No quería que mi suegra le enviara regalos a mi hija, así que le di mal nuestra dirección

En la pantalla, nuestros actores y actrices favoritos nos cautivan con su piel impecable, figuras perfectas y movimientos elegantes. Cualquier prenda parece hecha a medida para ellos. Sin embargo, muchas veces, esa perfección es resultado de la magia de los efectos visuales y la edición digital. Aquí te mostramos algunos casos donde se usaron trucos tecnológicos para lograr el aspecto de los personajes.
En esta precuela de la saga Mad Max, tal vez te impresionó lo mucho que se parecían Elayla Brown y Anya Taylor-Joy, quienes interpretaron a Furiosa en distintas edades. Sin embargo, este parecido no fue mérito exclusivo de los responsables del casting, sino una decisión creativa del director, quien recurrió a efectos visuales.
Con ayuda de la tecnología, mezclaron los rasgos de la joven Elayla con los de Anya Taylor-Joy, haciendo que la niña se pareciera cada vez más a su contraparte adulta en cada escena. Al inicio de la película, el rostro de Elayla estaba compuesto en un 35% por las características de Anya, y hacia el final, alcanzaba un 80%.
Durante el rodaje de la segunda temporada de Homeland, Claire Danes estaba embarazada de 7 meses. Para ocultar su embarazo, los creadores del show usaron efectos visuales para disimular su vientre. La actriz confesó que filmar escenas románticas mientras estaba embarazada fue extremadamente incómodo. "Es horrible", resumió Claire.
En otro artículo, exploramos cómo otras actrices han ocultado sus embarazos durante el rodaje de películas.
Orlando Bloom interpretó a Legolas por primera vez en El Señor de los Anillos cuando tenía 22 años. Sin embargo, cuando regresó para la trilogía de El Hobbit, ya tenía 36. Como la nueva saga era una precuela, el personaje no podía lucir más viejo que en la trilogía original.
Para resolver esto, los creadores optaron por rejuvenecer digitalmente al actor. Sin embargo, los resultados no fueron del agrado de todos. Algunos medios comentaron: "Bloom no parece más joven que en 'La Comunidad del Anillo': su rostro se ve más ancho, la línea de su mandíbula más definida, pero sus ojos tienen un aspecto artificial que resulta extraño. Hubiera sido mejor dejarlo como estaba y ahorrar ese dinero".
Jessica Alba reveló que durante el rodaje de Into the Blue no se sintió nada cómoda. Originalmente, se había acordado que usaría un traje de neopreno, pero la convencieron para llevar un bikini extremadamente revelador.
La actriz se sentía tan incómoda que se envolvía en toallas cada vez que podía. Lo curioso es que, a pesar de las molestias causadas, los creadores del filme terminaron retocando el bikini en la edición para hacerlo menos provocativo. Es difícil imaginar cuán pequeño era originalmente.
Durante la postproducción de Diamante de sangre, los creadores decidieron hacer una de las escenas de Jennifer Connelly más emotiva añadiendo lágrimas digitales. En lugar de llamar a la actriz para rodar nuevas tomas, optaron por recurrir a efectos especiales. El resultado fue tan convincente que nadie notó la diferencia en pantalla. Una vez más, la magia del cine nos engañó.
En Yo, Tonya, Margot Robbie interpretó a una patinadora artística, pero, por más que se preparara para el papel, las escenas de saltos complicados requerían a una profesional. Para estas escenas, contrataron a una patinadora, y luego reemplazaron digitalmente su cabeza con la de Margot Robbie. Utilizando un escaneo de las expresiones faciales de la actriz, crearon una réplica digital de su rostro que se integró perfectamente en las tomas.
En Ghost Rider, Nicolas Cage lució un torso impresionante en las escenas sin camisa. Sin embargo, los rumores sobre el uso de efectos digitales no tardaron en surgir. El director negó haber usado retoques, pero fotos tomadas durante el rodaje mostraron un abdomen que, aunque tonificado, no era tan esculpido como el que vimos en pantalla. Parece que el poder de los gráficos ayudó a “mejorar” un poco al actor.
Se rumoró que los creadores de Herbie: A toda marcha, producida por Disney, decidieron reducir digitalmente el busto de Lindsay Lohan. Al parecer, temían que su figura pudiera resultar inapropiada para el público familiar de la película. Aunque los rumores nunca fueron confirmados por el director, el caso sigue siendo un ejemplo de cómo incluso detalles inesperados pueden ser modificados en postproducción.
Durante el rodaje de ¡Te atrapé!, Jeremy Renner sufrió un accidente en el que se rompió ambas manos apenas en el tercer día de filmación. En lugar de pausar la producción, el actor continuó trabajando con vendajes verdes, que más tarde fueron reemplazados digitalmente por manos generadas por computadora. Gracias a esta solución creativa, logró completar el rodaje sin retrasos.
En Aquaman, el aspecto impecable de Nicole Kidman llamó la atención de muchos críticos y espectadores. Aunque los productores no confirmaron si usaron retoques digitales, las opiniones apuntan a un claro rejuvenecimiento de la actriz. Algunos espectadores incluso calificaron los efectos en su rostro como “extremos” e “innecesarios”, destacando que la magia digital no siempre es bienvenida.
Si te fascinó este recorrido por los trucos digitales del séptimo arte, en este artículo compartimos fotos exclusivas detrás de cámaras.