Nació sin nariz y la llamaron “Voldemort”, pero ella celebra su diferencia
Esta pequeña niña, nacida sin nariz y apodada “Voldemort,” tiene características físicas que la distinguen del promedio. Su historia nos invita a apreciar la diversidad y la belleza que existen en el ser humano, desafiando nuestra visión de lo que significa ser verdaderamente extraordinario.
Nació con una rara condición
Tessa nació con una rara condición llamada arinia congénita completa, que significa que no tiene nariz. Esta anomalía, que afecta a pocas personas en el mundo, presentó desafíos únicos para Tessa desde el inicio de su vida. Sin embargo, ella ha decidido que su condición no la definirá y ha abrazado la vida con un entusiasmo inigualable.
La arinia ocurre cuando la nariz no se desarrolla en el vientre materno, resultando en la ausencia de este rasgo facial. En el caso de Tessa, la condición también implica la falta de un sistema olfativo, la parte del cerebro encargada de reconocer olores. A pesar de los desafíos que ha enfrentado, sus padres siempre la han visto como una niña hermosa y extraordinaria.
Cuando los padres de Tessa, Grainne y Nathan Evans, descubrieron la malformación facial de su hija en un ultrasonido, experimentaron una mezcla de emociones. A los cinco meses de embarazo, supieron que su hija nacería sin nariz. A pesar del impacto inicial, se comprometieron a brindarle a Tessa el mejor cuidado y apoyo posibles.
El recorrido de Tessa ha estado marcado por múltiples procedimientos médicos y cirugías
Poco después de nacer, fue transferida a la unidad de cuidados intensivos, donde le realizaron una traqueotomía para facilitar su respiración. A sus once meses, tuvo que someterse a una cirugía de cataratas, añadiendo otro reto a su corta vida.
Dos años después, Tessa fue sometida a una cirugía cosmética en la que se le implantaron prótesis debajo de la piel, como primer paso para la construcción de una nariz artificial en el futuro. La decisión no fue fácil para sus padres, pero lo vieron como una oportunidad para mejorar gradualmente el perfil de Tessa, haciéndolo más “normal.” Este proceso involucró injertos de hueso y piel, procedimientos que normalmente se recomiendan en la adolescencia cuando el rostro ha terminado de desarrollarse.
A pesar de estos desafíos físicos, el espíritu de Tessa permanece inquebrantable
Ella ha aprendido a vivir sin nariz, respirando a través de la boca y sin el sentido del olfato, algo que muchos damos por sentado. La alegría contagiosa y las ganas de vivir de Tessa son un testimonio de su determinación inquebrantable para disfrutar la vida al máximo.
Su historia ha captado la atención en todo el mundo, inspirando a miles de personas que también enfrentan sus propios desafíos. La fortaleza y resiliencia de Tessa nos recuerdan que la verdadera belleza no se encuentra en la apariencia física, sino en el espíritu indomable que habita en cada uno de nosotros. Su vida es un faro de esperanza, recordándonos que podemos superar cualquier obstáculo con determinación, valentía y el apoyo de quienes nos aman.
En un mundo donde es fácil dejarse llevar por la negatividad, historias como la de Tessa iluminan el triunfo del espíritu humano. Su viaje aún no termina, y su historia continúa inspirando a muchos alrededor del mundo.