Los científicos explican las señales inusuales que revelan si eres una persona inteligente
Los profesores de la Escuela de Medicina de Yale, Alan Kaufman y su esposa Nadeen, ayudaron a expandir el campo del estudio de la inteligencia más allá de las pruebas tradicionales. Además de los habituales test de coeficiente intelectual, basados en las teorías contemporáneas del funcionamiento cerebral, el nivel intelectual de una persona, según ellos, lo pueden revelar señales congénitas y hábitos adquiridos, tales como un desorden creativo en el escritorio o una adicción a las estrategias en línea.
Genial.guru te muestra hoy 10 señales que te ayudarán a discernir si en tu interior existe un auténtico genio.
1. ¿Llevas lentes?
Científicos de Universidad de Edimburgo realizaron un estudio donde se analizaron a fondo los datos genéticos de 300 000 personas. En todas, se manifestaba un patrón claro: los participantes con un alto nivel de inteligencia tenían probabilidad de albergar un gen que provoca la necesidad de utilizar lentes.
Además, según señaló la autora de este trabajo, Gail Davies, este estudio reveló muchas diferencias genéticas asociadas con las habilidades mentales heredadas. Por otro lado, algunos de los estudios anteriores a este han demostrado que la sociedad percibe a las personas que usan gafas como muy inteligentes, cultas, fiables y honestas.
2. No resulta fácil distraerte
Las personas que pueden concentrarse en una sola tarea durante mucho tiempo son más inteligentes que otras. Rehúyen a todas las distracciones y así consiguen eludirlas. Duje Tadin, perteneciente a la Universidad de Rochester, observa que la percepción visual de las personas con un alto coeficiente intelectual es más discriminatoria. Son capaces de ver pequeños objetos en movimiento, pero al mismo tiempo pueden luchar contra grandes movimientos que oscilan sobre el fondo donde se encuentran.
La capacidad de bloquear la distracción puede ser útil en un mundo repleto de muchos datos en bruto. Un cerebro efectivo debe ser exigente para combatir al ruido de la información.
3. Fuiste amamantado
Diversos estudios, realizados en Gran Bretaña y Nueva Zelanda, sugieren que los niños que fueron amamantados pueden ser más inteligentes que otros. Dos estudios analizaron a más de 3 000 personas. Los niños que tomaron leche materna obtuvieron casi 7 puntos más en los test que miden el coeficiente intelectual. Así las cosas, se puede afirmar que la lactancia materna afecta positivamente, no solo al sistema inmunológico y a la salud del niño, sino también a su desarrollo cognitivo.
4. Tienes un gran sentido del humor
Investigadores de la Universidad de Nuevo México pidieron a 400 estudiantes que escribieran los subtítulos de una serie de dibujos animados. Como resultado, aquellos que tenían un nivel de inteligencia superior a la media fueron capaces de formular creaciones narrativas más divertidas.
Otro estudio, publicado en el American Journal of Psychoanalysis, comparó los coeficientes de desarrollo mental entre los cómicos. Se descubrió así que poseían un resultado significativamente superior a la media de la población. En particular, los cómicos masculinos obtuvieron de media 138 puntos, las féminas, 126.
5. Tienes un desorden creativo en tu lugar de trabajo
El experimento llevado a cabo por la Universidad de Minnesota reveló que las personas, en una situación de desorden, fueron más propensas a desarrollar ideas más creativas que si se situaban en un espacio cuidadosamente recogido. La autora del estudio, Kathleen Vohs, explica que un entorno desordenado inspira un distanciamiento de las soluciones tradicionales, lo que da lugar a producir nuevas ideas.
La creatividad es una característica inherente a las personas inteligentes. Como regla general, estas se centran en el problema principal, por lo que el orden pierde su importancia para enfocarse en lo que les ocupa.
6. Dibujas, incluso cuando simplemente estás pensando en algo
Otro hábito propio de personas inteligentes es dibujar. Según explica Sunni Brown, autor de The Doodle Revolution, el dibujo es una herramienta de pensamiento que puede afectar al procesamiento de la información y la consecuente resolución de problemas. Esta tesis se refuerza tras la investigación científica llevada a cabo en el Reino Unido, según la cual las personas eran capaces de recordar un 29 por ciento más de información si dibujaban.
Tu mente, inconscientemente, funciona en segundo plano, incluso si no estás demasiado concentrado en el problema. Dibujar sin pensar también aporta una ventaja para la memoria: proporciona al cerebro una forma visual de poder expresar conceptos y emociones.
7. Hablas contigo mismo
Puedes pensar que susurrarte cosas a ti mismo te hace parecer loco, pero, en realidad, esto no es más que una señal de que albergas un mayor nivel de inteligencia, memoria y habilidades perceptivas. En un estudio realizado por la Universidad de Wisconsin y la Universidad de Pensilvania, los científicos pidieron a los participantes que recordasen la palabra para encontrar luego los objetos. Si pronunciaban el nombre de las cosas en voz alta, eran más propensas a realizar tal tarea con éxito.
El autor del estudio, Gary Lupyan, subraya que hablar no es un simple método más de comunicación: contribuye a mejorar, tanto la percepción como el pensamiento. Pronunciando los nombres de los objetos en voz alta, activas sus propiedades visuales en tu cerebro, por lo que las búsquedas posteriores resultan más exitosas.
8. Eres un ave nocturna y no te gusta madrugar
Un estudio publicado en la revista Personality and Individual Differences, estudió la relación entre el coeficiente intelectual de las personas y sus hábitos de sueño. Como resultado, se descubrió que aquellos que tenían un coeficiente intelectual más alto se quedaban más tiempo sin dormir y se levantaban más tarde. Otro estudio, también publicado en la misma revista, contó con la participación de unos 400 reclutas de las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos. Al final del mismo, se alcanzaron conclusiones similares.
Los resultados muestran que, contrariamente a la sabiduría popular generalmente aceptada por la sociedad, los "búhos" registran calificaciones más elevadas por su nivel de inteligencia.
9. Juegas a las estrategias en línea que involucran a muchos usuarios
Investigadores de la Universidad de York descubrieron un vínculo entre la capacidad de los jóvenes para jugar bien a los videojuegos y un alto nivel de inteligencia. Los científicos se han centrado en las estrategias en línea y los juegos en primera persona, ya que son extremadamente populares entre cientos de millones de jugadores de todo el mundo.
Así fue cómo se averiguó que esos juegos influyen en la mente de una persona de forma muy similar a las partidas de ajedrez. El usuario debe recurrir más a su memoria y a la capacidad de tomar rápidamente decisiones estratégicas teniendo en cuenta varios factores.
10. Comes pescado todas las semanas
Científicos de la Universidad de Pensilvania decidieron averiguar la relación entre el consumo de pescado y la capacidad mental. Un grupo de 541 niños de entre 9-11 años de edad participó para llevar a cabo este estudio. Se les pidió que completaran un cuestionario sobre la frecuencia con la que consumieron pescado durante el mes pasado: el periodo iba de "nunca" a, "al menos, una vez a la semana". Para comparar las habilidades mentales de los mismos se recurrió a una prueba de coeficiente intelectual, la cual consideraba las habilidades verbales y no verbales como, por ejemplo, el vocabulario y la codificación.
El análisis de los resultados mostró que los niños que comían pescado semanalmente obtuvieron 4,8 puntos más que aquellos que, rara vez o nunca, lo comían. Algunos, cuya dieta a veces incluía también el pescado, obtuvieron 3,3 puntos más.
¿Cuál de estas señales albergas? ¿Y qué más, según tu opinión, puede influir en las altas capacidades intelectuales de una persona?