Hay algunas celebridades como Salma Hayek, Jennifer Lopez o Ricky Martin cuya herencia latina es bastante obvia, ya sea por sus rasgos físicos o por sus nombres. Sin embargo, en el mundo de Hollywood hay un grupo bastante grande de famosos que pueden trazar sus raíces a países como México, Perú o Venezuela. A pesar de que no poseen características que suelen identificar a un hispano, estos cantantes y actores también tienen sangre latina.
Las estrellas de cine no siempre pueden brillar con la misma luz, así que en algunas películas lucen todas sus habilidades de actuación, mientras que en otras, su trabajo deja tanto que desear que se ganan nominaciones como peor actor o actriz, demostrando que la vida es una rueda de la fortuna y que nunca sabes cuándo te tocará estar abajo.
Es algo común que veamos a la maternidad pintada de rosa en las películas y las series de TV. Pero quien conoce el oficio sabe que la realidad es muy diferente. Ser madre abarca tantos aspectos que en algunos de ellos, las cosas no son tan románticas ni perfectas. Por eso, agradecemos que en algunas producciones de Hollywood se la presente tal como es: un torbellino que moviliza hasta la última fibra de una mujer.
Entre los tantos procesos complejos por los que pasa una producción a la hora de hacer una película, está el de cómo titularla. Una gran historia, bien filmada y producida, debería trascender más allá de las pocas palabras que le dan nombre; sin embargo, vivimos en un mundo donde el marketing y los algoritmos mandan, y una de las primeras cosas que captan la atención del espectador es el nombre del filme. Como la historia del cine tiene más de 10 décadas, algunos títulos específicos se repitieron, y por una razón u otra, algunos recordamos una, y otros, la versión menos popular.
“La belleza cuesta”. Ese era uno de los dichos populares de hace muchos años, en el que se subrayaba el hecho de que para ser bellas, era necesario hacer muchos sacrificios. Afortunadamente, los estándares de belleza han cambiado y ahora ya no debemos someternos a torturas físicas para ser consideradas bonitas.
¿Recuerdas lo que hacías en 1994? Probablemente, en algún momento, te divertías con los alocados gestos de Jim Carrey en La máscara, uno de los filmes más populares de ese año. La perfecta unión de la trama, la dirección, los efectos especiales, las bromas y el carisma del comediante y su compañera, Cameron Díaz, dio como resultado un éxito absoluto. Pero no fue solo eso, muchas otras cosas sucedieron tras bambalinas para que esta película se hiciera realidad.
Como sucede con las bandas sonoras, a veces los carteles o pósteres se vuelven más conocidos que la propia película que promocionan, y no necesariamente por una buena razón. Pues hasta al más experto diseñador se le puede ir un detallito en la entrega final.
Detrás de lo que vemos en pantalla hay cientos de personas involucradas, horas de trabajo y trucos que podríamos no imaginar. Las películas que han marcado nuestras vidas guardan historias en cada escena que las hacen aún más interesantes y emocionantes.
Los cineastas suelen reevaluar las imágenes de los famosos héroes literarios, personajes de historietas y personalidades de culto, expresando su visión de las historias que ya existen. Y luego, la audiencia y los críticos discuten durante mucho tiempo sobre qué versión fue la más exitosa.
Dicen que no hay edad para encontrar el amor verdadero. Y es que, en realidad, nunca es tarde para toparte con aquella persona con la que puedes sentir compañerismo, bienestar y todo lo que conlleva una relación sana. El gran actor británico, Gary Oldman, puede dar fe de ello, puesto que encontró finalmente a su media naranja a los 60 años, tras cuatro matrimonios fallidos.
La edad promedio de las mujeres que dan a luz por primera vez aumenta constantemente en todo el mundo. Por ejemplo, en los países europeos, en 2013 esta cifra era de 28,8 años, mientras que en 2018 una mujer que decidió ser madre tenía en promedio más de 29 años. Esto se debe principalmente al desarrollo de la ciencia. Más recientemente, la modelo de fama mundial Naomi Campbell se convirtió en madre por primera vez a la edad de 50 años. Ella le agradeció al progreso científico por esta oportunidad.
Los famosos tienen equipos enteros de estilistas, maquilladores y peluqueros que trabajan en sus looks antes de que estos pisen las alfombras rojas. Pero incluso con el trabajo en equipo, el resultado puede no ser siempre exitoso. Sin embargo, de una anécdota tan desagradable como, por ejemplo, un mal maquillaje en un evento importante, muchas famosas obtienen una experiencia positiva, ya que ahora saben exactamente qué no hay que hacer.
A menudo, actuar parece más fácil y divertido de lo que realmente es. Esto se debe a que, en algunas ocasiones, surge un rol que exige un poco más de los intérpretes. Hay personajes que requieren que nuestros actores y actrices favoritos aprendan una nueva habilidad que simplemente no tienen. Para actuar en estos roles, las estrellas se someten a intensos regímenes de entrenamiento, de semanas o incluso meses, para adquirir nuevas habilidades a la hora de incorporar a sus personajes.
En la búsqueda de una buena película, cada uno tiene su propia orientación. Algunos escuchan la opinión de los críticos y otros, las calificaciones de los espectadores. El popular sitio IMDb ha recopilado películas legendarias que ya se han ganado el amor de millones y han contribuido al desarrollo de la industria cinematográfica.
Los psicólogos indican que a veces las personas basan gran parte de su autoestima en lo bien que se ven según ellas mismas. Los complejos sobre la apariencia surgen como resultado de las palabras descuidadas de los seres queridos o de la comparación de la apariencia con los estándares populares. Y en muchas ocasiones, aquellos que nos rodean se sorprenden de que estemos preocupados por nuestro defecto, ya que los demás, por el contrario, lo ven como una ventaja.
Un elenco bien conformado es la clave del éxito de una película. Pero a la hora de elegir a los candidatos, los directores de casting a menudo cometen errores. Y cuando a las celebridades se les otorga un papel en el que no se ven muy bien, entonces no se pueden evitar las reseñas críticas ni los comentarios adversos.
Todos recordamos claramente los roles que dieron fama a estas actrices, maravillosas mujeres en todos los aspectos. Algunas estrellas se encendieron literalmente ante nuestros ojos. Parece que fue ayer que vimos por primera vez a Uma Thurman bailando twist con John Travolta. Y que no hace mucho nos preocupábamos por la joven heroína Nicole Kidman en la película Bangkok Hilton.
La elección del nombre de los hijos es algo bastante complejo, que requiere, en la mayoría de las ocasiones, una exhaustiva búsqueda e investigación. Muchos padres buscan la originalidad, desean que el nombre de sus hijos sea único y, sobre todo, que esté cargado de significado. Los famosos no son la excepción, y algunos de ellos se decidieron por nombres poco comunes y difíciles de repetir.
Hay momentos en el cine que se vuelven un ícono de un cierto género o se convierten en un símbolo con el que los fans de una película se pueden identificar. Pero no importa si las películas son de comedia, de terror o de ciencia ficción, la moda siempre va a estar presente y en varias ocasiones hemos deseado poder tener un par de tenis futuristas como los de Marty McFly de Volver al futuro, o tal vez usar unas zapatillas de cristal Swarovski como las de la Cenicienta.
Los directores y productores piensan muy bien la trama, las escenas, los diálogos y los giros inesperados de las películas. Pero, en muchas oportunidades, también se encargan de idear e incluir ciertos detalles para poner a prueba el poder de observación de los espectadores más experimentados. Carteles colgados en la pared que cobran vida, homenajes a animadores legendarios y ecuaciones matemáticas de la vida real, son solo algunos de los elementos que podemos encontrar en los filmes si tan solo miramos con atención.
La relación entre las famosas y sus hijas se puede ver constantemente en redes sociales. El parecido entre muchas de ellas es innegable, pero nada mejor que el paso del tiempo para hacer una buena comparación de cómo lucían las estrellas en su juventud. Sabemos cómo luce, por ejemplo, Uma Thurman ahora y como luce su hija Maya. ¿Pero recuerdas cómo era Uma a los 21 años, misma edad que tiene ahora Maya?
Cuando miramos una película, por lo general estamos acostumbrados a ver una historia en la que los protagonistas actúan como si no estuviésemos ahí. Normalmente sentimos que nos colamos en una parte de su vida y la espiamos. Esto se conoce como cuarta pared, una barrera “invisible” que sería la pantalla del cine, o de la televisión, que separa a los personajes del público. ¿Pero qué pasa cuando un actor interpela directamente al espectador? Esta pared se rompe.
Hay películas inolvidables por sus actuaciones, música, o por su fotografía. Pero hay cintas en que se combinan magistrales actuaciones de actrices e icónicos vestidos, y el resultado de esa unión se lleva todos los aplausos.
Dicen que “del hubiera nadie vive” y Hollywood no es la excepción; sin embargo, teniendo en cuenta algunos datos, resulta difícil no empezar a reflexionar sobre “¿Qué hubiera pasado si...?”. Por ejemplo, ¿cómo se habría visto Matrix si el papel de Neo hubiera sido reescrito para Sandra Bullock? O, ¿cómo habría sido Dumbledore interpretado por Ian McKellen? De hecho, ¡todo esto podría haber sido realidad!
En la historia del cine y la televisión hay cientos de películas y series exitosas. Algunas se lo deben al argumento, a la trama, a los efectos especiales o al drama que cuentan. Hay películas y series de amor, de crímenes, de mafia, de ciencia ficción; algunos son algo violentas, otros más rosas. Pero lo cierto es que no son pocas las veces en las que el resultado depende de sus personajes —algunas veces principales y muchas otras secundarios— cuyo irresistible carisma acapara las miradas de quienes están del otro lado de la pantalla.
El mundo del cine ha logrado impulsar la carrera de muchos actores y ha narrado historias que se convirtieron en clásicos, pero también ha marcado influencia en la industria del calzado. Ya sea de manera intencional o accidental, existen modelos de todo tipo que se volvieron la sensación de muchas personas con solo salir en pantalla por unos instantes, formando parte de los accesorios más populares del séptimo arte.
Las mujeres modernas utilizan muchos métodos para conservar su juventud y corregir sus supuestos defectos, que no las dejan sentirse guapas al 100 %. Unas se hacen operaciones quirúrgicas, otras le dan preferencia a los procedimientos cosméticos. Lo más importante es acatar las medidas, ya que el deseo de ser un poco mejor puede convertir a cualquier mujer en otra persona por completo.
Las películas y los programas de televisión cuestan a los productores millones de USD. Los especialistas en efectos visuales trabajan sin descanso creando gráficos de computadora alucinantes y muy realistas. Pero cuando se trata de la producción de carteleras, en algún lugar del mundo siempre se encuentra un diseñador con poca experiencia que es capaz de arruinar el cartel con unos pocos clics de su ratón.
La mayoría de las películas que vemos pasan de largo por nuestra memoria, salvo aquellas que cuentan una historia a través de la música y el baile. Son esas películas que vemos una y otra vez, solo por disfrutar de esa increíble escena de baile que podríamos reproducir solo con escuchar las primeras notas de la canción que hace danzar a los protagonistas.
Tarde o temprano, en la carrera de cualquier actor, se produce un declive. Las razones pueden ser distintas: a alguien no lo quieren contratar debido a una vida escandalosa, otros no se adaptan al perfil de los personajes y encontramos también varios que quieren descansar de todo e irse a surfear las mejores las olas del océano.
Quentin Tarantino es uno de los directores de cine más reconocidos de nuestra época por su gusto único y su gran talento. A lo largo de ocho películas nos ha brindado muchas referencias de cintas clásicas de los años setenta, con guiones entretenidos, una peculiar elección de música y un elenco de actores que nos ha acostumbrado a actuaciones explosivas, como Uma Thurman o Samuel L. Jackson. Desde Perros de reserva hasta Los 8 más odiados, Tarantino nos ha mantenido a la expectativa en cada uno de sus estrenos.
Todos podemos tomar una decisión y luego cambiar de opinión. Igual que los directores de cine que también son personas: al principio alguna idea les parece brillante, y luego hay que retocar la película. Curiosamente, a veces el papel eliminado de la película puede convertirse en el camino hacia la gloria (como sucedió con la actriz eliminada de Constantine), pero de vez en cuando sucede que la popularidad impide que el actor obtenga el papel, lo confirman Harrison Ford y Tobey Maguire.
Una actriz verdaderamente talentosa es capaz de reencarnarse en cualquier personaje. Incluso las divas más bellas de Hollywood siempre están interesadas en interpretar a una “nerd” ordinaria, una científica modesta o una chica problemática con la apariencia adecuada.
Ver películas psicológicas no solo es interesante, sino también beneficioso. Estos filmes te obligan a reflexionar sobre tus propias acciones a las que, en ocasiones, ni tú mismo puedes darle una explicación. Y, al analizar el comportamiento de los personajes de tales películas, se pueden hacer algunas conclusiones sobre nuestra propia salud psicológica.
A las celebridades no siempre les gusta mostrar su vida privada, y menos a sus hijos. Pero a nosotros nos da curiosidad ver a qué se dedican los vástagos de las estrellas y a quién de sus famosos padres se parecen más. Por eso, Genial.guru realizó una pequeña investigación y volvió a darse cuenta de que los niños crecen muy, muy rápido.
La lotería genética es un juego impredecible y emocionante. A veces, las mujeres más lindas tienen hijos de apariencia más ordinaria. Y otras veces, los herederos de las estrellas pueden salir mucho más lindos que sus famosos padres.