10+ Lectoras de Genial hablaron sobre anuncios de embarazo tan asombrosos que podrían ser parte de un guion de película
Los embarazos pueden ser buscados o inesperados, pero, generalmente, la forma en que una mujer se entera de que está esperando un bebé no pasa de una banal prueba de embarazo. Sin embargo, a veces la vida parece tener un buen sentido del humor y nos da sorpresas que pueden dejarnos verdaderamente con la boca abierta.
Mujeres que descubren su embarazo cuando ya está muy avanzado, y pensando que no eran más que gases, niños pequeños que se dan cuenta de la presencia de un bebé en la barriga antes que la propia madre y hasta sueños proféticos. Las lectoras de Genial.guru nos contaron sus experiencias más asombrosas y ahora las compartimos contigo.
- Siete años sin cuidarme, pensando que nunca llegaría un bebé, cuando comencé con náuseas por los olores y mi mamá dijo: “Estás embarazada”. Me hice un test para mostrarle que no... y salió positivo. Estaba de 10 semanas aproximadamente. Ahora, con 6 meses de embarazo, estoy esperando que llegue mi esposo con algo que tenga pasas de uva a las 6 de la mañana, sintiendo las pataditas de Lío. © Rocio Maldonado / Facebook
- El segundo embarazo es algo que hasta la fecha no logro entender; yo tomaba pastillas y él se ponía protección, me enteré a los 6 meses. Decía que sería niño y lo fue, y en el 2020 mi hija me dijo que iba a ser mamá y desde ese momento le dije que era niño y no me equivoqué, ahí anda Emiliano, mi tesoro más grande del mundo. © Anayanzi LaGa / Facebook
- Fui al doctor porque me dolía mucho la panza por gases (según yo), me hicieron hacer una prueba de embarazo, terminé haciéndome dos porque la primera salió positiva y entré en un ataque de pánico (mi hijo más grande ya tenía 17 años y yo me acababa de separar). Dos días después supe que estaba embarazada de siete meses y medio y que sería nena. Casi dos años después, aquí estoy, con mi dolor de panza, a la que amo con todo mi corazón. © Lili Romano / Facebook
- Con mi primera hija llevaba meses buscando quedar embarazada, con varios test negativos, y un día llegué a casa de mi mamá y le dije: “Estoy embarazada”. Mi madre, feliz, preguntó: “¿De cuánto?”. Mi respuesta fue: “De anoche”, ella se rio y me dijo que no la ilusionara, pero, efectivamente, un test confirmó mi teoría... Con el segundo fue más normal, atraso, test, positivo, y con el tercero: yo siempre quise 3, pero por problemas de salud, mi familia no estaba muy convencida, y ya teníamos a la parejita, sumado a mi edad y a que los niños ya estaban crecidos (el menor tenía 9), me iba a ligar las trompas, saqué turno, primero tenía que hacerme una ecografía y me dieron fecha para cuando debía estar menstruando. Llegó el día del turno y me di cuenta de que no me había venido el período. Antes de ir a hacer la ecografía, compré e hice el test y sí, positivo, la vida me sorprendió con la alegría del tercero. © Valeria Carolina Rach / Facebook
- Estaba de vacaciones en Ushuaia, Argentina, y el hijo del dueño del hotel me dijo al verme pasar: “Ahí tienes un bebé”, señalando mi barriga. A los pocos días me hice la prueba, que dio positivo. Y lo mejor fue al volver a casa: cuando estaba en el aeropuerto, me llamó mi hermana y me dijo: “Ay, Chol, soñé que estabas embarazada y que era una nena” (yo no le había contado nada a nadie, quería ver al doctor antes de confirmar la noticia). Me moría por contarle que sí... Pero ella ya lo sabía. Tuve una hermosa nena. © Noelia Anabela / Facebook
- Recuerdo que me estaba peinando y maquillando para ir a almorzar con mi esposo el día de mi cumpleaños; de pronto me vi radiante en el espejo y me dije: “¿No estaré embarazada?”. Una semana más tarde, mi test dio positivo. © Veronica Teme / Facebook
- Tenía que dar un examen que venía dejando para después desde hacía 14 años. Me decidí, estudié y fui a darlo. En el camino al instituto tuve muchas náuseas, llegué y vomité, di el examen y al salir vomité de nuevo. Mientras esperaba la calificación, vomité. Cuando me iba, tuve que volver al baño... Yo pensaba que eran los nervios del examen, y luego porque al fin lo había logrado... No tenía atraso, pero al día siguiente seguí con náuseas y dije: “¡¡Estoy embarazada!!”. Me hice una prueba y fueron los dos minutos más largos de mi vida, ya que hacía siete años que buscaba tener un hijo. Cuando dimos vuelta la prueba y había dos rayitas, nos abrazamos y lloramos con mi esposo. Fuimos por un ultrasonido y estaba de cinco semanas, se veía un embrión, pero no se escuchaban los latidos, me lo repitieron a las 9 semanas y el doctor dijo: “Bueno, ¡¡estos dos niños están muy saludables!!”. Nos miramos con mi esposo y le preguntamos: “¿Cómo que dos?”. “Sí, esperan gemelos, ¿no lo sabían?”. © Andy Step / Facebook
- Cuando estaba en el kínder, les decía a la maestra y a los otros niños que la maestra estaba embarazada, y eso la molestó tanto que le pidió a mi mamá que yo dejara de decir eso o que incluso no fuera a clases. Pues estaba embarazada, y cuando tuvo a su bebé, fue a mi hogar a disculparse y a que conociera a su hija. © Lucero Carranza / Facebook
- Me enteré de mi primer embarazo entrando al sexto mes, cuando me hicieron las pruebas para ingresar a la Marina, ese era mi plan. Me hicieron los análisis y salió positivo. Me hice una ecografía porque no lo podía creer y ahí estaba el niño, salió en la eco saludando. © Mary Lu Chm / Facebook
- Yo soñé que mi amiga estaba embarazada y ella recién había vuelto de un viaje. Cuando nos vimos, le conté mi sueño y se hizo la prueba: estaba de cuatro semanitas. © Isabella Armenta Olivo / Facebook
- Cuando me separé, a los cuatro meses empecé a vomitar y a tener dolores en la boca del estómago. Tomé medicamentos, pastillas para la úlcera, me hice todo tipo de tratamientos. Por último, me mandaron a hacer una ecografía. Cuando el doctor me vio y le dije lo que me pasaba, se empezó a reír y me preguntó si tenía hijos. Le dije que sí, dos varones. Entonces me dijo: “¿Y la nena?”. Le dije que no, que estaba separada y me respondió: “Tu molestia se debe a que estás embarazada de casi 5 meses, y es una niña”. Me quedé sin palabras, no sabía ni qué decir, y me dijo: “¿Qué pasa? Si no la quieres, te pago los gastos y me la regalas”. Me reí y le dije que no, si era lo que más había deseado, solo que no había esperado esa noticia tan de pronto. Todo me dio un giro total, y ese día fue de mucha felicidad para todos. Hasta el día de hoy estoy feliz con mi esposo, pues regresó a casa. © Karitto Gordillo / Facebook
¿Fuiste testigo o protagonista de un anuncio de embarazo fuera de lo común? ¿Cómo supiste que estabas embarazada?