18+ Personas que recibieron el regalo más “memorable” de su vida
Los obsequios son una de las partes más importantes de cualquier fiesta: cumpleaños, Navidad, Año Nuevo. Y es tan agradable regalar como recibir presentes. Muchas personas publicaron en las redes sociales qué obsequios extraños, o ligeramente embarazosos, pero memorables, recibieron.
¿Qué regalos peculiares has recibido en tu vida?
1. “Mi padre envolvió cuidadosamente los regalos que me había preparado para Navidad”
2. “Para mi cumpleaños me regalaron un trozo de cinta cinematográfica de los dibujos animados de Toy Story”
“Esta cinta cinematográfica de 35 mm procede de un rollo de película real. Fue vista en una antigua sala de cine en la pantalla grande. ¡Ten un pedazo de la historia del cine!”.
3. “Mi esposo dibujó esto para el cumpleaños de nuestro hijo”
4. “Es mi 26.o cumpleaños. Mi familia ha puesto la mesa”
5. “Mi hermano cumplió años ayer”
“Estaba pensando qué regalo darle que fuera interesante. Luego él dijo: ’Todos los fideos saben igual que Dosirac’. Decidí hacerle cambiar de opinión y compré todo tipo de fideos. Ahora estoy esperando a ver si cambia de parecer”.
6. “Ayer celebré mi cumpleaños. Este es el pastel que me hizo mi esposa”
En la imagen, el monstruo del videojuego Half-life (nota de Genial.guru).
7. “Mi abuelo me regaló una computadora de 1989 que funciona, con el mouse y el teclado originales”
8. “Mi padre me acaba de regalar una disquetera nueva”
9. “Hace ocho meses mi novia me regaló esta papa con forma de corazón. Así es como se ve ahora”
10. “Un amigo me dio un paquete de espaguetis muy largos”
- ¿Nunca has cocinado espaguetis en una bañera? © NaughtyNarwhal96 / Reddit
11. “Para Navidad, mi novia hizo este collage de Danny DeVito como regalo”
12. “Recibí un voucher de compra para Navidad. Válido por 1000 años”
“Fecha de vencimiento: 31/12/3021”.
13. “Mi hermana me regaló un jabón. Con plutonio. Brilla en la oscuridad”
14. “Recibí un regalo un poco extraño”
“Supongo que gracias”.
15. ¿Quieres flores? Aquí las tienes
- Era nuestro segundo San Valentín después de casarnos. Yo, como la típica esposa, regañé a mi marido para que me dijera por qué no me había regalado flores. “Lo haré hoy mismo”, dijo. Por la noche me trajo una coliflor. A mi pregunta de “¿qué diablos es esto?”, se limitó a decir: “Pediste flores, pero no dijiste cuáles”. Estaba furiosa. Pero él fue a la cocina, coció la col y le puso velas románticas. Se me fue el enojo. © Jyoti Agarwal / Quora
16. Al fin y al cabo, todas las abuelas llevan lentes
- Siempre invito a mis nietos a mi casa para la Navidad. Suelen comprarme pequeños regalos. Este año mi nieta me regaló unos lentes para leer. No tiene ni idea de para qué sirven, pero cree que todos los abuelos tienen que llevarlos. Sin embargo, hay un problema: a mis 75 años, mi vista es perfecta. © Nobody Special / Quora
17. “Recibí este rollo de papel higiénico gigante para Navidad. Bueno, ¿quién se reirá ahora, eh?”
18. La venganza es un plato que se sirve frío
- Me llevó mucho tiempo elegir un regalo para mi exsuegra. Durante 20 años, trató de convencer a mi exmarido de que yo era lo peor que le había pasado, y al final de nuestro matrimonio había conseguido incluso organizar una especie de “casting” para elegir a la futura novia en mi presencia. Entonces se me ocurrió algo: mis hijos (sus nietos) le regalaron un collar y unos pendientes de piedra. Los miró, se los probó y preguntó cómo se llamaba la piedra.
—¡Serpentina! —dijeron los niños.
—¡¿Cómo?! —exhaló mi exsuegra.
—¡SERPENTINA! —repitieron.
Ella se quedó pensativa, “digiriendo” lo que había oído, y luego les pidió que me dieran las gracias. © Lswifty / Pikabu
19. “Para Halloween, entre otras golosinas, mi hermano recibió comida para gatos”
20. A caballo regalado no se le miran los dientes
- Una vez hice una fiesta de inauguración. Les advertí a los invitados que el departamento era pequeño y no había mucho espacio, pero nos las arreglaríamos de alguna manera. Había un chico que se esforzaba mucho por impresionarme. Así que me trajo una enorme parrilla portátil como regalo. Dijo que podía hacer una barbacoa en el balcón. Al final, la parrilla estuvo dos años en el balcón y nadie la abrió nunca. Incluso la dejé dentro del departamento cuando lo vendí. “A caballo regalado no se le miran los dientes”, pero habría sido más feliz con una cafetera.