Somos fuertes, eh?
9 Mujeres aviadoras de América Latina que lucharon por cumplir su sueño de volar
La participación de las mujeres en la aviación es escasa, principalmente en América Latina, y quizá sea porque el pilotaje de aeroplanos es considerado un trabajo netamente “masculino”. Sin embargo, a lo largo de la historia existieron mujeres de origen latino que derribaron los tabúes y consiguieron cumplir su más grande sueño: volar. Para hacerlo tuvieron que enfrentar todo tipo de retos con gran audacia, valentía y esfuerzo. Sin embargo, lograron hacerlo, dejándonos un enorme legado.
1. Anésia Pinheiro Machado (1904 — 1999)
Por un día de diferencia, Anésia Pinheiro Machado no fue la primera, sino la segunda mujer en obtener la licencia para volar en Brasil. A ella le fue mucho mejor que a Thereza, pues nadie se opuso a su carrera como piloto, en la que cosechó varios éxitos. En 1922, después de licenciarse, fue la primera mujer en llevar a un pasajero en su avión. También fue la primera en participar en vuelos de acrobacia.
A los 18 años, solo cinco meses de recibir el carné de piloto, Anésia realizó su primer viaje interestatal entre São Paulo y Río de Janeiro. Esto representó una gran hazaña para la época, pues el vuelo se realizó en condiciones muy riesgosas. Le tomo cuatro días llegar a destino, donde las autoridades la recibieron para entregarle un premio: una medalla de oro obsequiada por el mismísimo Alberto Santos Dumont, pionero de la aviación brasileña.
2. Ada Leda Rogato (1910 — 1986)
Desde joven, Ada Rogato sintió pasión por el vuelo, lo que la llevo a obtener la licencia para pilotar en 1935. Además, fue la primera mujer paracaidista. Destacó en acrobacias aéreas y, tiempo más tarde, trabajó como piloto agrícola en Brasil.
A partir de la década del 50, sus hazañas comenzaron a llamar la atención del mundo. Por ejemplo: fue la primera en cruzar los Andes, en llegar a Alaska, al aeropuerto de La Paz, Bolivia (el más alto del mundo en ese entonces), en cruzar la selva amazónica con solo una brújula, en llegar sola a Tierra del Fuego, Argentina, entre otras valientes proezas. Por su impresionante currículum, Ada fue la primera mujer en recibir el premio de la Orden del Mérito Aeronáutico, además de otros importantes reconocimientos.
3. Margot Duhalde Sotomayor (1920 — 2018)
Tenía dieciséis años cuando decidió ser piloto de avión. Para lograr su objetivo, mintió sobre su edad e ingresó al curso de pilotos en Chile. Una vez graduada, viajó a Europa, donde llegó a ser la primera mujer piloto de guerra. Gracias a esa misión, Margot tuvo la oportunidad de volar más de cien tipos de aviones. En 1947 volvió a su país natal, donde trabajó como piloto privado y comercial.
Tiempo después llegó a ser la jefa de la torre de control en la Fuerza Aérea de Chile, cargo que mantuvo durante cuarenta años. Su increíble vida fue plasmada en un libro autobiográfico escrito por ella misma. Por supuesto, fue reconocida a lo largo de su carrera con varios e importantes premios.
4. Mirta Vanni (1924)
Nacida en Uruguay, Mirta Vanni decidió que quería ser piloto a los dieciséis años. Su familia le dio permiso, por lo que realizó el curso y recibió su carné en 1941. Se desempeñó más que nada en el sector agrícola, realizando vuelos de fertilización y siembra. En ese ámbito tuvo una carrera repleta de logros y éxitos, los cuales la hicieron merecedora de importantes reconocimientos nacionales e internacionales.
También destacó como instructora de vuelo y mecánica de mantenimiento. Llegó a ser Directora General del Servicio Aéreo del Ministerio. En 1959 colaboró en el trasporte de personas y medicinas durante una gran inundación que afectó a su país. Finalmente, después de 43 años de trabajo y más de siete mil horas de vuelo, Mirta se retiró de la actividad a la que dedicó su vida entera.
5. Joana Martins Castilho D’Alessandro (1924 — 1991)
Con tan solo 14 años, Joaninha, como solían llamarla, se convirtió en la acróbata aérea más joven del mundo. A esa edad también fue la primera en volar en solitario. En 1940 ganó el campeonato de acrobacia y, a partir de ese momento, fue conocida como “la novia del aire”. Sus orgullosos padres apoyaron la creciente carrera de Joana solventando sus gastos de vuelo.
El objetivo de la joven era que muchas más mujeres se animaran a participar en carreras aeronáuticas. Aunque nació en São Paulo, Brasil, creció y vivió en Taubaté. Se hizo tan famosa, que una bebida refrescante producida en la región llevaba su fotografía.
6. Berta Zerón (1924 — 2000)
Comenzó como secretaria en el Servicio Aéreo Panini, en México, su país natal. Dentro de ese entorno crecieron sus ganas de volar. En 1964 entró en la Escuela de Aviación Nacional, y a los 25 días experimentó su primer vuelo en solitario. Obtuvo su licencia de piloto en 1965. También fue paracaidista e instructora de vuelo, y en su haber hubo varias carreras, de las cuales ganó una en 1972.
Berta fue la primera mujer mexicana en obtener la licencia de Transporte Público Ilimitado (TPI) y en tripular aviones turborreactores. Se retiró en 1996, con más de diez mil horas de vuelo y dos condecoraciones.
7. Olga E. Custodio (1953)
Olga se convirtió en la primera mujer piloto militar hispana. Nacida en Puerto Rico, su padre era sargento del Ejército de Estados Unidos. Este hecho, sumado a los viajes que experimentó desde pequeña, la animó a volar. De joven intentó unirse al Cuerpo de Entrenamiento de Oficiales de Reserva, pero en ese momento solo podían hacerlo los hombres.
Años más tarde, con el apoyo de su esposo, solicitó cupo en la Escuela de Entrenamiento de Oficiales de la Fuerza Aérea de Estados Unidos y fue aceptada. Se graduó un año después. La asignaron a una base de Texas, donde también fue la primera mujer latina instructora de vuelo. En 1988 concilió su trabajo en la Fuerza Aérea con el cargo de piloto comercial en American Airlines, siendo la primera capitana comercial latina. En ese puesto pudo tripular diferentes tipos de aviones tan grandes como el Boeing. Tras casi 24 años de servicio, Olga Custodio se retiró.
8. Marisol A. Chalas (1975)
De origen dominicano, Marisol Chalas comenzó su carrera como piloto militar en Estados unidos, en 1990, posicionándose como una de las mejores en la Escuela de Aviación del Ejército. En 2001 recibió su comisión como Teniente Segundo, y, a partir de ahí, su carrera solo ascendió. En los años que lleva como piloto ha servido en varios puestos de liderazgo, e incluso tiene otros importantes títulos universitarios y una carrera en curso.
9. Andrea Cruz Hernández (1990)
Andrea Cruz Hernández se convirtió en la primera mujer mexicana en ingresar al Colegio del Aire luego de que se abrieran los cupos femeninos. En 2009 realizó su primer vuelo en solitario, pilotando un avión Bonanza. Ese mismo año se graduó como piloto, y en 2011 recibió la Licenciatura en Ciencias Militares Piloto Aviador. Su nombre será recordado por siempre porque antes de que ella lograra entrar en las Fuerzas Armadas Mexicanas para tripular un avión, las mujeres no tenían acceso a esa especialización.
Comentarios
Gracias por mostrarnos informaciones importantes de la História de latinoamericanas tan valientes.
Bravo por ellas! Unas pioneras en este campo
Curiosa la diferencia de un día entre la primera y la segunda piloto
Wooow Joana pilotando con tan solo 14 años :O