A veces, a una persona buena solo le hace falta una cosa: aprender a quedarse callada.
Genial.guru te trae unos ejemplos de cómo no deberías portarte con la gente, ya que tal conducta podría arruinar la reputación incluso de las mejores personas del mundo. Si quieres que la comunicación contigo sea cómoda y agradable, evítalo.
9. Juzgar a alguien a sus espaldas
- Antes de criticar a alguien, hazte esta pregunta: ¿estrías dispuesto a repetir en público o frente a una cámara lo que piensas decir? Si tu respuesta es "no", es mejor que no empieces esta conversación del todo.
8. Prometer algo sin pensarlo bien
- No te apresures a dar una respuesta sin escuchar la propuesta de tu interlocutor. Incluso si crees que ya sabes de qué se trata y te parece atractivo, no lo aceptes apresuradamente. Agradécelo y pide tiempo para pensarlo bien.
7. Presumir y adularte a ti mismo
- No hables demasiado sobre tus ventajas y sobre lo interesante que fue tu día. Por lo general, la gente evita a aquellos que adoran hablar de sí mismos. Echarse piropos a sí mismo es una mala manera de caerle bien a la gente. Incluso si tus piropos son bien merecidos.
6. Quejarse de la vida todo el tiempo
- La gente que siempre se pasa quejando ni siquiera da lástima. Más bien, buscamos evitar a estas personas. Si te gusta quejarte, empieza a llevar un diario y quéjate ahí. Tu interlocutor no tiene que ser tu "hombro para llorar". No satures a los demás con tus problemas: esto no los resolverá, ni tampoco te agregará respeto.
5. No mostrar respeto
- Trata a las personas por sus nombres: es bien sabido que el sonido de tu propio nombre es el más agradable del mundo. Al menos, ten una idea remota de cómo le va a tu interlocutor. Le importa sentir tu actitud personal. Así no solo mostrarás respeto básico, sino también le caerás bien a la persona.
4. Usar mucha jerga
- Evita las expresiones de jerga y mucho menos las groserías. No hagas sentir incómodo a tu interlocutor, obligándolo a traducir mentalmente lo que le acabas de decir a un idioma que sí comprende. La comunicación no debe causar inconvenientes.
3. Decir la desagradable verdad
- No critiques los defectos de apariencia, habilidades mentales o carácter de tu interlocutor. Incluso si él mismo te lo pide. Todo en este mundo es relativo, pero, en realidad, a nadie le hace falta tu amarga verdad. Solo servirá para ofender a la persona, y no te agregará ni amor, ni respeto.
2. Tocar temas personales
- Solo una persona sin tacto juzgará las convicciones religiosas, familiares y procedencia de la persona. Mucha gente toma a pecho hasta los comentarios más inofensivos al respecto. Por lo tanto, es mejor evitar tales temas de conversación si no quieres herir los sentimientos de nadie.
1. Pensar que eres el más inteligente
- Al hacerte pasar por un experto en todos los temas del mundo, solo ganarás respeto de personas tontas. Y solo por un tiempo. En una persona sensata, los personajes que se creen los más inteligentes provocan desconcierto y molestia.
Así que ser querido y respetado en cualquier círculo social es bastante fácil: solo trata a las personas como quieres que ellas te traten a ti, ¡entonces serás feliz!