Hombre quedó desfigurado tras hacerse más de 30 cirugías para verse como Ricky Martín

Ricky Martin siempre ha sido único e irrepetible, tanto en los años 90 como ahora. Es tal su fama que, sin duda, muchos quieren imitar su atractivo. Y eso está bien; todos tenemos modelos en nuestras vidas. Pero probablemente pocos lo hayan llevado tan lejos como Fran Mariano, quien se hizo más de 30 cirugías para lucir como su cantante favorito, y el resultado no estuvo ni cerca de parecerse ni a un pariente lejano.

Fran Mariano siempre tuvo una gran preocupación por su apariencia física: “Empecé a buscar la belleza, una que estuviese a mi alcance, como teñirme el pelo y ponerme lentes de contacto. Luego llegó a mis manos una revista muy conocida en donde ponían a las 100 personas más bellas del mundo”, en la que estaba Ricky Martin (¡y vaya que creemos que es cierto! En Genial.guru nos encanta saber todo sobre el cantante).

Así que, sin dudarlo, fue a ver a un cirujano plástico, le mostró una foto de Ricky Martin y le dijo: “¡Quiero parecerme a él!”. El especialista plástico le dejó el mentón, la mandíbula y la nariz como los del cantante. Sin embargo, para Fran, ese fue solo el comienzo. La experiencia lo llevó a buscar aún más cirugías para conseguir la apariencia perfecta: “Sí, me he realizado una cantidad de procedimientos estéticos que, ya después del número 30, perdí la cuenta, pero creo que ya tuve 40 cirugías”.

Lamentablemente, tantas intervenciones pusieron en riesgo su vida y afectaron negativamente su apariencia: “Toda la vida estuve buscando la belleza, pero me dijeron que tenía que llenarme de cicatrices si quería seguir viviendo (...). Ahora tengo que sacarme toda la silicona de a poco, con tratamientos”, contó.

Luego de haberse sometido a varias intervenciones, su vida ya no corre peligro, pero tiene que vivir con varias secuelas permanentes que afectan su forma de desenvolverse en la cotidianeidad: “No siento la mitad de mi cara, ni mi nariz ni mi mentón. Cuando tomo líquido, a veces tengo que hacerlo con ayuda de una servilleta porque se me vuelca (...). Tengo cortes alrededor de las cejas porque me inyectaron aceite, el cual empezó a entrar a mis ojos y me hizo perder el 25 % de la visión”.

Fran demandó a los profesionales que le hicieron las cirugías por mala praxis, y no recomienda a las personas recurrir a intervenciones estéticas: “Si hay que hacerse una cirugía, que sea como último recurso, y no como yo, que a los 21 años ya tenía cuatro veces operada la nariz. No lo hagan, porque el resultado siempre será el fracaso”, sugirió. Afortunadamente, ha aprendido a amarse a sí mismo como es, sabiendo que todas sus cicatrices son ahora una señal de fortaleza y superación.