10 Extrañas prohibiciones de Corea del Sur que pueden sorprender a un viajero inexperto

Curiosidades
hace 4 años

Antes de ir a un país desconocido, es necesario familiarizarse con sus características culturales. Especialmente si vas a Asia, donde la sociedad todavía respeta las tradiciones y mantiene una estructura jerárquica. Uno de esos países tradicionales es Corea del Sur. Con peculiaridades que pueden asustar y tabúes raros.

Genial.guru reunió las extrañezas y prohibiciones de Corea del Sur, para que no arruines tu viaje a la Tierra de la calma matutina.

1. No juegues con los palillos

En la cultura coreana hay muchos tabúes asociados con los palillos. Por ejemplo, si perforas la comida con los palillos chinos a la manera de un tenedor europeo, el anfitrión o el cocinero hospitalarios lo considerarán un insulto personal. Los palillos en posición vertical, en especial clavados en el arroz, en Corea se asocian con la muerte. En los funerales, los sahumerios clavados en arena son imprescindibles.

2. No muestres tus tatuajes

En general, en Corea del Sur (como en otros países asiáticos) hay una relación especial con los tatuajes. El trabajo de un tatuador aquí es ilegal, y solo los médicos pueden dedicarse a "pintar el cuerpo". Un tatuaje puede causar que no te den un puesto de trabajo o que te traten con desdén en lugares públicos.

3. No uses un escote profundo

En Corea, un escote profundo se considera demasiado explícito y sexy. Por eso, las coreanas casi nunca usan las camisetas y los vestidos sobre el cuerpo desnudo. Pero todo es diferente con las minifaldas. Las jóvenes las usan mucho y tratan de cubrirse con una cartera o con una revista cuando suben las escaleras.

4. No dejes propina

En Corea del Sur, si dejas propina para el camarero, lo tomará como un insulto. Tienen salarios bastante buenos, y este gesto puede ofender al personal. Pero si vas a un bar estadounidense o europeo, donde el propietario y el personal no son coreanos, es otra cosa. Allí puedes dejar propina tranquilamente y mostrar toda la generosidad de tu alma.

5. No dejes comida en el plato

Los coreanos tratan la comida con mucho respeto. Los recuerdos de la guerra entre Corea del Norte y la del Sur, y de la anexión japonesa, todavía están frescos. Las porciones aquí son grandes, condimentadas y, muchas veces, picantes. Estando de visita en una casa, no se acostumbra a rechazar la comida que se ofrece, y mucho menos dejar un plato sin terminar. En los establecimientos alimenticios hasta pueden decirte algo si dejas comida en el plato.

6. No te quedes mirando a la gente local

Los coreanos lo perciben como una invasión del espacio personal. Tampoco trates de fotografiar a los habitantes de Corea sin pedir permiso primero. Ni siquiera por un tema de incomodidad personal. Pueden multarte o incluso llevarte por un tiempo a la estación de policía por hacer una foto así. Y ve a explicar que la foto no fue tomada con malas intenciones.

7. No entres en conflictos. Especialmente con gente mayor

En Corea está muy desarrollada la jerarquía por edades. Los más jóvenes deben obedecer a los mayores y no ser groseros con ellos. Las señoras mayores (ajumma) tienen un carácter escandaloso, pero no hay que contradecirlas bajo ningún concepto. Aún si están equivocadas y fueron ellas mismos las que iniciaron el conflicto. En general, todos los conflictos en Corea del Sur se resuelven a favor de los residentes locales. Y los estafadores se aprovechan de esto activamente.

8. No te avergüences por los temas referentes al baño

En Corea no hay tabúes con los temas del baño. La gente puede hablar tranquilamente sobre las necesidades grandes y pequeñas, y la joven puede decirle a su novio que ha tenido diarrea. Es más, los temas referentes al baño pueden ser discutidas durante una cena o en compañía de amigos. Pueden preguntarte tranquilamente si todo está bien con tu tránsito. En Corea, hay una red de baños públicos limpios y gratuitos. Y en Seúl construyeron un parque dedicado a la cultura del baño. Como dicen, lo que es natural, no puede ser desagradable.

9. No toques a las personas dormidas en las calles

En Corea hay una actitud especial hacia el alcohol. Los coreanos trabajan mucho y también beben mucho alcohol. Por supuesto que no todos los días, sino al finalizar la semana laboral. Generalmente se bebe en compañía de todo el colectivo de trabajo. No se acostumbra a rechazar la invitación a beber del jefe (recuerda el punto acerca de la jerarquía), y tampoco hay necesidad de hacerlo. En esas salidas corporativas puedes obtener una ascenso, un proyecto rentable o un aumento del salario. Después de este tipo de eventos, hay hombres y mujeres bien vestidos y borrachos durmiendo en las calles y en el metro de Seúl. No hay que tocarlos, mucho menos tratar de levantarlos y llevarlos a su casa. No te preocupes, no les robarán. Los agentes de policía se encargarán de llevar a los empleados borrachos a su casa.

10. No fumes en cualquier lado

En Corea se puede fumar. Pero no en todas partes. Hay lugares estrictamente designados donde el humo del cigarrillo no le molestará a nadie. Puede ser una habitación para fumadores especial o un simple rectángulo dibujado en el asfalto, con una inscripción que dice que allí se puede fumar. Hay muchos lugares para fumar en Corea, especialmente en lugares concurridos. Pero si aún así decides encender un cigarrillo en el lugar equivocado, prepárate para pagar una multa.

¿Qué prohibición te pareció la más extraña? ¿Y cuál te sorprendió? Comparte tu opinión en los comentarios.

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