El truco de la moneda en el congelador que podría ser crucial para tu seguridad
Imagina esto: estás en la casa de tus padres mientras ellos están de vacaciones. Por supuesto, es la oportunidad perfecta para revisar su congelador en busca de algo rico.
Pero al abrir la puerta, con la esperanza de encontrar helado, notas algo extraño: un vaso de agua congelada con una moneda en la parte superior. ¿Qué hace eso en el congelador? Lee este artículo para descubrir por qué tus padres son personas muy prácticas al usar este truco.
Una simple moneda en tu congelador puede ser clave cuando te vas de vacaciones.
En todo el mundo, estamos experimentando patrones climáticos inusuales, una señal clara de la naturaleza de que debemos tratar los recursos del planeta con más cuidado. Estos cambios incluyen olas de calor inesperadas en regiones más frescas, frentes fríos en zonas cálidas y fenómenos meteorológicos extremos como huracanes, tornados y tormentas intensas en lugares normalmente tranquilos.
Estos eventos suelen provocar cortes de energía. Por suerte, existe una forma ingeniosa de saber si hubo un apagón mientras estabas fuera: simplemente congela un vaso de agua, coloca una moneda encima y déjalo en tu congelador.
La posición de la moneda puede decirte mucho sobre los cortes de energía
¿Alguna vez has llegado a casa después del trabajo o de unas vacaciones y notado que la hora en tu reloj digital está incorrecta? Podrías pensar: "No pudo haber habido un apagón". Pero si lo hubo, es imposible saber cuánto duró. Tal vez fue lo suficiente como para que los alimentos se descongelaran, se echaran a perder y luego se volvieran a congelar al regresar la electricidad, sin dejar señales obvias de que algo se descongeló.
Incluso si solo te vas por un fin de semana, es buena idea usar el viejo truco de la "moneda en el congelador". Antes de salir de casa, coloca una moneda en un vaso con agua congelada y mételo al congelador. Cuando regreses, revisa la moneda. Si sigue en la parte superior, todo está bien. Pero si se ha hundido, significa que hubo un apagón lo suficientemente largo como para que los alimentos se descongelaran y potencialmente se echaran a perder.
Solo necesitas seguir estos pasos para usar este truco de manera correcta
Los alimentos que se han descongelado y vuelto a congelar pueden parecer normales, pero podrían estar contaminados con bacterias si estuvieron a temperatura ambiente durante varias horas o incluso días. Según las directrices del USDA, los alimentos que permanecen fuera del refrigerador por más de dos horas pueden desarrollar bacterias que causan enfermedades si se consumen. Por eso, este truco simple y sin costo es una forma inteligente de comprobar si tus alimentos podrían estar en mal estado.
Usa un vaso de cristal transparente o un recipiente de vidrio o plástico. Llénalo con agua y congélalo completamente, sin taparlo. Una vez congelado, coloca una moneda encima del hielo. Si al regresar encuentras la moneda a mitad del vaso, el congelador perdió energía lo suficiente como para que el hielo se derritiera parcialmente y luego se volviera a congelar, lo que probablemente indica que tus alimentos aún son seguros.
Sin embargo, si la moneda está en el fondo, significa que el congelador estuvo apagado el tiempo suficiente como para que todo se descongelara completamente, posiblemente alcanzando temperatura ambiente. En ese caso, es mejor desechar los alimentos del refrigerador y congelador.
Cómo saber si tus productos congelados deben ser desechados
Cuando se trata de alimentos, especialmente congelados, siempre es mejor tener precaución. Aquí te explicamos cómo identificar visualmente si tus alimentos congelados ya no son seguros:
Cristales de hielo en el empaque
- Esto significa que las moléculas de agua en tus alimentos han migrado hacia las partes más frías del congelador. No es peligroso para tu salud, pero afecta negativamente el sabor y la textura de los alimentos, ya que pierden mucha humedad.
Cambio de color
- Esto ocurre principalmente con la carne. Por ejemplo, si notas que un filete empieza a ponerse grisáceo en lugar de rojo, es momento de tirarlo. El color gris indica que está cerca de su fecha de caducidad. Lo mismo aplica para las verduras: si pierden su color fresco, es mejor no consumirlas.
Jugos de carne
- Si notas jugos rosados provenientes de carne congelada, significa que la temperatura del congelador no es estable y que la carne se ha descongelado y vuelto a congelar. ¡Deséchala!
Mal olor
- Si los alimentos congelados tienen un olor desagradable, es señal de que debes tirarlos sin pensarlo dos veces.
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