Personas que encontraron tesoros escondidos debajo del piso de sus casas

Bueno, una persona decidió renovar su nuevo apartamento y comenzar la tarea poniendo una alfombra recién comprada. El primer paso, por supuesto, sería quitar la vieja, ¿no? A medida quitaba la antigua, comenzó a ver colores y diseños extraños debajo. Espera un minuto... ¿Es un tablero de Monopoly de tamaño gigante? Lo que acabo de contar de verdad le sucedió a un residente de San Francisco, quien decidió cambiar la alfombra de una habitación de su casa. Tan pronto como descubrió el tablero gigante de Monopoly perfectamente conservado en las tablas del piso, quiso crear piezas del juego del mismo tamaño. Sin embargo, su esposa no estaba tan emocionada con la idea, y finalmente optaron por una apariencia un poco más clásica. Oh, bueno...

Ahora viene la historia de dos personas de Sacramento que decidieron que necesitaban cambiar su sistema de calefacción. Se sorprendieron al encontrar una docena de frascos de comida dentro de los ductos y algunas paredes. Pero no te estaría contando esta historia si esos frascos hubieran estado vacíos, ¿verdad? ¡Dentro de ellos, encontraron polvo de oro puro! ¡Eso sí es un tesoro escondido! Este sorprendente hallazgo tenía un valor de cerca de 300 000 USD.

En 1995, unas personas que trabajaban en el Chatham Historic Dockyard, en el sureste de Inglaterra, hicieron un descubrimiento sorprendente debajo de las tablas del piso de un edificio. Había unas 200 vigas que pertenecían a un barco misterioso y obviamente muy antiguo. Les llevó muchos años de investigación poder identificar la embarcación. Sin embargo, en 2012, finalmente concluyeron que las vigas pertenecían al HMS Namur, un barco botado en 1756 por la Royal Navy. Al revisar los registros históricos, descubrieron que era una embarcación importante que sirvió durante casi 50 años. En el momento en que finalmente la encontraron, ¡había estado debajo de ese piso por casi 200 años!

¿Qué tal un curioso tesoro vikingo escondido bajo unas tablas en el suelo? ¿Suena como algo de lo que te gustaría escuchar? La historia cuenta que cerca del año 870, un rico vikingo escondió su tesoro bajo el suelo de una casa. Estaba ubicado en la isla sueca de Gotland. ¡Después de la asombrosa cantidad de 1000 años, un agricultor local lo descubrió! El impresionante hallazgo contenía miles de monedas de plata, docenas de lingotes de plata, cientos de pulseras, anillos y collares, y más de 40 kilos de bronce. En caso de que te estés preguntando cuánto costaba todo eso, bueno, cerca de medio millón de dólares. Sin embargo, el granjero no pudo quedárselo, ya que, de acuerdo con la ley sueca, debía entregárselo a las autoridades para que lo analizara, documentara y lo exhibiera en varios museos.

Unas personas encontraron un jacuzzi completo debajo de las tablas de un piso. A juzgar por su aspecto, debe haber sido una especie de centro de spa exterior, porque tenía una tapa de filtro y también estaba rodeado de guijarros. Los dueños anteriores probablemente debieron cubrirlo cuando ampliaron la casa, por lo que la intrincada bañera permaneció oculta durante bastante tiempo. El actual propietario logró conectarse con los dueños anteriores. Bueno, en cierto modo, al menos. Cuando comenzó a quitar las baldosas de corcho de su casa, encontró un mensaje secreto de los dueños originales seguido de cuatro nombres, probablemente los de toda la familia que vivía allí.

Mientras estaba en el proceso de reemplazar su vieja alfombra, una mujer encontró algo que era, a la vez, interesante y un poco extraño. Tan pronto como empezó a desgarrar el suelo, encontró una puerta. Y cuando la abrió y decidió bajar, descubrió un sótano secreto con estantes llenos de frascos. Algunos de ellos estaban vacíos, pero otros estaban llenos de frutos. ¿Tal vez solía ser una especie de despensa? ¿O quizá escondía un secreto más aterrador? Supongo que nunca lo sabremos.

Europa era un lugar difícil para vivir en el siglo XV, ya que los hospitales a menudo estaban llenos de pacientes. Como consecuencia, tuvieron que cerrar algunos de estos establecimientos y, en ocasiones, abandonarlos cuando ya no quedaban médicos para atender a las personas. Pero en 2013, descubrieron lo que quedaba de uno de esos hospitales en Madrid, cuando un equipo de construcción español comenzó a excavar para hacer una nueva Apple Store. Al parecer, el centro se remonta al siglo XV, y funcionó hasta bien entrado el siglo XIX, pero finalmente lo cerraron en la década de 1850 y dejó de usarse desde entonces.

Mirar debajo de las tablas del piso también puede ser una forma única de hacer nuevos amigos. Al menos virtualmente. Cuando Alex Moss, que vivía en Mánchester, Inglaterra, se mudó a una nueva casa, decidió colocar nuevos pisos de madera. Al retirar los viejos, se topó con una nota escrita por el inquilino anterior, que era curiosa, por decir lo menos. Y estaba firmada por alguien llamado Darren Lucas. Alex no se asustó por la inusual advertencia. En cambio, decidió rastrear al propietario anterior y finalmente lo encontró, gracias a los poderes mágicos de Twitter. Se rieron bastante sobre el tema. Y Darren ya no está observando, eso es seguro.

En una granja de Albany, en Australia Occidental, una familia descubrió una carta de amor que parecía ser del siglo XIX. La escritura era hermosa en sí misma y venía con una sorpresa interesante. Había un papel especial bordado con las palabras “recuérdame”. ¡Awww! La relacionaron con una mujer llamada Phebe Mundy, quien escribió la carta a un misterioso Sr. Trotman. Los historiadores locales no pudieron encontrar información sobre ninguna de las personas, pero por el tono de la carta, creen que fue un borrador de una mujer joven que le escribió a un hombre mayor de una clase social diferente.

Otro lugar que tenía un secreto en el suelo: ¡un diario oculto! Un carpintero lo escribió en la parte posterior de las tablas del piso de un castillo alpino francés en algún momento a fines del siglo XIX. Cuando los nuevos dueños del castillo comenzaron a renovar algunas de sus habitaciones de arriba, encontraron muchas cosas escritas en la parte inferior de las tablas del piso. No eran visibles hasta que se retiraron las tablas para reemplazarlas. Estos largos mensajes escritos a lápiz estaban fechados durante varios meses entre los años 1880 y 1881. Todos estaban firmados por un hombre llamado Joachim Martin. Pronto se dieron cuenta de que debía haber sido el carpintero que instaló el piso para los propietarios del castillo de ese entonces. Lo que pretendía con su escritura era dejar una especie de diario secreto que alguien encontraría cuando él ya se hubiera ido. El diario completo contiene unas 72 notas de diferentes longitudes. Algunas de ellas tienen información puramente práctica, mientras que otras eran más personales, especialmente las que hablaban de su familia, amigos y comunidad.

En mayo de 2016, revelaron al público la nueva apariencia de una habitación en la casa de Mount Vernon de George Washington, basada parcialmente en el descubrimiento de pequeños fragmentos de papel tapiz escondidos debajo de las tablas del piso de la habitación. Estos diminutos fragmentos no tenían más de un par de cm de ancho. Pero basándose en el análisis forense de la pintura de estos restos fascinantes, lograron establecer que estos originalmente tenían colores hermosos y un lujoso patrón de cretona. Realmente era muy diferente del diseño simple y aburrido que los curadores creían que solía tener la sala. Todo este proceso, junto con otros recuerdos históricos descubiertos recientemente, permitió a los investigadores redecorar la habitación y devolverle su antiguo esplendor, dando una mejor imagen de cómo era el estilo en ese entonces y cómo se veían las casas en el siglo XVIII. ¡Por George!