Qué es el “impuesto rosa” y por qué las mujeres tienen que pagar más que los hombres

Mujer
hace 5 años

Los datos de investigaciones indican que ser mujer es aproximadamente seis veces más caro que ser un hombre. Los precios de artículos infantiles para niñas, ropa femenina, cosméticos, artículos de higiene, gastos para adquirir una hipoteca y la compra de un auto son más altos que los productos y servicios similares para los hombres. ¿Por qué las mujeres pagan más?

Genial.guru decidió averiguar si es verdad que a las mujeres todo les cuesta más caro.

Cuánto cuesta ser mujer

“Rebajas”.

El pink tax“impuesto rosa” es el costo suplementario que se impone a los artículos femeninos, análogos a los de los hombres. Por ejemplo, el mismo champú diseñado de diferente manera para mujeres y hombres, tendrá un precio diferente.

Los especialistas del Departamento de Asuntos del Consumidor de Nueva York realizaron un investigación de mercado y descubrieron que la diferencia en el precio comienza desde la mercancía infantil. Una patineta rosa o un casco para una niña cuesta el doble que el mismo artículo de otro color para niño. Además, lo mismo aplica para la ropa infantil, zapatos y ropa interior: el precio de las playeras, pantalones y otras prendas para las niñas será entre un 3-13 por ciento más alto.

Las mujeres pagan más en:

  • Hipoteca. Según los estudios, las mujeres pagan un 0,4 por ciento más en ultimar su hipoteca en comparación con los hombres, y durante 20-30 años, la suma no es tan pequeña.
  • Créditos. Una investigación de 2016 confirmó que los bancos ofrecen créditos a las mujeres con una tasa de interés más alta, aunque caen en quiebra financiera con menor frecuencia que los hombres.
  • Ropa. La ropa interior es más cara en un 29 por ciento, las blusas en un 13-15 por ciento, pantalón de mezclilla en un 10 por ciento, suéter en un 6 por ciento e incluso los calcetines en un 3 por ciento.
  • Coche. No se refiere a todos los países, pero, por ejemplo, los vendedores de autos en EE.UU. proponen ofertas más beneficiosas y descuentos en la compra de un carro a los hombres que a las mujeres.
  • Lavandería. Arreglar una blusa femenina cuesta casi el doble que realizar lo mismo con una camisa para hombre.
  • Los productos de higiene personal. El champú y acondicionador son más caros en un 48 por ciento, los desodorantes en un 3 por ciento, jabón en un 6 por ciento y la espuma de afeitar en un 4 por ciento.

De dónde surge esta diferencia del precio:

  • Impuesto por importación. La estadística puede distinguirse para diferentes países, pero en EE.UU. el impuesto a la importación de ropa femenina es en promedio de un 15,1 por ciento y la masculina de un 11,9 por ciento. Por ejemplo, las empresas de EE.UU. pagan aproximadamente un 23 por ciento por la importación de un bléiser femenino de telas artificiales, alrededor de un 18 por ciento por la importación de abrigo y gabán de lana. Para los artículos masculinos, el arancel es menor en varios puntos porcentuales. Todos estos impuestos se incluyen en el costo del artículo y lo hacen más costoso.
  • Impuesto sobre el valor añadido. En el precio de las toallas y tampones se incluye un impuesto del cual están liberados los artículos de primera necesidad. El impuesto más alto en estos productos higiénicos está en Hungría (27 por ciento), Suecia, Dinamarca y Noruega (el 25 por ciento).

Diferencia de impuestos a la importación en artículos masculinos y femeninos en EE.UU.

  • Los gastos reales de tiempo y recursos. Normalmente, el costo de la tintorería para la ropa femenina es más elevado, y esto se explica por la dificultad del modelo y la abundancia de detalles. El corte femenino conlleva un gran gasto en productos para lavar el cabello, teñirlo y peinarlo, y el peluquero gasta más tiempo.
  • Comercialización. Desde el punto de vista de la mercadotecnia, es importante encontrar o crear una propiedad del artículo por la que los consumidores estarán de acuerdo en pagar un precio más elevado. La mercancía para las mujeres es un sector rentable, porque las chicas están listas para pagar más por las características estéticas de las cosas.
  • El deseo de las mujeres por ser guapas. Dirk Schulz, el director del Instituto de Investigaciones de Género de la Universidad de Colonia, Alemania, indica que los hombres son principiantes en la esfera de la belleza, por eso las marcas tratan de conquistarlos con precios bajos. Pero las representantes del género femenino están listas para gastar más dinero en mercancías y servicios relacionados con el aspecto físico. Las mujeres se sienten más obligadas a verse bien, cree Schulz.
  • Psicología de tomar decisiones. El enfoque femenino para tomar decisiones, según los científicos, se distingue del de un hombre. Las mujeres asocian las compras con el descanso, desempeñan un papel psicológico, emocional y simbólico. Por eso el comprador típico siempre es una mujer.

Quién lucha contra el sobreprecio injustificado y cómo se hace

  • EE.UU. Aquí han presentado un proyecto de ley sobre el rechazo del “impuesto rosa”, destinado a prohibir a las empresas a establecer diferentes precios a los bienes y servicios similares tanto para hombres como mujeres. En Estados Unidos, las cafeterías, tiendas y farmacias realizan promociones durante las cuales tratan de aumentar la conciencia de las personas acerca del “impuesto rosa”. Ellos ofrecen comprar productos masculinos más caros y muestran la diferencia en el precio mediante un envase rosa.

“Nueva política de la tienda: todas las compras de mujeres están liberadas del impuesto; todos las compras de hombres deben pagar un 7 por ciento de ’impuesto masculino’”.

Burger King llevó a cabo una promoción al vender porciones de comida similares a diferente precio: en el envase rosa, la comida costaba el doble que en uno normal. Las chicas se negaban a pagar más y servían el contenido del envase en la bandeja, devolviendo el empaque al cajero. Pero nadie se queja de que el rastrillo femenino cuesta más que el de hombre. Los organizadores de esta manifestación querían que los compradores prestaran atención a esto.

  • Malasia. Solamente en 2018, se canceló el IVA en las toallas femeninas y tampones higiénicos, el cual era del 5-10 por ciento.
  • Canadá. En 2015, las autoridades cancelaron el impuesto a los tampones y toallas higiénicas, aunque esta medida le costó al presupuesto alrededor 36 millones de USD.
  • Francia. Después de las manifestaciones realizadas en 2015, el gobierno redujo el impuesto a los productos de higiene femenina de 20 a 5,5 por ciento. Al presupuesto le costó decenas de millones de euros. Aquí está una de las fotografías del evento de 2015.

“Tampón dorado”.

No solo los precios de los tampones higiénicos causan objeción como un objeto de primera necesidad. Muchas mujeres comienzan a preguntarse para qué gastar tanto dinero en productos de cuidado personal.

  • Corea del Sur. El volumen de ventas del mercado de cosméticos coreano es más de 13 mil millones USD al año, entra en el top 10 de los mejores en el mundo. Pero ¿en qué consiste la cuestión? ¿El sistema de cuidado de 10 pasos y el estreno anual de nuevos productos de la línea cosmética son una necesidad o un método para vender a una mujer todo y en mayor cantidad?

Las chicas coreanas lanzaron un reto: tiran sus cosméticos y publican las fotos en Instagram con el hashtag #escapethecorset (#escapadelcorsé).

Y tú, ¿has notado la diferencia de los precios de ciertos artículos para mujeres y hombres?

Comentarios

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Se llama libre mercado, señores. A mayor demanda, precios mas altos.

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El mercado se aprovecha de niestras necesidades y vanidades de vernos bellas; y que necesitamos otros productos de cuidado personal .

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