¡Nada es suerte sino bendición del Señor a tus problemas y peticiones!
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A veces, es necesario esforzarse mucho para alcanzar un resultado, y otras veces, las cosas parecen suceder como por arte de magia. En ambos casos, nunca hay que subestimar el papel de la suerte, ese toque final que puede llevarnos a la meta. Aquí compartimos historias de personas que experimentaron momentos de pura fortuna.
La suerte puede manifestarse de muchas maneras. ¿Tienes una historia en la que crees que el destino jugó a tu favor?
¡Nada es suerte sino bendición del Señor a tus problemas y peticiones!