Cómo las tareas propuestas por el método Montessori pueden reforzar la autoestima de nuestros hijos

El método Montessori se ha ido extendiendo progresivamente en los últimos años, y es que prepara a los niños y les dota de las habilidades y capacidades necesarias para valerse por sí mismos. Por este motivo, y para lograr que el niño se convierta en un ser independiente y capaz, se proponen una serie de tareas a ser desarrolladas por los pequeños en función del grupo de edad en el que se encuentran. De este modo, y gradualmente, los niños irán adquiriendo responsabilidades y conocimientos para llegar a convertirse en seres humanos autosuficientes.

Genial.guru ha querido traerte una guía de las actividades en las que los más pequeños de la casa pueden ir involucrándose en función de su edad y la etapa en que se encuentran. ¡Toma nota, porque es realmente interesante!

1. Primera etapa (0 a 6 años)

Según las etapas establecidas por el método Montessori, la primera es la de mayor obtención y absorción de información de todo aquello que les rodea. Es el momento en el que el niño mira a su alrededor y comienza a tomar consciencia de su entorno, a identificar y a relacionar. A su vez, esta etapa se divide en dos:

1. La llamada “Mente inconsciente”, entre los 0 y los 3 años: el pequeño observa e interpreta estímulos, pero lo hace sin consciencia real de significados.

2. La llamada “Mente consciente”, entre los 3 y los 6 años: es el momento de cuestionarse y plantearse dudas sobre todo aquello que les rodea.

En cuanto a la adjudicación de tareas o a la toma de responsabilidades, Montessori establece otros dos grupos en función de su edad.

2 y 3 años

Estas edades se consideran propicias para comenzar con tareas como:

• guardar y recoger sus propios juguetes en el lugar destinado para tal fin;

• llevar su ropa sucia al cesto;

• tirar los desperdicios a la basura;

• poner la mesa a las horas de las comidas;

• recoger los libros y acomodarlos debidamente en su sitio;

• buscar los pañales y las toallitas en el momento en que se necesiten;

• limpiar el polvo de su cuarto;

• doblar pequeños trapos.

4 y 5 años

Alcanzada esta edad, el método Montessori propone aumentar la cantidad de tareas y que, de este modo, los pequeños vayan tomando más responsabilidades.

• Si hay mascotas en el hogar, es el momento de que comiencen a alimentarlas.

• A esta edad, los niños aprenden a hacer su propia cama y lo toman como una de sus nuevas tareas.

• También pueden recoger sus juguetes y ordenar su habitación

• Limpiar y ordenar los cubiertos es una tarea sencilla que pueden asumir.

• Regar las plantas es otra de las tareas que les ayudarán a hacerse responsables poco a poco.

• Pueden comenzar a preparar algunos pequeños aperitivos o snacks sencillos.

• Recoger la mesa de la cocina, así como los platos de la mesa, lavarlos y guardarlos.

• Pasar o usar la aspiradora de mano para limpiar algunos rincones.

2. Segunda etapa (6 a 12 años)

Es en esta etapa cuando las preguntas crecen y se cuestionan todo en mayor medida, es por eso que tienden a formular muchas preguntas y a buscar respuestas sobre todo lo que desconocen o les genera interés. Comienza el aprendizaje formal, empiezan a pertenecer a un grupo (sus amiguitos) y a relacionarse.

6 y 7 años

En este caso, las tareas no aumentan, pero sí son más complejas y requieren de mayor precisión y concentración por parte de los niños. Así, los pequeños pueden:

• doblar cosas más grandes, como las toallas;

• pasar la escoba para limpiar el suelo;

• vaciar el lavavajillas y guardar los utensilios en su lugar;

• pelar algunas verduras o frutas (patatas o zanahorias, por ejemplo);

• pasar de la elaboración de aperitivos sencillos a tratar de preparar ensaladas;

• cambiar el papel del baño;

• hacer algunas tareas de jardinería (como recoger hojas y retirar las malas hierbas);

• recoger la basura.

8 y 9 años

Crecen y avanzamos un paso más en el camino de las responsabilidades y las tareas domésticas de las que se hacen cargo.

• Si en los años anteriores habían comenzado a hacerse cargo de vaciar el lavavajillas, ahora también pueden comenzar a introducir los platos, cubiertos y utensilios que necesiten lavarse.

• Pueden ocuparse de poner la lavadora y, por tanto, de hacer la colada.

• Comenzaron doblando cosas pequeñas que requerían de poco esfuerzo, ahora ya pueden doblar y colgar su ropa limpia.

• También pueden quitar el polvo de los muebles de la casa.

• Una vez hecha la compra, ellos pueden ser los encargados de acomodarla y poner cada cosa en su lugar.

• Vamos a aumentar sus competencias en la cocina y comienzan a hacer uso del fuego y a preparar algo de comida caliente. Se puede iniciar con algo sencillo, como los huevos revueltos.

• Hornear resulta divertido para la mayoría de los pequeños, así que es la edad para empezar a hacer galletas.

• Tras cada comida, pueden ser los encargados de recoger y limpiar la mesa.

10 y 11 años

Nuestros pequeños han ido creciendo y se están acercando cada vez más a la adolescencia, por lo que las tareas se hacen más demandantes de esfuerzo.

• Pueden ayudar con la limpieza de los baños.

• Dejamos la aspiradora de mano y pasamos al uso de la aspiradora convencional para la limpieza de las alfombras y otras zonas que lo requieran.

• Ahora ya no limpian solo la mesa de la cocina, sino que se les puede pedir que realicen una limpieza a fondo de esta zona de la casa.

• Se acerca el momento de tomar la cocina y preparar su primera comida simple.

• Pueden convertirse en los nuevos encargados del correo del hogar.

• La jardinería en estos años consiste en cortar el césped.

• Se inician en el mundo de la costura con algunos arreglos o labores sencillas.

3. Tercera etapa (12 a 18 años)

Alcanzan cierta edad, dejan de ser nuestros niños pequeños y se vuelven más independientes. Es una etapa marcada por muchos cambios y novedades, ya que la llegada de la pubertad y la entrada en la adolescencia trae consigo multitud de cambios físicos y psicológicos. Esta es la edad de la consolidación de las responsabilidades.

De 12 años en adelante

Ya son adolescentes y se acercan cada vez más a la vida adulta, por lo que sus tareas y responsabilidades cambian, se dificultan y los preparan para ser autosuficientes.

• Trapear el suelo es una de sus nuevas tareas.

• Es buen momento para incluir tareas relacionadas con el auto, como su aspirado y lavado.

• En cuanto a la jardinería, en estos años se añade la poda de setos.

• El mundo de la cocina se amplía y ya están listos para preparar sus primeras comidas completas.

• Ahora el horno también les servirá para hacer sus primeros pasteles y bizcochos.

• El mundo de las reparaciones caseras empieza y también se contempla la pintura de paredes.

• Comienzan con el uso de la plancha.

• La limpieza se extiende también a los cristales.

• Ya están listos para cambiar algunas bombillas.

Más allá de la posible eficacia del método, recuerda que es importante consultar con un especialista en niñez y crianza si planeas poner en práctica una guía como esta. ¿Cuál de las propuestas te ha parecido más interesante? ¿Sueles involucrar a tus hijos en las tareas del hogar? ¿Con qué tipo de tareas colaboran tus pequeños en la casa?