestado atención durante mucho tiempo. Pero los niños crecen, sus intereses cambian y no hay absolutamente ninguna necesidad de que un niño en edad escolar conserve una pirámide desarmable de colores. Por eso, en mi casa tenemos la regla de las dos cajas: cuando las compras de las jugueterías ya no caben en ellas, realizamos una revisión.

Los juguetes rotos se tiran de inmediato, y aquellos para los que mi hijo ha crecido demasiado moralmente, se llevan al kínder, al arenero o se venden a través de Internet. Con el dinero que ganamos, compramos algo nuevo, sin tener que gastar parte de nuestro salario en otro camión o constructor. Esto ahorra dinero y no permite abarrotar el departamento con cosas innecesarias.

Platos con grietas, daño en el esmalte y los que ya no te gustan

Los platos astillados no solo tienen un aspecto poco estético, sino que también son peligrosos. Por ejemplo, cocinar en una bandeja para hornear o en una sartén con un revestimiento de teflón dañado puede provocar una fiebre por humo de polímeros. En este caso ni siquiera deberías pensar en ello: hay que deshacerse de esas cosas de inmediato. Siguiendo la bandeja para hornear, las ollas con esmalte dañado también fueron al cubo de basura, es mejor prevenir que curar.

Y el juego de té, que me regalaron unos familiares hace 10 años y que todo este tiempo estuvo acumulando polvo en el entrepiso, fue vendido. Tiene tan poco que ver con mi gusto que no tiene sentido guardarlo en una caja durante otros 20 años con la esperanza de que este estilo de repente comience a agradarme. Es una cosa que ocupa espacio, pero no brinda placer ni beneficio. Probablemente también tengas algo parecido.

Libros que no planeas volver a leer

Me encantan los libros de papel, así que los compro a menudo. Pero en mi colección hay algunos que he leído una vez y no quiero volver a abrirlos ni pasárselos a mis hijos. No veo ningún sentido en mantenerlos, pero tampoco podría tirarlos. Junté esos ejemplares y los llevé a la biblioteca más cercana, donde mi hijo y yo estamos registrados. Allí fueron recibidos con gratitud. Y me alegra pensar que le resultarán interesantes a alguien.

Esponjas de baño y cepillos de dientes viejos

Los expertos dicen que hay que cambiar el cepillo de dientes cada 3 o 4 meses, o incluso con más frecuencia si estuviste enfermo. La vida útil de las esponjas de baño es de seis meses en promedio, y luego se convierten en un caldo de cultivo demasiado fértil para los hongos y las bacterias. Piensa en la última vez que actualizaste tus artículos de higiene y reemplaza los viejos por otros nuevos; no solo es agradable, sino también bueno para tu salud.

Todo lo que está roto y junta polvo

Una cafetera quemada, una tetera que dejó de encenderse, un reloj que ha dejado de funcionar y botas con tacones sueltos. Probablemente haya cosas similares en absolutamente cualquier departamento. Nada de esto se tira gracias al pensamiento “Lo arreglaré algún día”, pero hay que sacar todas estas cosas y responderse honestamente a sí mismo la pregunta “¿Lo arreglaré? ¿Vale la pena?”. En caso afirmativo, lleva el objeto a reparación o arréglalo tú mismo; de lo contrario, llévalo a la basura y despeja la casa.

Recuerdos e imanes que no agradan

Las baratijas que nos regalan los colegas o los familiares que regresan de vacaciones y que a menudo guardamos durante años solo por cortesía. Todos estos premios del año de plástico o los elaborados imanes de una ciudad de veraneo no son nada agradables a la vista y acumulan polvo. Mira los souvenirs desde una nueva perspectiva y deja solo los que realmente te gustan o que aprecias. El lugar del resto está en la papelera.

Cualquier cosa que se haya secado o terminado

Cuando era pequeña, nunca tiraba los bolígrafos porque podías comprar rellenos de tinta y reemplazarlos. Ahora, el precio de los suministros de oficina estándar es bajo y es más fácil comprar bolígrafos nuevos que encontrar los componentes necesarios para los viejos. Nadie rellena con colonia los rotuladores de los niños, así que, si han dejado de escribir, no tiene sentido guardarlos. Revisa y tira todo lo que ya se haya secado, desde esmaltes de uñas hasta marcadores antiguos.

También vale la pena enviar a la basura los frascos de tu perfume favorito que se han agotado o llevan demasiado tiempo en tu estantería. Los expertos dicen que el eau de toilette no debe almacenarse por más de 3 a 5 años, y menos si los rayos del sol caen sobre él. Las fragancias caducadas pueden causar alergias o simplemente cambiar el aroma, ¿por qué arriesgarse?

Bono: no olvides limpiar tu correo electrónico y redes sociales

Es difícil imaginar la vida moderna sin comunicación en Internet, pero aquí también sería bueno poner las cosas en orden. Mira tus contactos en las redes sociales y piensa si realmente necesitas a todas las personas que figuran como tus amigos. Si no puedes recordar a una persona y hay un solo posteo del año 2015 en su página, ¿para qué necesitas ese contacto?

Había más de 25 mil correos electrónicos en mi bandeja de entrada y, después de la limpieza, quedaron 10 veces menos. Debido a las montañas de spam y notificaciones innecesarias, me perdí algunos mensajes importantes del trabajo y los desenterré por accidente mientras limpiaba la bandeja de entrada. Aun así, vale la pena realizar esta revisión al menos un par de veces al año para no perder oportunidades.

¿Qué otras cosas que definitivamente vale la pena tirar en vez de dejar que ensucien tu casa te gustaría agregar a esta lista?

Imagen de portada depositphotos

Comentarios

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No estoy de acuerdo con deshacerse de los libros.
En cuanto a las cajas depende del origen y de cómo se almacenen. Una caja de laptop bien plegada no ocupa espacio y aumenta el valor de reventa del equipo (ni hablar de las cajas de iPhone que se venden incluso solas)

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