11 Historias sobre cómo personas se encontraron inesperadamente en situaciones incómodas

Historias
hace 5 horas

Normalmente, cuando te encuentras en una situación que te hace sonrojar de talón a oreja, sólo quieres salir corriendo o caerte por los suelos. Pero entonces puede convertirse en una historia que puedes recordar con una sonrisa y compartir con los demás.

  • Estaba en el vestíbulo de una casa de huéspedes en Tailandia esperando mi coche. Me acompañaba una tailandesa guapa y menuda. Cuando estaba a punto de salir, de repente me tendió los brazos. “Quiere un abrazo”, pensé, y me acerqué a ella. Y justo en ese momento me di cuenta de que me estaba haciendo un gesto para que tirara de la cuerda del ventilador del techo para encenderlo porque ella no lo alcanzaba y yo era alto. Me sentí muy incómodo. © Unknown athor / Reddit
  • Esta historia sucedió hace unos dos años. Mi mamá me mandó a la tienda por leche, una hogaza de pan y una baguette. Volvía andando, la música sonaba a todo volumen en mis auriculares y yo movía un poco mi bolsa de la compra al compás de ella. En algún momento oí un ruido como de algo que se caía. Pensé que se me había caído algo. Me di la vuelta, pero como no había nada en el camino, seguí andando. Cuando llegué a casa y le di la bolsa a mi madre, me preguntó sorprendida: “¿Y dónde está la baguette?”. Al principio me asusté pensando que me la había olvidado en la tienda, pero enseguida me di cuenta. La bolsa tenía un agujero enorme. Corrí rápidamente hacia donde había oído que se escabullía mi baguette. Cuando estaba bastante cerca, aminoré la marcha, fingiendo que simplemente paseaba, ya que me daba un poco de vergüenza. Localicé la que me faltaba en un macizo de flores junto a una de las casas. En ese momento sale del edificio un chico de unos 16 años. Tendrían que haberle visto la cara cuando vio cómo, al pasar junto al macizo de flores, la chica con aire despreocupado sacaba una baguette de allí y, fingiendo cuidadosamente que no pasaba nada, se alejaba. Pero la baguette fue rescatada de la trampa de flores. © Ward 6 | Historias anónimas / Telegram
  • Estoy sentado en un banco del patio, esperando a mi compañero. Me fijo en una mujer joven que camina con un bebé en un cochecito. Se le acerca una abuelita, al parecer amiga suya, y le dice: “¡Qué lindo! Se parece a tu esposo. Igual que Alejandro”. La mujer pregunta sorprendida: “Natalia, ¿de verdad lo crees? De hecho, es el hijo de nuestra vecina del tercer piso”. Fue una situación incómoda. © No todo el mundo lo entenderá / VK
  • Una vez estábamos de vacaciones con unos amigos en un camping. Por la noche, después de ir al baño, volví a la hoguera, saqué una bebida de la nevera del campamento y de repente me di cuenta de que había un silencio sospechoso. Resultó que me había perdido un poco en el camping y me había confundido de campamento, así que no había llegado a casa de mis amigos, sino a la reunión de una familia con dos niños, que vieron horrorizados cómo un hombre extraño se acercaba, se metía en su nevera y se sentaba a su hoguera como si nada. © rheabs / Reddit
  • Cuando tenía 14 años, se organizó una asamblea general en el colegio. Acudieron unos 500 alumnos. Elegí un asiento cerca del pasillo. Cuando todos se pusieron en pie para saludar al director, un bromista detrás de mí tomó mi silla y la pasó por la fila, acabando al final de la sala. Me di cuenta, pero no sabía qué hacer, así que decidí fingir que tenía una silla y sentarme con todos los demás. Solo pude sentarme en esa incómoda posición durante cinco minutos, luego me tambaleé hacia atrás y el director gritó: “¿Dónde está tu silla?”. Me daba miedo decir una palabra, así que me limité a señalar el final del pasillo. Fue la caminata más larga de mi vida para conseguir una silla. © stevierar / Reddit
  • Sobre situaciones incómodas: una vez un chico que me gustaba me trajo un café con azúcar. Me miró durante un buen rato, como preguntándome: “Bueno, ¿y por qué no te lo bebes? Lo he hecho por ti”. Estarás pensando: “¿Qué tiene de incómodo que un chico que te gusta muestre signos de atención?”. Pero, por desgracia, soy alérgica al azúcar y al café. © Ward 6 | Stories Anonymous / Telegram
  • En mi segundo año de estudios, una vez me vi envuelto en una situación increíblemente divertida. Entonces me encantaba ligar con chicas, tenía que tratar con muchas de mis compañeras de clase, y a menudo me olvidaba de muchas de ellas. Entonces por la mañana suena el teléfono, descuelgo, no entiendo nada, solo oigo la pregunta: “Miguel, ¿me has reconocido?”. Enseguida respondí: “Sí, querida, claro que te he reconocido. Tu voz siempre ha sido miel para mis oídos”. De repente me dice: “Mmm, ¡hablaremos en la universidad!”. Resulta que era mi profesora y quería que le entregara por fin todos mis trabajos. © No todo el mundo lo entenderá / VK
  • Trabajé un turno entero con un colega, llamémoslo Mike. Al día siguiente mi supervisor estaba hablando de Mike y yo, por alguna razón que desconozco, le pregunté: “¿Cómo está Mike? Hace tiempo que no lo veo”. Mi supervisor me miró con desconcierto, recelo e incluso un poco de preocupación y me dijo: “Ayer trabajaste ocho horas con él”. A día de hoy no tengo ni idea de qué me hizo decir eso. © Fluid-Bet6223 / Reddit
  • Un día volvía a casa de mis padres en autobús. Vivo en otra ciudad y el trayecto dura 6 horas. Durante la parada, fui al baño y descubrí que me había venido la regla. No estaba en absoluto preparada para ello, pero cerca del aseo vi a una señora de la limpieza y le expliqué la situación. Me dio algunos productos de higiene personal y sus pantalones. Me salvó de la situación más embarazosa de mi vida. © Caramel / VK
  • Siempre me siento muy incómoda cuando no tengo suficiente dinero en la tarjeta u olvido la cartera en casa. Intento evitar esas situaciones, lo compruebo todo cien veces, pero es como si me encontraran solas. Anteayer ya había metido todo en bolsas en la tienda y de repente me di cuenta de que me había equivocado de tarjeta. Me puse muy triste y quise devolverlo todo, pero un hombre desconocido de repente pagó por mí. Así, sin más. Sin ninguna insinuación ni persuasión, se limitó a pagar las compras de una mujer desconocida en una situación desagradable. Ojalá hubiera más gente buena así. Le pedí el número de su tarjeta y le transferí el importe íntegro. © Mamdarinka / VK
  • Me meto en situaciones embarazosas muy a menudo: se me cae algo en un charco, me siento sobre algo sucio o derramo mi bebida. Pero la más embarazosa ha sido hoy. Estoy de pie en el metro entre una multitud de gente. Y entonces, durante un bostezo, se me cae la saliva de la boca y cae sobre el teléfono de un hombre sentado. No podía bajarme, porque llegaría tarde al trabajo, y nos multan por eso, y no podía ir a otra parte del vagón, ya que era hora punta. Así que seguimos así. © Podsushano / VK

La mayoría de las historias ridículas con personas ocurren en la infancia y aquí hay 15+ Historias que demuestran que la escuela es mucho más que clases y deberes.

Imagen de portada Unknown athor / Reddit

Comentarios

Recibir notificaciones
Aún no hay comentarios. ¡Puedes ser el primero!

Lecturas relacionadas