10 Trucos que puedes comenzar a aplicar para convertirte en un experto en ahorro

A muchos de nosotros nos cuesta ahorrar dinero, ya que realizamos gastos no planificados o impulsivos, como una prenda de ropa que vimos y nos gustó, o una salida con amigos que surgió inesperadamente. En un primer momento, esto nos puede causar satisfacción, pero al final del mes, podríamos arrepentirnos de no haber guardado ese dinero para nuestros ahorros.

Genial.guru no puede esperar para compartir contigo algunos consejos que te ayudarán a evitar esos gastos impulsivos y te permitirán ahorrar cada vez más. Al final del artículo, encontrarás un bono.

1. Planifica tus compras con anticipación

Reserva un tiempo estimado de una hora a la semana para fijar el menú de las comidas que se prepararán en casa, si es que cocinan en ella, así como para la elaboración de la lista de compras del súper. Luego, lista en mano, puedes ir a las tiendas o al mercado sin el inconveniente de no saber qué es lo que te podría faltar y, por lo tanto, llevar cosas de más por las dudas.

2. Diferencia lo que necesitas de lo que quieres

Puede suceder que cuando sales de compras, encuentres algo que te gusta, pero que no estaba dentro de tu lista inicial. En ese momento preciso deberías preguntarte: ¿lo necesito o lo deseo? Estos dos conceptos se diferencian en que uno necesita aquello que es imprescindible para vivir (como los productos básicos), mientras que uno desea las cosas de las que podría prescindir, y cuya función no es satisfacer una necesidad básica.

3. Tómate tu tiempo

Si ves algo que te gusta, pero que no tenías pensado adquirir, sé paciente y espera unos días para establecer si realmente era algo que necesitabas. Al enfriarse ese deseo de compra, podrás ver más racionalmente si vale la pena regresar a la tienda por el producto que habías visto y te había gustado, o no.

4. Regálate un presupuesto flexible

Además de los gastos mensuales que ya has contemplado en tu presupuesto personal, establece un límite de presupuesto para aquellas pequeñas cosas que podrían surgir de improviso o para las cosas que quieras hacer o comprar, pero que no sean consideradas una necesidad. Esto puede incluir salidas a algún restaurante, tomar un curso especializado, regalos o entretenimiento en general. Recuerda que ceñirse a un presupuesto no significa que no podamos darnos algunos gustos, siempre y cuando no sea algo de todos los días.

5. Ten cuidado con las compras en línea

A diferencia de las tiendas físicas, las tiendas en línea están abiertas las 24 horas del día, los siete días de la semana, lo que hace aún más tentador comprar a través de este medio. Además, como nos encontramos en la comodidad de nuestra casa y no vemos el producto físicamente, podemos equivocarnos al hacer este tipo de compras. Por ejemplo, podemos escoger mal la talla de ciertas prendas, establecer un medio de entrega muy costoso o recibir un producto que no es lo que esperábamos y dar nuestro dinero por perdido.

6. Ojo con los gastos de la tarjeta de crédito

Las tarjetas de crédito funcionan bajo el acuerdo del crédito revolvente, mediante el cual una persona puede hacer compras y pagarlas un tiempo después. Este método, si no es bien utilizado, puede ser muy dañino, porque las personas pueden caer en un círculo de deudas del cual luego es muy difícil salir, ya que el consumidor no siempre es consciente de la cantidad de dinero que está gastando en sus compras. Para tener un mayor control, es recomendable no tener muchas tarjetas de crédito al mismo tiempo.

Otra buena idea es pagar en efectivo cada vez que puedas. De esta forma, serás más consciente de cómo el dinero va disminuyendo, lo que te hará cuidarlo más y evitar gastarlo todo. Esto no sucede con las tarjetas de crédito, ya que vemos la cuenta recién después de un tiempo.

7. No tengas miedo de perderte ofertas

Existe una técnica de marketing llamada FOMO, que suelen usar muchas tiendas. Consiste en presentar una oferta como un gran evento, diciendo que es exclusiva y por tiempo limitado, entre otros beneficios para el cliente. Esto hace que las personas quieran comprar esos productos rápidamente, por temor a perder la oferta. Sin embargo, esta es solo una ilusión por la que creemos que estamos ahorrando dinero en algo cuando, muchas veces, no lo necesitamos realmente.

8. Intenta no hacer compras solo para levantar tu ánimo

Muchas personas solemos ir de compras por un motivo más sentimental que racional, dependiendo de nuestro estado de ánimo. Sin embargo, esto puede llevar a que compremos cosas que realmente no necesitamos y que terminemos acumulándolas o gastando demasiado. Recuerda que el simple hecho de comprar no es algo que te vaya a hacer sentir bien a largo plazo, sino tan solo en ese momento. En su lugar, podrías realizar alguna otra actividad que te divierta y que te beneficie más, como hacer ejercicio o practicar algún hobby.

9. Depura tu correo electrónico

Por definición, aquellas compras realizadas gracias a un correo electrónico no deseado o spam ya pueden considerarse como impulsivas, ya que no fuimos nosotros los que buscamos adquirir ese producto, sino que simplemente llegó a nosotros a través de nuestro correo. Hoy en día existen distintas aplicaciones que te pueden ayudar a eliminar la suscripción a este tipo de publicidad.

10. Organizar antes de comprar

Algunas veces, cuando se nos presenta la necesidad de comprar algo, no nos paramos a revisar si ya tenemos otra cosa que lo pueda sustituir. De esta manera, podríamos evitar gastar dinero en vano. Por eso, siempre es mejor revisar y organizar nuestras cosas antes de comprar algo nuevo, ya que nos podríamos llevar una sorpresa muy agradable para nuestro bolsillo.

Bono: Trata de pasar una semana al año sin gastar ni un centavo

El experto en ahorro y escritor Jeff Yeager propone en uno de sus libros algo llamado “ayuno fiscal”, un método que propone pasar una semana al año sin gastar nada de dinero. En su lugar, las personas deben consumir únicamente lo que tienen en casa, buscar opciones de entretenimiento gratuitas, etc. El autor asegura que este hábito te ayudará a ahorrar, a mejorar tus hábitos de consumo y a tener una mejor perspectiva acerca del valor de las cosas.

¿Practicas alguno de estos consejos? ¿Qué haces para ahorrar?