11 Normas de etiqueta que dejaron de usarse (para desagrado de las abuelitas)
“¡Qué malos modales!”, todos escuchamos alguna vez esta frase seguida de un “Esto es lo que debe hacerse y así debes comportarte”. Sin embargo, a lo largo del tiempo, muchas de las costumbres consideradas adecuadas han quedado atrás, ya sea porque esos comportamientos dejaron de ser relevantes en la sociedad o porque simplemente ya no se les da importancia.
En Genial.guru te hablaremos sobre 11 modales actualmente obsoletos que contenía el Manual de Carreño, libro escrito en 1853 por el venezolano Manuel Carreño, el cual durante décadas fue parte de la educación familiar e incluso una materia escolar para los hispanohablantes.
1. Solo podías saludar si se aceptaba con la mirada
El manual estipulaba que, cuando se transitaba por la calle y un hombre pretendía saludar a una mujer, esta debía aceptarle el gesto con la mirada, ya que, si no había contacto visual, no podía dirigirle el saludo. Esto aplicaba aunque fueran personas cercanas.
2. Se debía caminar lento y suave
El manual indicaba que las personas siempre debían llevar un paso ligero, suave y lento, de acuerdo con su edad y sus circunstancias, ya que caminar de forma acelerada se consideraba inapropiado y un signo de mala educación. Esto iba de la mano con las pisadas, ya que pisar fuerte y hacer ruido tampoco era considerado adecuado.
3. Y solo podía haber dos personas en la banqueta
El manual también señalaba que, al transitar por la calle, únicamente podía haber dos personas de forma paralela. Un grupo de más miembros debía dividirse para no invadir la banqueta por completo, ya que esto se consideraba de mala educación.
4. Ningún objeto debía ir en la boca
El manual también detallaba que tocarse la boca con los dedos para facilitar dar vueltas a las hojas de un libro, periódico, separar papeles o distribuir cartas, era contrario al aseo y a la buena educación. Tocar la cavidad directamente con ellos estaba incluso menos permitido.
5. Y las manos tampoco debían tocar la cara
Como regla general, el manual aseguraba que tocarse los ojos, la nariz, la boca, la cabeza, la ropa o rascarse se consideraba una falta de respeto y un acto incivil. La recomendación al llorar o reír era limpiarse con un pañuelo las lágrimas, pero nunca tocarse con los dedos.
6. Se acostumbraba a usar pañuelos de tela
Otra regla que indicaba el manual era el uso de pañuelos de tela para sonarse o limpiarse. De hecho, solía ser una costumbre que tanto hombres como mujeres llevaran un pañuelo (o dos) de tela siempre consigo.
El manual añadía que no se debía mirar nunca un pañuelo recién usado delante de más personas, ya que eso era considerado una falta de educación.
7. El orden en casa se relacionaba con la confianza
Se consideraba de buena educación el tener una casa prolija y ordenada, ya que el manual argumentaba que una persona que no tenía en orden su vivienda no era fiable para que los demás le confiaran alguna posesión, debido a que la percepción era que podía perderla.
8. Roncar se consideraba una falta de educación
El roncar era considerado un sonido antinatural y un producto de la mala educación de una persona, así que el manual sostenía que debía corregirse.
En la actualidad sabemos que sí es un sonido natural ocasionado por múltiples factores, como alergias, resfríos e incluso la anatomía de la boca.
9. Se debía portar corbata hasta en la casa
Contrario a lo que hoy en día es considerado el lugar más cómodo en el que se puede estar y vestir, el manual afirmaba que era de mala educación que un hombre estuviera en su hogar (fuera de su habitación) sin corbata, calcetines y zapatos.
10. Levantarse del asiento para saludar y despedirse
Se consideraba de buena educación que, en una reunión, si alguien llegaba, la persona se pusiera de pie para recibirlo, y lo mismo para despedirse. El acto, detallaba el manual, aplicaba a los hombres y a las mujeres solo cuando la visita también era una figura femenina.
11. Las visitas se iban temprano
En el manual también se detallaba el comportamiento que debía tenerse al visitar un hogar, enfatizando que no se podía extender el tiempo de visita, a menos que el anfitrión lo solicitara. La norma era quedarse muy poco tiempo extra y, en caso de que se volviera a solicitar, la regla señalaba que no se debía aceptar.
¿Cuáles modales consideras que no deberían haber desaparecido? ¿Recuerdas alguno que te hayan enseñado y que hoy en día ya no se use?