10 Cosas comunes cuyo verdadero propósito puede confundir a algunas personas del siglo XXI

hace 4 años

Es poco probable que, en nuestra época, se pueda encontrar un departamento en el que no haya cosas como un sofá, un armario o una cama. Sin embargo, nuestros antepasados usaban algunos de esos objetos de una forma ligeramente diferente a la nuestra.

Genial.guru decidió aprender un poco más sobre cómo era la vida en los tiempos pasados. Una advertencia para los lectores: es probable que, después de leer el artículo, no puedan entrar al baño público sin reír nerviosamente.

Solo las personas privilegiadas podían recostarse en el sofá

Se cree que los primeros sofás en Europa fueron introducidos por los antiguos romanos como camas de mesa para la glotonería, invitados y conversaciones tranquilas. Solo los hombres ricos se sentaban en ellos, ya que las mujeres y esclavos usaban bancos de piedra. Los niños también se acurrucaban sobre ellos.

Los armarios de nuestros antepasados tenían otro propósito

Se supone que los habitantes de los países de Oriente Medio fueron quienes inventaron un “cajón con tapa”, y luego los griegos y romanos tomaron prestado este conocimiento. Entonces, en Roma se inventó el larario, otro pariente lejano del armario moderno. Era un nicho en la pared, cerrado por puertas. Este no servía para almacenar comida o ropa, sino objetos sagrados, entre los cuales había imágenes de dioses, muñecas de niñas casadas, mechones de pelo de jóvenes que habían sido iniciados en hombres, entre otras cosas.

El tenedor era considerado un objeto perteneciente a las fuerzas oscuras

Los tenedores comenzaron a usarse como cubiertos personales en el siglo XI, en Bizancio. Inicialmente, solo tenían 2 dientes, los cuales se utilizaban para tomar los trozos de comida. Es curioso, pero al principio era considerado como un instrumento del demonio, y se impedía su distribución entre la población de todas las formas posibles.

Por ejemplo, la princesa bizantina Maria Argyra, al utilizar un tenedor en una fiesta de bodas, fue condenada por todo el mundo. La joven fue acusada de evitar tomar comida con los dedos, usando un objeto extraño en su lugar. Sin embargo, con el tiempo, el tenedor entró firmemente en la vida cotidiana de la nobleza, mientras que los pobres continuaron comiendo con las manos durante mucho más tiempo.

Los paraguas solo podían ser usados por funcionarios del gobierno, pero no se utilizaban para protegerse de la lluvia

Los primeros paraguas fueron diseñados para protegerse del Sol. Fueron inventados alrededor del siglo XI a.C., en ChinaEgipto. En ambos estados, el paraguas era considerado un símbolo de poder, por lo que solo las personas reales y sus asociados cercanos podían usarlo. Cabe mencionar que, en ese momento, las sombrillas pesaban unos 2 kg, y su altura podía ser de 1,5 m.

Las personas se amontonaban en las camas

Hasta el siglo XIX, las camas no eran un mueble habitual, incluso entre las personas ricas. La gente solía dormir en el heno, en el lugar de trabajo, en los bancos y los cofres. Cuando este mueble comenzó a ocupar firmemente su lugar en la vida cotidiana, se usaba de una manera algo diferente a la actual.

Los anfitriones e invitados dormían en la misma cama, y las mujeres se acostaban en el medio, junto con sus esposos. Esto era necesario para tener, al menos, alguna oportunidad de cumplir con el deber conyugal. Las camas individuales no gozaban de mucha popularidad, ya que, en aquel entonces, era difícil calentar todas las habitaciones de la casa, por lo que era más cálido dormir en compañía.

Los botones se usaban como decoraciones

Antiguos botones rusos en forma de pesas en miniatura.

En la antigüedad, durante un largo período de tiempo, los botones fueron considerados simple decoración para la ropa. Mientras tanto, su función era desempeñada por todo tipo de hilos y hebillas. Recién en el año 2000 a. C. aparecieron los primeros botones con ojales para abrocharse la ropa, y estaban hechos de piedra.

Las cucharas alargadas aparecieron gracias a la moda de los collares grandes

A principios del siglo XVII, la moda de los collares enormes llegó a Europa. Además del esplendor y la grandeza, este accesorio trajo muchos problemas a sus propietarios: no podían llevarse una cuchara a la boca. Entonces, a las personas se les ocurrió una versión alargada de este dispositivo, la cual se parecía a los cubiertos que usamos actualmente para helados o cócteles.

El reloj se llamaba “pulsera”, y era utilizado exclusivamente por mujeres

En 1571, la reina Isabel I de Inglaterra recibió un reloj de pulsera como regalo. Desde ese momento y hasta el siglo XX, los relojes fueron llamados “pulseras”, y eran considerados un accesorio de las damas. La versión masculina de este instrumento se puso de moda a principios del siglo XX. En los inicios, los relojes de pulsera eran usados por los militares, ya que, durante las batallas, los de bolsillo eran incómodos de usar.

Los primeros balcones fueron utilizados como refugios militares

En el siglo XI, durante el asedio de los castillos, los balcones eran utilizados como refugios para tiradores. Era bastante cómodo apuntar a los enemigos desde arriba, ya que el tirador tenía buena visibilidad (a diferencia de las aspilleras, por ejemplo), y la parte inferior del cuerpo estaba oculta detrás del muro.

Una cuerda colgaba sobre cada retrete, pero no para descargar el tanque

Los primeros baños públicos eran salas abiertas sin tabiques. Por lo general, no tenían ventanas, por lo que la oscuridad permitía preservar, al menos, algo de anonimato. Además, se cree que los baños no se dividían en los de damas y los de caballeros, sino que estaban destinados a ambos sexos a la vez.

Una cuerda colgaba sobre cada asiento, pero no se usaba para descargar el tanque. Una persona tiraba de ella si caía por un hueco en el banco, lo que sucedía a menudo, ya que los baños públicos eran visitados por personas borrachas. Agarrando la cuerda, podían salir a la superficie. De lo contrario, tenían que pedir ayuda.

¿Sabes cómo se usaban otros objetos antiguos que se consideran imprescindibles en nuestra época? Cuéntanos en los comentarios.

Imagen de portada Matilda / Rock Films

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