10 Reglas útiles que muchas mujeres francesas respetan con mucho cuidado

Mujer
hace 3 años

Las mujeres francesas no solo son famosas por su estilo sofisticado y su encanto, sino también por sus hábitos especiales en la belleza y el hogar. Parece que tratan de hacer con gracia y consideración cualquier actividad a la que se dedican. Y cuanto más uno estudia sus tradiciones y hábitos, más se convence de lo mencionado.

En Genial.guru nos gustó el enfoque verdaderamente femenino, armonioso y romántico de la vida de las mujeres francesas. Por eso decidimos hablar sobre algunas de sus técnicas y reglas clásicas que son bastante fáciles de aplicar en la práctica. Para que todos, si lo desean, puedan dejar entrar un poco de brillo francés en sus vidas.

1. Usan aerosoles minerales para el rostro

El enfoque clásico del cuidado de la piel en Francia es la buena hidratación. Esto es lo que permite utilizar un mínimo de maquillaje y lucir bien. De esta manera, además de la crema hidratante, que ya comienza a usarse entre los 12 y 13 años, muchas mujeres francesas tienen un spray facial mineral en el baño. Refresca instantáneamente la piel, la protege de las impurezas y ayuda a mantener un brillo saludable durante todo el día.

2. No reconocen el push up

En el guardarropa de muchas mujeres francesas, rara vez se pueden encontrar brasieres voluminosos, familiares para la mayoría de las mujeres, y mucho menos modelos tipo push up. Como ya se mencionó, la belleza es realmente importante para ellas, pero la comodidad y la naturalidad de las formas no son menos relevantes. Los modelos body ajustados, los bralettes y las blusas finas de encaje son artículos de vestuario que no solo permiten que las mujeres francesas se sientan espectaculares, sino que también a menudo se convierten en elementos importantes para crear una imagen.

3. Toman un tentempié antes de cocinar

Oh, esa sensación cuando, al volver a casa después de un duro día de trabajo, el hambre es tan fuerte que ya no depende de la estética y es demasiado difícil contenerse dentro de una ración normal. Pero las mujeres francesas tienen un buen hábito que las ayuda a aliviar el estrés y a calmar el hambre. Practican tomar un tentempié: cuando llegan a casa, primero disfrutan de anacardos, aceitunas o hummus, y solo entonces, sin estrés indebido, retoman la preparación de la cena.

4. Toman solo café negro

Muchas mujeres francesas prefieren el café negro, sin leche ni azúcar. A menudo, esta no se considera la opción más deliciosa, pero están seguras de que el punto está en la preparación incorrecta. Para saborear realmente esta bebida, es importante comprar inicialmente café de buena calidad (preferiblemente recién molido) y prepararlo con una prensa francesa. Entonces, el aroma y el sabor serán tan agradables que la necesidad de azúcar desaparecerá por sí sola.

5. Se lavan el rostro estrictamente con agua micelar

El agua micelar es un producto muy popular en Francia, y los estantes de esta se vacían rápidamente. Y no es sorprendente, ya que el agua corriente del grifo es bastante dura, por lo que seca mucho la piel y la hace propensa a la descamación. Para evitar este efecto negativo, es importante hidratarla y nutrirla, que, de hecho, es lo que hace el agua micelar. No solo elimina suavemente el maquillaje, sino que también succiona la suciedad de los poros obstruidos.

6. Convierten la comida en un ritual

Como ya fue mencionado, muchas mujeres francesas no tienen prisa por arrojarse comida como combustible. En Francia, comer es un verdadero ritual, y el tiempo destinado a ello es sagrado. Por lo tanto, las mujeres francesas abordan este tema a fondo: no se preocupan, solo comen sentadas y sobre una mesa; incluso si la comida fue ordenada, no usan vajilla desechable, no se distraen con la televisión y la lectura. Cocinan con amor y disfrutan de cada bocado con un placer consciente. Esto les permite no solo no comer en exceso, sino también descansar realmente durante la comida.

7. Se aplican inyecciones de belleza sin fanatismo (y no hablan al respecto)

Muchas mujeres francesas abordan el envejecimiento de manera un poco diferente a nosotros. En primer lugar, se centran en el cuidado: intentan predecir los signos del envejecimiento y ralentizan este proceso. Y cuando, sin embargo, las arrugas se vuelven bastante notorias, por supuesto, recurren a los servicios de cosmetólogos. Pero sin exagerar, tratando de preservar la belleza natural y la individualidad. El mito de que las mujeres francesas no le temen a la edad se sustenta en una regla simple: en Francia, es costumbre mantener en secreto los procedimientos estéticos que se realizan.

8. No desprecian el masaje facial

Probablemente todo el mundo ya sabe de los beneficios del masaje facial. Se dice que con el enfoque y la consistencia correctos, este agradable procedimiento ayuda a relajar los músculos y a tensar la piel, eliminar el edema y reducir los signos del envejecimiento. Resulta que las mujeres francesas lo saben de primera mano y practican un masaje diario o al menos semanal para aliviar los signos del estrés y suavizar la piel.

9. No ahorran en la ropa interior de lujo

A pesar de que la ropa interior está oculta debajo de las demás prendas, esta no es una razón para subestimar su importancia e influencia en el estado de ánimo propio. Muchas mujeres francesas tienen una actitud delicada con este artículo de vestuario, como lo demuestra la gran cantidad de tiendas de lencería en cualquier vecindario. Todas las mujeres han notado al menos una vez cuánto aumenta el nivel de endorfinas al pensar en un hermoso encaje. Así que es mejor no negarse el placer de usarlo todos los días.

10. Utilizan el champú seco para otros fines

Muchas mujeres francesas son conocidas por no luchar por una imagen perfectamente calibrada. El maquillaje mínimo, el ligero descuido y el cabello despeinado ya se han convertido en un indicador del estilo francés. Pero resulta que uno de los trucos que utilizan en el cuidado del cabello es el uso atípico del champú seco.

Aunque su propósito es absorber el exceso de sebo, las mujeres francesas lo han adaptado para hacer peinados y dar volumen. Para ello, aplican el champú seco en las raíces, levantan el cabello, lo juntan en un moño y dejan actuar durante 10 minutos. Luego se puede soltar el pelo, secarlo ligeramente con un secador y peinarlo. Y eso es todo, el estilo volumétrico está listo.

¿También sigues algunas de estas reglas? Comparte tus impresiones.

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