La única persona que descifró el secreto de los constructores de pirámides
El año es 1923. Dos adolescentes salen a escondidas de sus casas en medio de la noche en Florida City. Se rumoreaba que un anciano estaba construyendo un castillo de roca por su cuenta. Sin embargo, cada vez que alguien intentaba ver lo que el anciano estaba haciendo, dejaba de trabajar. Los curiosos adolescentes consiguieron colarse en el patio trasero de Ed y vieron algo que más tarde podrían describir como mágico. Recordaron haber visto rocas moviéndose como globos de helio. El anciano movía hasta 30 toneladas de piedra él solo para construir su castillo. Si bien no permitía que nadie lo viera trabajar, hablaba de ello con orgullo por el pueblo. Pero cuando la gente le preguntaba cómo estaba construyendo un castillo de piedra él solo, respondía simplemente: “He descifrado el secreto de las pirámides”.
Esta historia comienza en Letonia, el país natal de Edward Leedskalnin. Edward nació en un pequeño pueblo el 12 de enero de 1887, en el seno de una familia de albañiles, que es probablemente donde aprendió las antiguas técnicas de construcción. Sin embargo, era un niño enfermizo, por lo que nunca pudo cargar mucho peso ni realizar actividades físicas intensas. A los 26 años, un desafortunado giro de los acontecimientos determinó el destino de Ed. El amor de su vida rompió su compromiso y Ed, desconsolado, decidió trasladarse a los Estados Unidos. Vivió en un par de estados diferentes antes de trasladarse finalmente a Florida, donde dio inicio a la aventura de su vida. Ed pasó años buscando el terreno adecuado para construir la casa de sus sueños. Siempre rechazó las buenas tierras de cultivo. Cuando la gente le preguntaba por qué, él solo sonreía. Finalmente, cuando compró un terreno que sus amistades consideraron terrible. El suelo era de roca, no podía arar ni cultivar. Pero parecía perfecto para lo que quería construir.
Los amigos íntimos de Ed solían describirlo como excéntrico. Cuando le preguntaban por qué quería construir una casa, él solo decía: “Es para mi amada. Algún día regresará”. Luego, cambiaba el tema de la conversación. Ed tardó unos 30 años en terminar el Castillo de Coral, y lo hizo todo por su cuenta. Solo trabajaba bajo el manto de la noche, y nunca, nunca, dejaba que nadie viera lo que hacía. El Castillo de Coral terminado encierra una serie de misterios sin resolver. Si lo hubieras visitado en aquella época, tendrías que haber pasado por una puerta giratoria de 9 toneladas y 2 metros de altura que hasta un niño podía empujar con un solo dedo. Ed estaba tan orgulloso de esta puerta que originalmente llamó al lugar Rock Gate Park. El nombre de Castillo de Coral apareció mucho más tarde, tras el fallecimiento de Ed. Una vez dentro, los visitantes accedían a las increíbles maravillas de las construcciones de Ed: torres, símbolos místicos, muebles y columpios, todos ellos hechos completamente con bloques monolíticos. Las piedras están apiladas, y solo su peso las mantiene unidas. Aunque parezca mentira, todo el parque reúne alrededor de 1100 toneladas de piedra.
Hoy en día, si visitas la vivienda de Ed, hasta podrás ver los sencillos instrumentos que utilizó para construir todo esto: cinceles, martillos, cuerdas y poleas. El tipo de trabajo que realizaba es difícil incluso con equipamiento actual, ¡y mucho más sin él! El principal misterio del Castillo de Coral reside en cómo lo logró. La única fotografía de Ed Leedskalnin trabajando muestra una sencilla estructura de palanca formada por un polipasto de cadena unido a un trípode de madera. El trípode estaba hecho de viejos postes de teléfono con una pequeña caja en la parte superior. Lo que había en la caja es, por supuesto, un misterio. Por desgracia, se llevó sus secretos con él: no compartió la verdad de su trabajo con nadie más. Sin embargo, no todo está perdido, ya que hay muchas teorías y especulaciones en torno a lo que podría haber ocurrido allí...
Una de las teorías asegura que existe una red armónica en el interior de la superficie de la Tierra, algo que crearía puntos antigravitatorios alrededor del globo. Se cree que el Castillo de Coral fue construido en un punto de este tipo. Esto podría explicar por qué Ed tardó tanto en encontrar un terreno que le gustara. Quizá lo que buscaba era un lugar que le permitiera experimentar con las fuerzas antigravitatorias. Sin embargo, cada vez que Ed hablaba de su trabajo, decía que entendía las leyes del peso y la palanca y, claro, que había descifrado el secreto de los constructores de pirámides. ¿Y qué secreto es ese?, te preguntarás. Según el propio Ed, tiene que ver con el magnetismo. Incluso publicó un folleto titulado Corriente magnética. En él, explica que todos los objetos tienen partículas magnéticas en su interior, solo hay que entender dónde se encuentran. De este modo, los objetos pueden levantarse y moverse sin mucho esfuerzo, como si intentaras mover algo pesado debajo del agua.
Los investigadores afirman que, si asumimos que Ed Leedskalnin y los constructores de la pirámide utilizaron la misma técnica, entonces solo se habrían necesitado aproximadamente 4700 trabajadores para construir la gran pirámide de Giza, en lugar de los 20 000 a 100 000 que se estiman actualmente. Pero esta historia se vuelve cada vez más y más misteriosa. A finales de los años 20, Ed estaba terminando la construcción del Castillo de Coral en Florida City. Los rumores sobre su trabajo se habían extendido por la ciudad. La gente decía que Ed escondía mucho dinero en algún lugar de su vivienda. Una noche, un grupo de hombres esperó a que Ed estuviera solo e irrumpió en el Castillo para robarle. No pudieron encontrar el dinero y, por suerte, no le hicieron daño, pero en los días siguientes decidió que lo mejor era irse de aquel lugar. Por supuesto, se llevó algo más que su cepillo de dientes.
Ed decidió trasladar todo el Castillo de Coral a otro terreno a 10 kilómetros de distancia. La leyenda dice que contrató a un camionero y le pidió que jurara guardar el secreto sobre lo que Ed pretendía hacer. Le pidió que mirara hacia otro lado mientras Ed cargaba el camión él solo, moviendo todas las rocas sin ayuda. Con el camión cargado, Ed y su Castillo se trasladaron a Homestead, Florida, donde se encuentra el parque hasta el día de hoy. En 1986, llamaron a un grupo de ingenieros de la Universidad de Florida para que intentaran reparar la entrada del parque, la puerta giratoria de 9 toneladas de la que Ed estaba tan orgulloso. Llegaron con aparatos modernos, incluyendo una grúa de 20 toneladas. Cuando los ingenieros desmontaron la puerta, se dieron cuenta de que Ed había utilizado una extraña piedra circular en la parte inferior de la puerta giratoria.
Los ingenieros no lograban entender cómo esta roca del tamaño de un frisbee podía soportar 9 toneladas sin romperse en pedazos. Enviaron la roca al departamento de geología de la Universidad de Florida, pero los geólogos simplemente la devolvieron diciendo que no podían encontrar una coincidencia de esta roca en sus bases de datos. ¡No lograron determinar su origen! Los ingenieros volvieron a instalar la puerta de 9 toneladas e intentaron emplear otras técnicas. Al principio, no funcionó sin la roca que Ed había usado originalmente, así que tuvieron que cortar la roca de la entrada para que volviera a funcionar como puerta giratoria, ¡demostrando que la tecnología actual no podía replicar lo que Ed había logrado sin ayuda! Avancemos rápidamente hasta 2011, donde otro hombre afirmó haber descifrado el código de los constructores de pirámides y del propio Ed Leedskalnin. Wally Wallington, un trabajador de la construcción retirado del condado de Lapeer, Michigan, ha conseguido construir utilizando técnicas similares a las de Ed.
Wallington es conocido por haber construido su Stonehenge personal en Michigan. Se dice que utilizó máquinas sencillas, como palancas y contrapesos, para mover bloques de hormigón de varios miles de kilos. A diferencia de Ed, Wallington ha compartido sus técnicas con el público. Varios videos muestran las cosas ingeniosas que construyó con materiales muy sencillos. Es realmente impresionante: ha trasladado todo su granero a otra propiedad solo con la ayuda de simples herramientas. Sin embargo, no hay manera de demostrar que estas hayas sido las mismas técnicas utilizadas para construir el Castillo de Coral. Al día de hoy, los secretos del Castillo de Coral no han sido desvelados. Pero bueno, ¡siempre podemos seguir indagando!