10 Cosas dolorosas que los hijos adultos hacen a menudo con sus padres

El 20 % de las personas de la tercera edad nunca se jubilan, pero aun así, el 75 % de ellas tienen por lo menos una condición de salud crónica, y muchas de ellas, dos o más. Nunca es demasiado tarde para ayudar a las personas mayores, especialmente a las personas cercanas a nosotros. Incluso un momento de atención puede facilitar y alegrar la vida de nuestros padres ancianos.

En Genial.guru, queremos que nuestros padres pasen un tiempo muy merecido con nosotros y que se preste atención a sus necesidades, es decir, un tiempo de calidad. Aquí puedes encontrar 10 cosas que los hijos adultos a veces hacen que causan sufrimiento a sus padres.

1. Descuidar a sus padres

Te extrañan, te necesitan y quieren pasar tiempo contigo. Cuando llevas a tus padres a un asilo de ancianos y apenas los visitas, pueden sentirse solos, incluso si están rodeado de muchas personas de su edad.

2. Decir cosas indebidas

Aquí hay algunas frases dolorosas que podemos decir a nuestros padres que resultan bastante hirientes para ellos:

• ¿Por qué me tuviste?
• Nunca pagas por mí.
• Amas más a mi hermana o a mi hermano.
• Te odio.

Imagínate tú mismo como una persona mayor con un hijo adulto. Decir cosas como estas puede considerarse traumatizante, especialmente si se hace para manipular.

3. No preguntar sobre su salud

No todas las personas se quejarán del dolor constante o dirán que se sienten enfermas. Tan solo con preguntar cómo les va y decir que pueden ser honestos con nosotros los liberará de ese constante estrés de sentirse mal.

4. No ayudarlos financieramente

No se trata de hacer que tus padres se sientan como niños, pero de vez en cuando puedes mandarles dinero para que se diviertan o comprarles comida para llenar el refrigerador. Estas pequeñas cosas permanecerán en su memoria durante mucho tiempo.

Tomar dinero en grandes cantidades de un padre ya envejecido se conoce como abuso financiero de ancianos. Cualquier abuso es dañino.

5. Ignorar a tus padres y los eventos familiares

Sí, es verdad que a veces las relaciones con nuestros padres pueden resultar difíciles, pero ignorarlos no siempre es la solución, especialmente cuando se trata de la familia. A veces es mejor gritar o pelear y no borrar completamente a un padre de tu vida. Evitarlos es solo una solución temporal.

6. Nunca ser agradecido o mostrar aprecio

Se considera un pecado cuando nos sobrevaloramos a nosotros mismos, pero también lo es cuando subestimamos a los demás, en esto están incluidos nuestros padres. Intenta proporcionarles palabras de amabilidad.

7. Ocultar información acerca de tus asuntos

Somos los “hijos de nuestros padres”, ¡por supuesto que se preocupan por nosotros! Decir cosas como “mamá, no es asunto tuyo” difícilmente puede hacerla sentir más tranquila sobre lo que está sucediendo en tu vida. Comparte algo con tus padres sin entrar en demasiados detalles. Solo encontrar las palabras correctas puede resolver el problema.

8. Molestarnos cuando tenemos que repetir las cosas

A veces tenemos suficiente paciencia para repetir las cosas a extranjeros o a colegas de trabajo, pero no tenemos esa paciencia con nuestros padres ya envejecidos. Pero recuerda, ¡a menudo son muy viejos y sus recuerdos no siempre son tan agudos!

9. No preservar los recuerdos

Los videos, las fotos y otros recuerdos pueden volverse a vivir, juntos pueden volver a recordar esos momentos hermosos que son parte de tu infancia. Si solías jugar cierto juego de mesa, ¡sácalo y juega! Muéstrales a tus padres que sí lo recuerdas.

10. Tratarlos como si fueran niños pequeños

No son niños y tienen más experiencia que tú en la vida. Incluso si son viejos, siguen siendo adultos. No abuses de ellos y no les exijas más de lo que ellos puedan hacer. Concédeles también su independencia.

¿Crees que las personas mayores no reciben la suficiente atención? ¿Te gusta pasar tiempo con tus padres y tus abuelos?