Keanu Reeves casi no fue John Wick hasta que una famosa actriz lo salvó

Aunque el mundo podría tener a Keanu Reeves sin John Wick, es difícil imaginar que John Wick existiría sin Keanu Reeves. Tras el éxito rotundo de las cuatro entregas, ya se planea una quinta película, y los fans no podrían estar más emocionados. Como dice el propio John Wick en la primera cinta: “La gente sigue preguntando si he vuelto... ¡Sí! Creo que sí estoy de vuelta.”

Pero lo que muchos no saben es que esta saga icónica estuvo a punto de no existir, de no ser por la intervención de una actriz muy especial.

Desde su estreno en 2014, la franquicia ha crecido enormemente, y ahora Ana de Armas protagoniza el spin-off Ballerina. Con la noticia de una quinta entrega y una precuela animada en camino, todo indica que el universo de John Wick seguirá brillando en las pantallas por bastante tiempo. Sin embargo, los comienzos no fueron fáciles.

En 2024, la franquicia —que ya ha generado más de mil millones de dólares— celebró su décimo aniversario. Fue entonces cuando los codirectores Chad Stahelski y David Leitch (aunque solo este último recibió el crédito) revelaron que la primera película estuvo a punto de cancelarse.

Chad Stahelski contó: “Estábamos a menos de una semana de empezar, y perdimos casi seis millones de dólares por un problema con la financiación. Todos habíamos invertido lo nuestro, incluido Keanu. Y, aun así, no alcanzaba. Así que todo se detuvo.”

En ese momento, la agencia Creative Artists Agency ofreció el proyecto a varios actores como una oportunidad de inversión, prometiéndoles ganancias futuras. Una actriz aceptó, aunque en ese entonces no conocía a los directores.

Stahelski recuerda: “Ella nos salvó. Cubrió ese hueco de financiación. Literalmente, fue menos de 24 horas antes de que tuviéramos que cerrar todo y abandonar la película. Nuestro productor dijo: ‘Tenemos la inversión. El hueco está cubierto.’” El resto es historia del cine.

La actriz que salvó la película fue nada menos que Eva Longoria, estrella de Esposas desesperadas. En una entrevista, confesó que no fue una decisión meditada ni estratégica. “Me encantaría decir que fui una genia de las inversiones, que lo calculé todo y tomé un riesgo medido. Pero no, nada de eso. Un agente —ni siquiera era mi agente— me llamó y me dijo: ‘Tienes dinero, deberías invertirlo aquí.’”

Longoria admitió que no sabía nada sobre la película, pero le encantaba invertir en personas. “Ellos [Stahelski y Leitch] habían hecho su trabajo. Llevaban años como dobles de acción y directores de segunda unidad; habían visto todas las malas películas y sabían cómo hacer una buena. Eran apasionados, y yo sabía que iban a lograr algo increíble.”

Y vaya que tenía razón: aún recibe cheques por su inversión, con una ganancia estimada de unos seis millones de dólares.

¿Su único arrepentimiento? La actriz admite: “Esto fue algo de una sola vez. [...] Pero ese fue mi único error: no haberme involucrado en todas las películas.”

Aun así, se siente orgullosa de haber sido la verdadera “heroína” que salvó John Wick, y le divierte encontrarse ocasionalmente con Keanu Reeves o con los directores. “Nos encontramos [Keanu y yo] por su novia, Alexandra. La conocemos por unos amigos, y coincidimos con ella y Keanu en un evento de arte. Keanu me dijo: ‘Me encantaría invitarte a cenar; deberíamos celebrar estos 10 años.’ Así que brindamos por John Wick.”

¡Y nosotros también brindaríamos por Keanu Reeves y Eva Longoria!

Hollywood tiene sus secretos felices, como cualquier otra industria. Aquí va otro ejemplo: Helen Mirren se siente tan conectada con uno de sus compañeros de reparto, ¡que cree que deberían hacerse una prueba de ADN!