La historia de Jimmy Choo, el pobre hijo de un zapatero, a cuyo talento no pudo resistirse ni la princesa Diana

No hace falta ser un experto en el mundo de la moda para nombrar algunos nombres de diseñadores cuyas creaciones son apreciadas en todo el mundo. Jimmy Choo seguramente estará entre ellos como el maestro del calzado. Después de todo, prefiere el trabajo manual minucioso a la producción en masa y, debido a eso, sus zapatos son tan deseados por las mujeres amantes de la moda por todo el mundo.

En Genial.guru decidimos contar la historia del diseñador de Malasia, quien provino de una familia pobre y logró conquistar incluso a la princesa Diana con su talento.

Subiendo a la cima

• Jimmy Choo nació en 1948 en Penang, Malasia, en una familia china. Desde muy joven se interesó por el trabajo de su padre, que era zapatero. Sin embargo, el hombre estricto mantuvo a su hijo alejado de la fabricación de zapatos durante mucho tiempo, diciendo: “¡Solo siéntate y observa!”. El futuro diseñador vio trabajar a su padre durante años, hasta que a los 11 años finalmente se puso manos a la obra e hizo su primer par.
• A principios de la década de 1980, Jimmy Choo viajó a Londres, donde se matriculó en el Cordwainers’ Technical College. Para llegar a fin de mes, en su tiempo libre el joven trabajaba como limpiador en una fábrica. El futuro diseñador fue probablemente uno de los estudiantes universitarios más diligentes, como lo demuestra el hecho de que se graduó con honores.
• Después de completar sus estudios, Jimmy Choo trabajó para la marca Lucky Shoes, y un par de años después abrió un taller para la producción de zapatos a medida. Para ello alquiló una habitación en un antiguo hospital, rodeada de rejas y alambre de púas.

Inmigrante de Malasia conquista Londres

• En su taller solo había una vieja y sucia alfombra, estantes de madera, una mesa y una máquina de coser. Sin embargo, las clientas llegaban a un lugar tan impresentable en autos de lujo y se paraban descalzas sobre un cartón para que Jimmy tomara medidas de sus pies y les hiciera unos zapatos únicos.
• Al lado de Choo trabajaba una chica, quien resultó ser una estudiante de moda que tenía contactos con los empleados de Vogue. Gracias a sus recomendaciones, Jimmy pronto comenzó a hacer zapatos únicos para fotografiar y publicar en la revista. El mecanismo se activó y, un tiempo después, en una edición icónica apareció un apartado de 8 páginas con el talentoso trabajo de Choo. No hubo fin de compradores, incluida la princesa de Gales.
• En 1996, Choo y Tamara Mellon, editora de una de las secciones de Vogue, lanzaron la marca Jimmy Choo Ltd, y la mujer tuvo que persuadir a Jimmy para que formara parte de esa empresa durante mucho tiempo. La mamá del diseñador tomó todos los ahorros y se los dio a su hijo para que manejara el negocio. El maestro admitió: “Simplemente no podía fallar, de lo contrario, nunca podría devolverle el dinero a mi madre”.
• Un tiempo después, Diana apareció en un evento social con un vestido azul y zapatos a juego. Las fotos de la princesa se difundieron por todo el mundo, y con ellas el nombre del diseñador.

Zapatos para una verdadera princesa

• Incluso antes de que el diseñador lanzara su propia marca, llegó una llamada inesperada del palacio real. La princesa Diana quería que Jimmy Choo le hiciera zapatos. Posteriormente, el diseñador más de una vez tomó sus cartones para hacer bocetos y dirigirse al encuentro con ella.
• Cuando Jimmy Choo fue al Palacio de Kensington por invitación de Diana, la asistente temía dejar a la princesa con el maestro a solas, y una vez le preguntó: “¿Quiere que me quede?”. Para el asombro de Choo, Diana dijo: “Me siento cómoda con Jimmy”, y rechazó la presencia de la asistente.

• El diseñador recuerda: “Era tan fácil trabajar con ella. Lady Diana siempre ofrecía té y galletas. Preguntaba cómo estaban mi mamá y mi papá. Era una verdadera princesa”. Lady Di y Jimmy Choo se sentaban juntos en el suelo y hablaban sobre modelos de zapatos.
• Sobre todo, el diseñador está orgulloso de los últimos pares de zapatos que fueron destinados para Diana. Poco antes de la muerte de la princesa, concertó una cita con su asistente, en la que debía presentarle los nuevos zapatos. Sin embargo, esto no estaba destinado a suceder. A pesar de todos los intentos de convencerlo, Jimmy Choo se negó a vender ese calzado y decidió conservarlo como recuerdo de Diana.

Marca en la cultura pop

• La fashionista en serie más famosa, Carrie Bradshaw, también ayudó a aumentar la popularidad de la marca Jimmy Choo. En uno de los episodios de la producción, ella corre detrás de un barco gritando: “¡Perdí mis Choo!”.
• Se hicieron unos 70 pares de zapatos especialmente para la película Legalmente rubia 2: más rubia que nunca. La actriz principal, Reese Witherspoon, confesó que se llevó todos estos zapatos a casa. Se ocupó de antemano del contrato, según el cual podría apropiarse de todo el calzado de su personaje.
• En 2015, en honor a la película Cenicienta, fueron hechos unos zapatos a mano con cientos de cristales. Los hicieron especialmente para Lily James, la Cenicienta de la película. La marca prometió hacer unos zapatos iguales para cualquier fashionista que estuviera dispuesta a pagar hasta 4500 USD por ellos.

El fenómeno de los zapatos de Jimmy Choo

• Jimmy Choo es conocido por su trabajo dedicado y su atención a los detalles. Una vez pasó 3 días y 3 noches en el trabajo preparando zapatos para un desfile de moda. Durante todo ese tiempo cosió minuciosamente abalorios a los modelos. “Hago todo, desde dibujar hasta coser”, dijo Choo.
• Cuando el diseñador estaba perfeccionando sus habilidades, incluso encontró el uso de escamas de pescado en sus trabajos. Choo descubrió que respondían bien a las interacciones con los revestimientos y, por lo tanto, decoraba los zapatos con ellas.
• En 2001, el diseñador vendió su participación en Jimmy Choo Ltd (actualmente propiedad de Michael Kors). El maestro dio preferencia a la confección individual en lugar de la producción masiva, a la que se dedicaba al comienzo de su carrera.
• Así que, si compras zapatos en una boutique con el nombre de este diseñador, esto no significa que el maestro haya intervenido en su fabricación. Los zapatos de Jimmy Choo solo están disponibles como parte de la línea Jimmy Choo Couture Ltd, con cita previa en la oficina de Londres. Jimmy elabora hasta 5 pares por semana bajo pedido.

La personalidad del maestro

• El diseñador se adhiere a los principios del feng shui, una práctica del Imperio Celeste sobre la organización del espacio. Por ejemplo, Jimmy Choo exigió que la caja registradora de su tienda no se volviera hacia la puerta. Según las creencias chinas, si se ubica incorrectamente, el dinero fluirá fuera del espacio comercial.
• A pesar de su considerable edad, 72 años, Jimmy Choo se niega rotundamente a reconocerse como viejo. Cita el ejemplo de figuras prominentes en Malasia que tienen más de 90 años y agrega que la mente puede ser fuerte incluso a los 100 años.
• Durante una entrevista con Jimmy Choo, un periodista le preguntó qué consejo de vida podía compartir el diseñador, a lo que él respondió: “Sean humildes. Sean corteses con los demás y nunca pierdan los estribos”.

¿Qué parte de la historia sobre este ingenioso diseñador te pareció especialmente interesante?