Misterio resuelto ;)
Estudios científicos explican por qué no puedes sacarte algunas canciones de la mente (descubre algunos tips para detenerlas)
Todos, en algún momento, hemos tenido una canción pegada en la mente que se repite una y otra vez y que, aunque quisiéramos olvidarla, parece imposible. Por ello, la ciencia lo ha investigado, llegando a darles términos científicos que buscan explicar el fenómeno. Uno de estos términos es imágenes musicales involuntarias, que es cuando una parte de una canción entra en la mente espontáneamente y se repite sin control consciente. También conocido como gusano auditivo o de oído, este fenómeno parece estar influenciado por dos tipos de factores, los intramusicales (asociados, por ejemplo, con la melodía) y los extramusicales (como las asociaciones personales con una canción).
¿Qué métodos te han funcionado para dejar de cantar canciones que se repiten de forma involuntaria en tu mente? ¿Qué canción “cura” recomiendas para este fenómeno?
1. Simplicidad, repetición y circularidad
Según un estudio, una canción que se queda espontáneamente pegada en tu mente probablemente sea simple, repetitiva y con una estructura circular (verso / coro / verso / coro). Esto se debe a que, en la mente, una línea de una canción activa la siguiente, creando una especie de circuito en el que el cerebro intenta encontrar el final. Además, cuando un proceso comienza, es más fácil continuarlo si este siempre sigue el mismo orden (por ejemplo, cuando nos cepillamos los diente).
2. Rápidas con algo inesperado
Las melodías que se convierten en imágenes musicales involuntarias tienden a tener un tempo más rápido, según lo señala un estudio. Además, las probabilidades de que una canción sea pegadiza aumentan al tener un contorno melódico global común (por ejemplo, en forma de arco, en la música occidental), como ocurre en algunas partes de la canción “Smoke on the Water”, de la banda de rock Deep Purple; o ascendente (contorno no común), como en la canción “Owner of a Lonely Heart”, de la banda Yes.
Otros factores también pueden incidir, como el efecto sorpresa (por ejemplo, tener más notas repetidas de las esperadas en una canción promedio) y los saltos imprevistos, que bien pueden ser largos (como en la canción “My Sharona”, de la banda The Knack) o muchos, como en la canción “In The Mood”, del músico Glenn Miller.
3. Notas largas con tonos pequeños
Un estudio utilizó un software para analizar la estructura de la melodía (incluyendo los intervalos, ritmo, entre otros) de 58 canciones. Los resultados indicaron que, generalmente, aquellas que contenían notas largas con intervalos de tono más pequeños eran las más pegajosas. Al mismo tiempo, tal vez se deba a que estas canciones son simplemente más fáciles de cantar.
4. Factores extramusicales
Los bucles mentales de música repetitiva generalmente se desencadenan tras la exposición reciente a una canción. También surgen cuando no estamos prestando mucha atención y a través de asociaciones de la memoria. Aparentemente, este fenómeno les sucede con más frecuencia a personas que tienen formación musical, que se ven influenciadas por estados de ánimo, que tienen rasgos de personalidad particulares (como puede ser el trastorno obsesivo-compulsivo), que sufren de inestabilidad emocional y que dependen de la disponibilidad de recursos cognitivos, como es el caso de otras formas de pensamientos autogenerados (por ejemplo, la mente errante y el soñar despiertos).
5. Reacciones a la repetición de canciones en la mente
Un estudio compuesto por dos encuestas, una finlandesa y una inglesa, encontró que la distracción y el compromiso son dos reacciones comunes a la repetición mental de canciones.
Para cesar el primer tipo de reacción —la distracción— los participantes mencionaron el uso de una “cura” musical; es decir, el reemplazo de la canción no deseada por otra conscientemente dirigida a combatirla. También dijeron acudir a otros métodos, como conversaciones, recitales (incluidas la oración y la meditación), ver la televisión y la lectura.
En cuanto al compromiso, según el estudio, la persona escucha la canción atrapada en su mente voluntariamente para tratar de olvidarla. Esto bien podría hacerse de forma repetitiva para intentar agotar la reproducción en la mente, escuchar la canción en su totalidad para completar el fragmento repetitivo específico o, incluso, escucharla para intentar identificar y aprender del elemento desconocido que podría estar haciendo que la canción se repita.
6. Consejos para detener la repetición musical involuntaria
Para tener una idea de la frecuencia con la que se experimentan las imágenes musicales involuntarias, según un estudio, el 89,2 % de las personas que afirmaron experimentar el fenómeno lo hacen al menos una vez por semana. Además, en contraste, suele ser más frecuente en mujeres que en hombres.
Aquí hay unos consejos para intentar “despegarte” una canción de la cabeza:
- Es mejor no intentar bloquear la canción, ya que puede resultar en un “proceso irónico” en el que el cerebro seguirá tocando la canción una y otra vez, logrando lo opuesto.
- Utilizar una canción de reemplazo como cura puede funcionar.
- También puede ser útil el uso de una terapia cognitiva conductual reemplazando pensamientos disfuncionales como “estos gusanos de oído indican que estoy loco” por “es normal tener gusanos de oído”.
- Masticar goma de mascar interfiere con escuchar la canción en tu cabeza, lo que puede ayudarte a olvidarla.
Bono: las 20 canciones más pegadizas
Si necesitas un verdadero rival para la música no deseada dentro de tu cabeza, quizás alguna de estas canciones mencionadas por científicos de la Universidad de St. Andrews como melodías con los ingredientes para ser una canción pegadiza puedan servirte:
- Queen — “We Will Rock You”
- Pharrell Williams — “Happy”
- Queen — “We Are the Champions”
- The Proclaimers — “I’m Gonna Be (500 Miles)”
- The Village People — “YMCA”
- Queen — “Bohemian Rhapsody”
- Europe — “The Final Countdown”
- Bon Jovi — “Livin’ On A Prayer”
- James Pierpont — “Jingle Bells”
- Baha Men — “Who Let the Dogs Out?”
- Psy — “Gangnam Style”
- Rick Astley — “Never Gonna Give You Up”
- Journey — “Don’t Stop Believin’”
- Mark Ronson — “Uptown Funk”
- Taylor Swift — “Shake It Off”
- Michael Jackson — “Beat It”
- Kaiser Chiefs — “Ruby”
- The Rocky Horror Show — “The Time Warp”
- Meghan Trainor — “All About the Bass”
- Culture Club — “Karma Chameleon”
Comentarios
A mí, cuando me gusta una canción, la escucho en bucle hasta que me canso
Lo peor es cuando es una canción que se te pega pero no te gusta
Me gustaron los consejos. Los probaré la próxima vez a ver si funcionan
Sólo con leer el nombre de la última canción ya la tengo en la cabeza... "I'm a man... without conviction... "