Yo usaba la ropa de mis hermanas, por eso estrenar ropa para mí es novedad
Personas que crecieron siendo pobres contaron qué cosas consideraban lujos en su infancia

Cuando somos niños, damos muchas cosas por sentado: frutas que siempre se encuentran en una canasta sobre la mesa; galletas que se pueden remojar en un café con leche todas las mañanas; cosas que, cuando se rompen, sin duda recibimos otras nuevas a cambio. En una atmósfera de prosperidad, rara vez pensamos qué cosas de la vida diaria son un lujo para otras personas.
En Genial.guru recientemente nos topamos con publicaciones de personas que crecieron en la pobreza. Contaron lo que les hizo falta y el tipo de cosas que, con el tiempo, se convirtieron para ellos en indicios de “riqueza”. Es sorprendente lo simples y asequibles que parecen ser ahora estos objetos.
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Sin importar si creciste en una familia adinerada o no, cuéntanos qué dificultades económicas has pasado en tu vida.
Comentarios
Viajar a la playa para nosotros era un lujo
Quizás por el lugar donde vivía o no había o no sabía que existían, pero la primera vez que probé una pizza fue cuando llegué a la ciudad, mi hermana dándome la bienvenida, me pareció formidable, pero era un lujo para mí adquirirla, ahora de vez en cuando puedo comprarla, gracias a Dios y también ahora ya hay eso y más allá en mi pequeño pueblo.
Un lujo para mis hermanos y para mí era estar en un hotel más de un mes. Mi madre era madre soltera y muchas veces por no dejarnos sin comer ( la cena a veces era mate cocido y pan) no pagaba el alquiler y nos echaban a la calle Hoy por hoy tengo mi propio departamento y es la gloria no tener que pagar alquiler.
un lujo... la ropa interior que no era de segunda mano
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