Un cantante abraza su nuevo look después de que la mayor parte de su cuerpo fuera electrocutado

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hace 6 meses

Te presentamos a Axel Schylström, un cantante de 30 años cuya vida dio un giro dramático a una edad temprana. A los 19 años recibió una descarga eléctrica de 16 000 voltios que le produjo quemaduras en el 70% de su cuerpo. En la actualidad, ha aprendido a aceptar su nuevo aspecto, pero el camino ha sido difícil.

El accidente que cambió su vida

El accidente de Axel tuvo su origen en una experiencia especialmente mala mientras practicaba “surf en el metro”. A los 19 años, entró en contacto con cables de alta tensión, lo que le provocó una descarga eléctrica masiva que le quemó la mayor parte del cuerpo y la mitad de la cara. Revela: “Me culpo a mí mismo por lo que pasó, pero no me odio”.

Sabiendo que nunca volvería a tener el mismo aspecto

El accidente le sumió en una batalla por la supervivencia, y la recuperación fue dura. Recuerda que su único objetivo era sobrevivir durante el primer mes como víctima de quemaduras. Pero lo más duro fue darse cuenta de que nunca volvería a ser el mismo.

El florecimiento de su carrera musical

Sin embargo, no todo estaba perdido. Durante su recuperación hospitalaria, Axel encontró consuelo en la música, que le inspiró para participar en la versión sueca de American Idol. Su sueño se hizo realidad cuando quedó cuarto en el concurso.

Tras completar su periplo en el reality show, Axel sintió una nueva sensación de “puedo hacer cualquier cosa”. Reflexionó sobre la profunda vergüenza con la que luchó antes de debutar en televisión, una época en la que prefería quedarse en casa y evitar los espejos. Pero entonces subió al escenario con millones de ojos fijos en él.

Ahora, su misión es inspirar a otros

En la actualidad, compagina su carrera musical con su nueva faceta de conferenciante motivacional, impulsado por el profundo propósito de empoderar a otros supervivientes de quemaduras. Su mensaje es muy claro tras descubrir el amor propio: “La belleza es quererse a uno mismo”.

“No creo que realmente importe tu aspecto. Importa cómo te ves a ti mismo. No pasa nada por ser diferente”, comparte su sabiduría.

Todavía hay muchas personas, como Axel, que abrazan con orgullo su singularidad y nos sirven de inspiración a todos.

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