Famosos

No hace mucho, Alain Delon, Jude Law y muchos otros actores conquistaron los corazones de millones de mujeres en todo el mundo. Parecía que nadie podía superarlos en belleza y encanto. Sin embargo, de repente, resultó que había crecido una nueva generación de chicos talentosos, ambiciosos y muy hermosos que estaban listos para competir con sus padres.

Los famosos se cuidan con diligencia e incluso a los 50-60-70 años, se mantienen en buena forma y atractivos. Cuando aparecieron, durante su juventud, muchos de ellos eran tan guapos que no era nada fácil dejar de mirarlos.

Imagina que llegas a una fiesta y ves que uno de los invitados tiene exactamente tu mismo atuendo, ese que escogiste con esmero y con el que querías brillar. Bueno, es una situación bastante común, incluso entre los famosos. Ya sea por elección propia o por pura casualidad, las celebridades suelen “copiar” vestuario. Lo fantástico es que cada una le añade su estilo, luciendo completamente diferente.

Al mirar hoy a Julia Roberts y Pamela Anderson, es difícil creer que tengan la misma edad. La primera es partidaria de lo natural, la segunda, fanática de las cirugías. Por supuesto, cada uno es libre de decidir si condenar o aprobar el uso de los servicios de los cirujanos plásticos y procedimientos de rejuvenecimiento peligrosos. Pero siempre es interesante comparar cómo se ve alguien que no les teme a los cambios provocados por la edad, y aquel que está dispuesto a todo para esconderlos.

Para salir bien en las fotos, es importante conocer nuestro “mejor” lado y elegir el ángulo adecuado. Estas reglas tácitas también son aplicadas por las celebridades. A menudo, los vemos de frente, pero resulta que algunas de ellas son irreconocibles si las miramos de perfil.

Con el correr de los años, los cambios físicos se acentúan. Nos ocurre a todos los seres, pero en el caso de los famosos, la lente de la cámara deja todo registrado, desde una nariz más perfilada hasta unos labios más gruesos que intentan dibujar el paso del tiempo de la forma más inadvertida posible (aunque en muchos casos lo hacen más notorio).

Dando sus primeros pasos en el cine, los jóvenes actores aprenden con entusiasmo de sus colegas más experimentados. Pero a veces, los jóvenes talentos se convierten en actores adultos de pleno derecho en un abrir y cerrar de ojos.

Ricky Martin siempre ha sido único e irrepetible, tanto en los años 90 como ahora. Es tal su fama que, sin duda, muchos quieren imitar su atractivo. Y eso está bien; todos tenemos modelos en nuestras vidas. Pero probablemente pocos lo hayan llevado tan lejos como Fran Mariano, quien se hizo más de 30 cirugías para lucir como su cantante favorito, y el resultado no estuvo ni cerca de parecerse ni a un pariente lejano.

Hace unos 30 años, Cameron Díaz se encontraba en la cima de la fama, con el mundo alabando sus dotes interpretativas y su buen aspecto. Sin embargo, la celebridad no tenía ni idea de lo pronto que la industria del cine empezaría a imponerle sus nociones de belleza y juventud. Pero Cameron no aceptó las condiciones del juego. Su historia merece un aplauso.

Ya nos hemos acostumbrado al hecho de que las estrellas regularmente se hacen operaciones para parecer más jóvenes, y no nos sorprende una nariz “nueva” o unos labios hinchados en una celebridad. Sin embargo, hasta entre las famosas hay mujeres que no le temen a la vejez: rechazan el bótox y no aceptan por nada en el mundo una intervención de manos de un cirujano plástico.

Las famosas de Hollywood suelen marcar tendencia en la moda. A veces, en el afán de hacerse notar y ser distintas a las demás, algunas celebridades se animan a lucir diseños tan particulares que es imposible pasarlos por alto. En estos casos, los zapatos se llevaron todas las miradas y los clics de los fotógrafos. No te pierdas el bono del final, en el cual una famosa destacó directamente por no usar nada en los pies.

A veces, podemos observar cómo la fama arruina a las personas. Resulta que no están preparadas para este tipo de atención pública, son groseras con sus fans y surgen escándalos a su alrededor. Pero hay otras celebridades que saben gestionar su popularidad e incluso convertirla en algo bueno: son respetuosas con sus admiradores, realizan obras de caridad y, en general, siguen siendo buena gente.

En Psicología, existe un término llamado gerontofobia, es decir, el miedo a la vejez. Por supuesto que, con el tiempo, nuestra apariencia cambia, y eso es especialmente difícil para los actores, porque los fanáticos están acostumbrados a verlos jóvenes y en forma. Aunque, algunas personas solo mejoran con la edad, al igual que un buen vino.

La cosmetología moderna puede prolongar la belleza durante décadas y nuestras celebridades no dudan en usarla. Sin embargo, es muy interesante pensar en cómo se verían si fueran totalmente naturales y dejaran de usar cualquier procedimiento de belleza moderno, incluso exfoliaciones o cremas.

El 23 de septiembre de 2023, el cantante español Julio Iglesias, que dio al mundo los éxitos Nathalie y El amor, cumplió 80 años. En honor a este acontecimiento, hemos decidido contar la historia de la vida del icónico artista, que contiene tantos giros argumentales que darían para más de un guion de telenovelas.

El tiempo en que las mujeres se sentían obligadas a maquillarse casi ha terminado. Según una encuesta reciente, la mayoría de las mujeres se sienten lo suficientemente seguras con su cara al natural, y solo 2 de cada 5 admiten que necesitan maquillaje para sentirse seguras. Creemos que es un gran progreso, ya que hay algo cautivador en la belleza natural de las personas. Así que hemos seleccionado a 15 celebridades que se deshacen del maquillaje siempre que pueden y nos inspiran a hacer lo mismo.

Para las estrellas, especialmente actores y músicos, su apariencia es una herramienta de trabajo de la que a menudo depende el éxito profesional. Por eso no es de extrañar que, intentando preservar su juventud cueste lo que cueste, recurran a los servicios de cosmetólogos e incluso cirujanos plásticos. Pero muchas celebridades se oponen rotundamente a tales procedimientos estéticos.

No hace tanto tiempo, la alfombra roja parecía un baile de gala en el que se alternaban voluminosas faldas, elegantes volantes y largos penachos. Hoy en día, sin embargo, prima la creatividad. Celebridades y diseñadores intentan sorprendernos cada vez más con siluetas inusuales, detalles complejos y cortes provocativos. Y nosotros estamos encantados de contemplar los resultados de su creatividad.

Sea para una alfombra roja o para una película, las famosas muchas veces deben enfrentarse a atuendos incómodos o ajustados para verse bien. En otros casos, es difícil encontrar prendas que se adapten a la talla de cada celebridad. Sin duda, las estilistas y diseñadoras no la tienen fácil, pero siempre admiramos a las que se ponen en el lugar de sus clientas y buscan el confort de ellas.

Estamos acostumbrados a que los actores cambien su aspecto y su personalidad según lo requieran los personajes que van construyendo a lo largo de su carrera. Sin embargo, hay algunas interpretaciones que se quedan en su memoria, y en la nuestra, sin importar cuántos años pasen. Muchos de ellos parecen guardarle gran cariño a las más icónicas, hasta que, décadas después, abren el baúl de los recuerdos para usar elementos de su rol más emblemático.

La capacidad histriónica de un actor secundario puede igualar —e incluso opacar— el rol del papel protagónico, no importa si su actuación esté planeada para unos minutos o durante toda la trama. Existen papeles que se quedan en la memoria del público y hasta llegan a ser referencia principal de la película en la que actuaron.

El código de vestimenta para eventos como premios, festivales y estrenos de cine es estricto pero simple: un esmoquin para los hombres y un vestido de noche o de cóctel para las mujeres. Sucede que a las estrellas a veces les gusta ser recordadas por los espectadores por haber creado una imagen inusual. Y a menudo pasa a primer plano la cuestión de la comodidad.

Normalmente, cuando hablamos de actrices, pensamos en sus mejores papeles o en sus fracasos creativos. Como mucho, podemos hablar de un par de looks para las alfombras rojas. Sin embargo, fuera de los sets de rodaje y de los eventos oficiales, suelen ser personas geniales, con aficiones poco convencionales y perspectivas de vida motivadoras.

Se necesitan semanas o incluso meses para que las celebridades se preparen para los eventos importantes. Piensan en la creación de sus looks hasta el último detalle, a menudo dando un significado especial a su atuendo y accesorios. Los fanáticos y los expertos en la moda han estado rompiéndose la cabeza durante mucho tiempo para tratar de averiguar qué querían decir las famosas mediante estos detalles.