16 Historias sobre cómo las relaciones con los ex y sus familias son toda una montaña rusa

Después de años de mantener su vida amorosa en privado, Kristen Stewart finalmente encontró a su media naranja. La estrella de Crepúsculo se casó recientemente con su pareja de toda la vida, la guionista Dylan Meyer, en una ceremonia íntima y cálida que se sintió más como una carta de amor que como un evento de Hollywood.
Kristen alcanzó la fama internacional interpretando a Bella Swan, y para muchos fans, su romance en pantalla con Edward Cullen parecía increíblemente real, especialmente cuando ella y su coprotagonista Robert Pattinson comenzaron a salir en la vida real. Pero ser joven y estar enamorada bajo la mirada de todo el mundo no fue nada fácil.
Después de algunos años, ambos siguieron caminos separados de manera discreta. Con el tiempo, Kristen empezó a abrirse más sobre quién era y lo que realmente deseaba. Salió con libertad, exploró su identidad y se enfocó en vivir bajo sus propios términos.
Kristen conoció a Dylan Meyer por primera vez en 2013, mientras trabajaban en una película, pero la vida las llevó por rumbos diferentes. Fue en 2019, en la fiesta de cumpleaños de un amigo, cuando se reencontraron. Kristen describió aquel momento como algo que se sintió como obra del destino. No había visto a Dylan en seis años, y al verla acercarse, sintió una conexión inmediata, preguntándose dónde había estado todo ese tiempo y por qué no se habían conocido antes.
Desde ese instante, fue evidente que algo especial estaba ocurriendo. Apenas dos semanas después de reencontrarse, Kristen le confesó su amor a Dylan una noche en un bar, aprovechando que los amigos de Dylan se habían ausentado brevemente. Kristen la miró y, sin rodeos, le dijo que estaba profundamente enamorada de ella.
Aunque siempre ha sido muy reservada con su vida privada, esta relación se sintió diferente. En octubre de 2019, Dylan publicó una tierna foto de ambas en Instagram. Fue una de las primeras veces que Kristen compartió públicamente su felicidad.
Con el tiempo, Kristen comenzó a hablar en entrevistas sobre lo profundamente enamorada que estaba y cómo se dio cuenta, desde muy temprano, de que Dylan era la indicada. Cuando se comprometieron en 2021, describió la propuesta como un momento sencillo y genuino. Sin reglas ni expectativas, solo un instante que se sintió completamente natural.
En una entrevista, Kristen contó cómo fue la propuesta de Dylan, y no fue como la gente podría imaginar. Kristen bromeó diciendo que, en una relación entre dos mujeres, no hay reglas establecidas sobre quién debe proponer matrimonio. Comentó que nunca está claro quién tomará la iniciativa, lo que hizo que el momento fuera aún más espontáneo y personal.
Kristen había comentado en tono de broma que le gustaría ser quien recibiera la propuesta, y un día, Dylan simplemente hizo que sucediera. “Tomó el asunto es sus manos y lo hizo realidad. Fue tan lindo”, compartió Kristen. También añadió que Dylan “lo hizo perfecto”.
A principios de 2022, Kristen bromeó en una entrevista diciendo que no era precisamente la mejor organizadora de bodas. “No soy buena para planear. Ni siquiera puedo organizar una cena”, dijo riendo. Aseguró que estaría feliz con una gran celebración o algo completamente espontáneo.
En lugar de organizar un gran y llamativo evento al estilo de Hollywood, Kristen y Dylan optaron por algo íntimo y lleno de significado. Su boda fue un reflejo auténtico de su relación, compartido con las personas que más quieren.
El 20 de abril de 2025, se casaron en Casita Del Campo, un pequeño y colorido restaurante mexicano en Los Ángeles que ambas adoran. Amigos cercanos y familiares las acompañaron en la celebración.
Ambas novias eligieron atuendos que reflejaban sus estilos únicos. Kristen lució un cárdigan gris suave con una falda a juego, mientras que Dylan llevó un vestido corto en tono marfil. Sin vestidos exagerados ni espectáculos hollywoodenses. Solo dos personas enamoradas, rodeadas de quienes realmente importan.
Los fans de Crepúsculo conocen de memoria cada mirada, cada beso y cada gesto dramático entre Edward y Bella. Pero mientras nos dejábamos atrapar por el romance y los vampiros, los creadores de las películas cometieron algunos errores sorprendentes que hasta los fans más fieles podrían haber pasado por alto.