Me mudé a Suiza y entendí por qué en este país hay tantos millonarios

Lugares
hace 2 años

¡Hola! Me llamo Olga y llevo más de 5 años viviendo en Ginebra. Dejé mi vida habitual en mi país de origen y la carrera en la banca para trabajar de chef pastelera y escribir artículos sobre viajes. Pero primero lo primero.

Especialmente para los lectores de Genial.guru, compartiré las peculiaridades de la vida suiza y les contaré cómo es la vida en una ciudad donde cada 6º residente es millonario. A final del artículo te espera un bono que te ayudará a conocer Ginebra sin recurrir a los servicios de un guía.

Cómo empezó todo

Sucedió que a mi esposo le ofrecieron un trabajo en Ginebra y decidimos mudarnos. Ya habíamos estado en Suiza, pero vivir y visitar son dos cosas completamente diferentes. Antes de partir, comencé a estudiar en detalle la información que pude encontrar en Internet sobre las peculiaridades de la vida en Ginebra. Pero tengo que admitir que no logré averiguar mucho. Así que tuve la idea de crear mi blog y describir entrando en detalles todo sobre nuestra mudanza y simplemente compartir mis impresiones sobre nuestros viajes que tal vez sean útiles para alguien.

Costo de vida en Ginebra

4,87 USD por un pepino orgánico

Antes de mudarnos, todo el mundo nos advirtió de que la vida en Ginebra era increíblemente cara. Es lo que hay. Recuerdo que me sorprendieron los precios: 5,5 CHF (franco suizo — CHF; 1 CHF = 0,99 USD) por un vaso de agua en la cafetería normal y corriente y 115 CHF (114,36 USD) por un kilo de filete de res. ¡Estoy hablando de un simple filete, no de ternera de mármol!

Con el tiempo, aprendimos que la mayoría de los residentes locales compran alimentos en el mercado o van a la vecina Francia, que está a 20 minutos del centro de Ginebra. Los precios son realmente diferentes, algunos productos pueden costar casi 2 veces menos. La misma carne costará alrededor de 30–35 CHF (29,83–34,81 USD).

Por ejemplo, estas magdalenas de la tienda "Coop" cuestan 5,87 USD en Ginebra, y en Francia - 2,93 USD.

Por supuesto, existen ciertas limitaciones para la compra de alimentos en Francia y su posterior transporte a través de la frontera. Primero, la cantidad de compras por persona no debe exceder los 300 euros (334 USD), de lo contrario, habrá que pagar impuestos en la frontera. Y en segundo lugar, en Suiza hay límites para ciertos tipos de alimentos. Por ejemplo, no puedes transportar más de 1 kg de carne. Si vas a comprar comestibles con tu cónyuge, entonces, el límite aumenta en 2 veces.

Alquilar un apartamento es un reto más

El alquiler de este apartamento de 2 dormitorios con una cocina antigua sin estufa es de 3 150 CHF al mes (3 132 USD).

Cuando nos mudamos, nos enfrentamos a un gran problema al alquilar un departamento. El hecho es que incluso la población local prefiere no comprar bienes raíces, sino alquilar. Según algunos informes, solo el 40 % de los residentes suizos tienen una vivienda en su propiedad, mientras que todos los demás las alquilan.

¡A veces, para ver un apartamento en Ginebra vienen 50 personas a la vez! Aprovechando esta situación, los dueños de la vivienda organizan unos verdaderos castings para sus futuros inquilinos, pidiéndoles información y papeles, como si estuvieran tramitando un préstamo bancario, y eligiendo a aquellos que están dispuestos a firmar un contrato por muchos años.

El costo promedio de un apartamento de 2–3 dormitorios es de 2 800–4 000 CHF al mes (2 784–3 977 USD). Cualquier vivienda que cueste menos o bien se encuentra en las afueras de la ciudad, o bien es pequeña y tiene algunos defectos (tiene una obra de construcción al lado, está cerca del ferrocarril, está ubicada en un sótano con salida y ventanas a la carretera). A veces, por supuesto, puedes encontrar un buen apartamento a un precio más bajo, pero pocos tienen tanta suerte.

La medicina no es tan perfecta

La medicina suiza ocupa un lugar destacado en todo el mundo. ¿Pero quién hubiera pensado que puede haber tantas dificultades con un pediatra?

Al mudarme, traté de pedir cita con el médico para mi hija. Primero, fue la barrera lingüística: dondequiera que llamara, en todas partes me respondían en francés (mi conocimiento del idioma se limitaba a un par de frases) y, a veces, me atendían contestadores automáticos. Si lograba establecer contacto, me respondían que no tenían posibilidad de apuntar más pacientes. Al final, una de las madres de nuestra guardería, que vive aquí desde ya hace mucho tiempo, me ayudó a conseguir una cita con un pediatra.

Clínica Grangette — allí fuimos siguiendo la recomendación de mi conocida. El edificio moderno con un acuario lleno de peces, zona infantil con libros y solo a 5-10 minutos del centro de Ginebra.

Todos los que viven en Suiza durante más de 3 meses deben tener un seguro médico. El seguro, incluso básico, es bastante caro: alrededor de 300 CHF (298 USD) por mes, y para un niño: 100–150 por mes (99–149 USD). Los servicios de dentista no están incluidos en este precio.

Sin embargo, si una persona acude al hospital sin seguro, será atendida en cualquier caso. Si el paciente no tiene hogar o está desempleado y no puede pagar, lo atenderán de forma gratuita.

Así es como se ve un consultorio en una clínica habitual de la ciudad.

En este país los médicos no suelen atender a los pacientes a domicilio, ni siquiera a los niños. Para casos de emergencia, existe el servicio SOS Médecins, pero vendrá un médico general, no un pediatra.

Si un adulto está enfermo, debe ir a la clínica o llamar a una ambulancia. Una llamada puede costar alrededor de 1 000 CHF (994 USD), aunque nadie puede indicar el precio exacto. Sin embargo, el caso debería ser simplemente catastrófico, con una amenaza real para la vida. En tal caso, incluso pueden enviar un helicóptero.

Las multas

Los suizos están acostumbrados a vivir de acuerdo con las reglas y suelen castigar severamente a aquellos que las violan. Por ejemplo, no se puede hacer ruido después de las 10:00 p.m. e incluso sacar la basura los fines de semana o cortar el césped para no molestar a los vecinos, de lo contrario los últimos no dudarán en llamar a la policía. Las multas por hablar por teléfono conduciendo, aparcamiento incorrecto, exceso de velocidad, etc. son muy elevadas. Una vez tuvimos que pagar 180 CHF (179 USD), por aparcar el auto en el estacionamiento después de que se cerró a las 19:00, tuvimos que pagar una multa para abrirlo. Y recientemente, un policía (!) recibió una multa de 600 CHF (596 USD) por superar la velocidad máxima permitida persiguiendo a unos delincuentes.

Cada año, al planificar el presupuesto, se calcula cuántas multas debe pagar cada residente local. Por ejemplo, en Zúrich, según el plan para este año, son 152 CHF (151 USD) por persona.

Cómo me convertí en una pastelera suiza

Siempre me ha gustado la pastelería. Hornear, mezclar texturas, decorar, esto es lo que me encanta. Hace 3 años comencé a hacer pasteles por encargo. Al principio era solo una afición, pero Ginebra es una ciudad muy pequeña, por lo que la información se difunde con mucha velocidad. Comencé a recibir pedidos no solo de los suscriptores de mi blog, sino también de clientes locales, así como familiares y padres de los compañeros de clase de mis hijos.

Actualmente, no puedo hacer frente a todos los pedidos sola, así que decidí abrir un café. Pero tengo algunos problemas. Primero hay que obtener un montón de permisos, luego esperar otro mes para asegurarse de que los vecinos no tienen nada en contra. Otro problema es encontrar un local con alquiler y ubicación adecuados. Por ejemplo, hubo un caso cuando fui a ver un edificio de 4 plantas en el centro de la ciudad, cerca del lago Ginebra. Allí, en el primer piso, podría montar una pequeña y acogedora cafetería, pero me dijeron que el precio era de 23 mil CHF (22 871 USD). Al principio pensé que era el alquiler de los 4 pisos, pero resultó que era el precio de solo 68 metros cuadrados.

No puedo decir que mi vida es muy fácil, pero voy progresando hacia mi objetivo. Por lo tanto, espero muy pronto poder invitar a todo el mundo a mi propia pastelería.

El plato favorito de los auténticos ginebrinos

Tenemos una cazuela para fondue en nuestra casa.

Si vienes a Ginebra y no pruebas la fondue entonces no aprendes nada sobre Suiza, aquí es casi como la ceremonia del té en Inglaterra. Por lo tanto, casi todas las familias tienen su propia cazuela para fondue en casa, y en los supermercados se venden juegos de fondue (aunque es más probable que sean destinados a turistas).

Las principales variedades de fondue son de queso, de carne y de chocolate. Aunque en los restaurantes a menudo se puede encontrar una gran variedad de sabores: queso con champagne, hongos, trufas, tocino, etc. Personalmente, prefiero la de queso, aunque para muchos el olor del queso fundido es demasiado específico.

Peculiaridades de la mentalidad suiza

Me encanta vivir en Ginebra. Pero lo que más me falta aquí es la relación abierta y cálida entre la gente. Los suizos no dejan que las nuevas personas entren de inmediato a su mundo, te observan y analizan durante mucho tiempo antes de empezar a confiar en ti. Aunque, por supuesto, hay excepciones.

También me he dado cuenta de que los ginebrinos no pueden imaginar su vida sin la planificación. Reuniones con amigos, viajes de vacaciones, fines de semana: todo está siempre programado con antelación y es muy similar de un año a otro. Anteriormente, me parecía extraño que una persona tuviera tanta confianza en su futuro y sus capacidades financieras. Pero ya me acostumbré a vivir así y creo que tenemos mucho que aprender de los suizos.

Tener un millón en la cuenta no significa nada

Después de haber vivido en Ginebra durante 5 años, entendí por qué hay tantos millonarios aquí y qué significa esto. Cada suizo tiene un promedio de 0,5 millones de USD en su cuenta: estos son los datos del Informe anual de riqueza global (Global Wealth Report) elaborado por el banco Credit Suisse. Por eso se cree que las personas más ricas del planeta viven aquí.

Pero hay que tener en cuenta muchos factores. Primero, esto es solo un promedio. De acuerdo con los mismos datos, solo el 10,6 % de los suizos posee más de 1 millón USD, y algunos no tienen ni 10 mil USD, es decir, no todos los suizos son fabulosamente ricos.

En segundo lugar, lo más probable es que esta cantidad también incluya los ahorros de pensión. Puede usarse, por ejemplo, para comprar bienes raíces o para cobrar la propia pensión. Es decir, no es un millón en efectivo, sino ahorros que son inaccesibles hasta cierto momento.

En tercer lugar, muy pocos suizos gastan mucho dinero comprando autos caros y ropa de marca. La modestia, el ahorro, el ascetismo y el respeto por el trabajo son los cimientos del protestantismo, la religión en Suiza desde la Edad Media. Por lo tanto, la tradición de ahorro de los residentes locales se transmite de generación en generación.

En cuarto lugar, aquí ni siquiera puedes comprar una casa por un millón de francos, excepto en un pequeño pueblo alejado de las ciudades principales. Los precios son muy altos, por lo que incluso los millonarios tienen que llevar una vida modesta.

Lugares imprescindibles qué visitar en Suiza

En Ginebra, no hay tantas atracciones: una fuente en el lago, la catedral de San Pedro y la hermosa vista desde sus torres, el reloj floral. Pero al mismo tiempo, hay muchos pequeños detalles y lugares que solo los residentes locales conocen. Por ejemplo, hay un castaño que ayuda a la oficina de alcalde a determinar oficialmente la llegada de la primavera, así como inscripciones en varios idiomas en pavimentos e historias especiales sobre la creación de marcas de relojes y boutiques de chocolate.

Hasta mañana, ¡Salud!

En cuanto a los recuerdos, lleva a casa queso gruyer y chocolate (pero no lo compres en un supermercado, sino en una de las boutiques de chocolate). Deberías probar la bebida suiza Rivella. El aspecto que tiene y su sabor recuerdan a los refrescos dulces, pero está hecha de suero de leche. Los conocedores del vino tinto tienen que probar L’Esprit de Genève (Espíritu de Ginebra) que se produce por los mejores enólogos de la región.

Bono: 10 cosas que vale la pena hacer en Ginebra

  1. Alimentar a los cisnes cerca del lago de Ginebra.
  2. Mojarse bajo el chorro de agua de la fuente Jet d’Eau.
  3. Visitar el restaurante Le Chat Botte, galardonado con una estrella Michelin (costo de las comidas, a partir de 25 USD).
  4. Pasear por el casco antiguo.
  5. Probarse en el papel de chocolatero en la clase magistral de la famosa marca Stettler de Ginebra y preparar personalmente una barra de tu chocolate favorito con nueces, frutas confitadas, praliné o migas doradas.
  6. Dar un paseo en barco por el lago.
  7. Ver la silla gigante cerca del edificio de la ONU.
  8. Visitar el museo de relojes Patek Philippe.
  9. Hacer el tour gratuito por la ciudad que comienza todos los días a las 11:00 cerca del reloj floral.
  10. Cenar en uno de los restaurantes más antiguos de Ginebra, Hôtel de Ville. Probar una fondue con papas cocidas sin pelar, la famosa salchicha de cerdo Longeole con hinojo y vino blanco Chasselas de viñedos locales.

¿Te gustaría visitar Suiza?

Imagen de portada knowabroad / instagram

Comentarios

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Viví en Ginebra y una vez recuerdo estando a medidados de diciembre, una amiga me consulta si el 18 de febrero próximo yo estaria disponible, ya que quería invitarme a lo de una amiga a comer pizzas... ?... debía responder no más tardar en dos días, si para eso se precisaba 2 meses de anticipación no me quiero imaginar un casamiento... ?

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