20+ Coincidencias tan perfectas que es difícil no creer en el destino

Entre más pasa el tiempo, puede que la nostalgia tome un papel protagónico en nuestras vidas. Al pensar en el pasado, recordamos a las personas que compartieron experiencias con nosotros, y si ya no están en nuestro presente, a veces sentimos el impulso de reconectar. Sin embargo, seguir ese impulso no siempre es una buena idea, sobre todo cuando la relación terminó mal. Es el caso de la historia que te traemos hoy, donde la narradora nos cuenta sobre una examiga que volvió a escribirle en el peor momento posible: después de recibir malas noticias sobre otra de sus amigas cercanas.
“Mis amigas, a quienes llamaré CH y MO, y yo nos conocimos en el posgrado”, escribe la narradora de la historia para dar un poco de contexto. “CH y MO eran amigas desde antes. Aunque tuvieron problemas algunos años antes, reconectaron después de darse cuenta de que otra de sus amigas las engañó”.
Sin embargo, los problemas entre CH y MO no terminaron ahí. “Hace un año, durante el verano, MO dejó de hablarnos a CH y a mí. Fue un tiempo bastante complicado y lleno de problemas. CH seguía molesta por su actitud y su esposo, que también era amigo de MO, tampoco la ha perdonado, aunque su enojo es menor”.
A un año del fin de la amistad, nadie esperaba volver a tener contacto con MO, pero eso cambió una mañana como cualquier otra. “Recibí noticias de que CH, mentora y amiga, había fallecido después de luchar contra el cáncer de páncreas. Esa misma noche, MO me llamó, pero no contesté”.
Aunque su llamada no fue bien recibida, MO no se rindió en sus intentos por contactar a sus examigas. “Dejó un mensaje de voz en el que decía que exnovio le contó sobre CH, nos dio el pésame, ofreció su ayuda y dijo que contactaría al esposo de CH. Lo último que dijo fue que últimamente nos extrañaba mucho a mi esposo y a mí porque ¡obviamente tenía que hablar de sí misma de alguna manera!”.
Más tarde, esa misma noche, MO habló con el esposo de CH. Él agradeció su pésame, pero le dijo que honraría la memoria de CH y respetaría su decisión de no tener contacto con MO, por lo que no le daría los detalles del velorio.
“¡Estoy tan furiosa! Una parte de mí quiere ignorarla, pero la otra parte de mí quiere decirle lo desconsiderada que es al usar la partida de CH como excusa para contactarme un año después, solo para hablar de sus sentimientos. No sé qué hacer y, normalmente, CH sería la persona a la que acudiría para recibir consejos, pero eso ya no es posible”.
El deseo de reconectar con una amistad que significó mucho para nosotros es normal, pero es importante evaluar si seguir el impulso es algo que vale la pena. Considera: