La profesión de actor implica encarnar personajes completamente diferentes. Para ello, muchos se enfrentan a desafíos únicos: algunos pierden o aumentan peso, otros pasan largas horas en maquillaje, mientras que algunos llegan a someterse a pruebas psicológicas para interpretar mejor sus roles. Hoy recordamos a los actores que no tienen miedo de transformarse físicamente, incluso si eso significa dejar de lado su atractivo habitual.
Cualquier profesión tiene sus desafíos, y la actuación no es la excepción. Sin embargo, aquellos que lograron la fama lo hicieron porque, en su momento, nunca abandonaron sus sueños.
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