12 Nudos extremadamente útiles que puedes aprender en 5 minutos

Sin “nuda”, estos “dudos” te vendrán muy bien. ¿Entiendes? ¿Acaso te dejé... “anudanado”? Bien, ya me calmé... Reanudo. [énfasis en el “nudo” de “reanudo”] Jaja, no puedo evitarlo... Comencemos con un lazo de vaquero, por supuesto. Pon una cuerda delante de ti y haz un nudo simple en forma de “o”. El nudo debe estar a unos 30 cm del extremo de la cuerda. No lo aprietes demasiado, tienes que poder ajustarlo más tarde. Si no quieres que el lazo se ajuste del todo, haz un nudo de tope. Para ello, simplemente haz un bucle con el extremo libre del lazo. Ahora, toma el extremo cercano de la cuerda y mételo en la letra “o”. El nuevo bucle es la base de tu lazo. El extremo de la cuerda debe sobresalir unos centímetros del lazo.

Ahora, aprieta el bucle en forma de “o”. Este nudo se conoce como “honda”. Último paso. Puedes ajustar el ancho del lazo tirando del extremo libre de la cuerda. El extremo suelto intentará pasar por el nudo honda cuando lo aprietes, pero el nuevo nudo evitará que esto suceda. Ahora, probemos tu lazo. Empieza a girarlo sobre tu cabeza y lánzalo hacia delante. Tira de él, y el nudo se ajustará solo. ¡Lo lograste! Ya puedes ir a pastorear tu ganado.

Y este es el nudo más fácil que usarás siempre: el medio enganche. Con él puedes atar cualquier cosa a un objeto fijo. Pasa la cuerda alrededor del objeto y cruza sus extremos. Deberías obtener un bucle redondo. Pasa un extremo de la cuerda por el bucle y aprieta el nudo. ¡Tu medio enganche está listo! El nudo cuadrado. Para hacerlo, toma dos extremos de la cuerda y crúzalos. A continuación, haz bucles y pásalos uno por el otro. ¡Ya está! Puedes utilizarlo, por ejemplo, para atar bolsas. Los antiguos egipcios utilizaban este nudo, es sencillo y eficaz. Cuanto más tires de los extremos de la cuerda, más fuerte se hará. También es uno de los nudos favoritos de los marineros. Cuando las cuerdas se mojan, se vuelve aún más firme. Y es fácil de desatar: solo tienes que tirar de los dos bucles del centro. ¿Lo ves? ¡Listo!

As de guía. Haz un bucle, lleva un extremo de la cuerda a través de él. Después, haz un círculo sobre el lazo y vuelve a pasar el extremo de la cuerda a través del lazo. Listo. Este nudo es útil en casos de emergencia, como cuando debes lanzar una cuerda a alguien en problemas. Tiene un bucle práctico al que la persona puede agarrarse. También puedes ponerlo en la barra de remolque de tu auto y ayudar a otro vehículo que necesite, qué más, ser remolcado. O puedes usarlo para atar tu barco a un muelle. Este es el nudo de puño de mono. Puedes hacerlo con una agujeta de zapato normal. Quedará precioso como llavero o como juguete en el espejo retrovisor de tu auto, si las leyes de tu país lo permiten.

Toma la agujeta de tu zapato, estírala a lo largo de la palma de la mano y sobre el pulgar. Ahora, sujétala con el dedo meñique. Haz unas cuantas vueltas alrededor del pulgar y el meñique. El número depende del tamaño del puño de mono que quieras hacer. Cuanto más grande sea, más espirales. Nosotros haremos cinco. Ahora, haz el mismo número de vueltas horizontalmente alrededor de las agujetas verticales. Tendrás un pequeño nido encima del dedo meñique. Tienes que colocar una pelota de cualquier tamaño para darle forma a este nudo. Ahora, pasa el extremo libre de la cuerda por debajo del ovillo y vuelve a dar 5 vueltas, envolviendo completamente el ovillo dentro del nudo.

El último paso es apretar el nudo. Suelta el pulgar y aprieta cada cuerda por separado. A continuación, suelta el meñique y haz lo mismo. Tómate tu tiempo; es mejor apretar los nudos gradualmente para poder volver atrás en cualquier momento. Cuando hayas apretado la última tanda de nudos, tu puño de mono estará listo. Puedes atarlo donde quieras.

Nudo tensor. Puedes utilizarlo para atar un anzuelo a un sedal. También puede ser útil para remolcar un auto o para atar una hamaca a un árbol. Primero, pasemos un extremo alrededor del objeto fijo. Luego, hacemos un bucle normal alrededor del punto de encuentro. Sigue pasando el extremo por encima del bucle. Después, vuelve a pasarlo alrededor de la parte opuesta. A continuación, pásalo por el bucle formado en el primer paso. Esta segunda vuelta debe estar metida entre la primera vuelta y la parte de la línea en el interior del bucle; eso es lo que da una seguridad adicional. Completa el nudo con un medio nudo fuera del bucle, hecho en la misma dirección que las dos primeras vueltas. Último paso. Ajusta el nudo para acercarlo al objeto fijo a lo largo del extremo opuesto. ¡Listo! Ahora, ten cuidado. Aplica presión a este nudo lentamente. Ajústalo y apriétalo si es necesario.

Un nudo de corbata también es un nudo, ¿cierto? Bien, ponla alrededor de tu cuello. El extremo ancho debe estar justo debajo del estrecho. Ahora, toma el extremo ancho y haz dos círculos alrededor del estrecho. Aprieta un poco ese bucle, creando así la “cara” del nudo de la corbata. Pasa el extremo ancho de la corbata por el lazo principal cerca de tu cuello. Último paso. Pasa el extremo ancho de la corbata por el nudo, justo debajo de la “cara” de la corbata. ¡Listo! Ahora puedes ajustar la corbata y apretarla manipulando el nudo y el extremo corto de la corbata.

Y aquí hay otro nudo decorativo: el nudo de serpiente. Puedes utilizarlo para hacer unas pulseras muy bonitas. Necesitarás dos cordones de diferentes colores. Colócalos en paralelo, uno encima del otro. Toma el de abajo, haz un bucle alrededor del cordón de arriba y lleva el extremo hacia abajo. Ahora toma el cordón superior. Llévalo hacia abajo y pásalo por el bucle del primer cordón. Solo falta apretar los cordones entre sí. Será mejor que lo hagas gradualmente para que puedas mantener el nudo estable. Haz estos nudos de a uno por vez y apriétalos para conseguir esta “serpiente” con los dos cordones. El número de nudos depende del tamaño de la pulsera que quieras.

Y ahora, un regalo extra. ¿Quieres saber cómo atar tus zapatos deportivos de una forma genial e inusual? Utiliza el “lazo de regalo”. Funciona para el calzado con seis agujeros. Pasa las agujetas por los dos agujeros superiores para obtener extremos iguales. Toma un extremo y mételo en el agujero inferior de la parte exterior del zapato, dejando un gran lazo. A continuación, vuelve a introducir el extremo de la agujeta en el orificio superior, moviéndolo desde el interior del zapato. Mete la agujeta en el segundo agujero desde arriba, dejando un bucle ligeramente más pequeño que el anterior. Pasa la agujeta por el agujero de abajo y haz otro bucle más pequeño. Tira del extremo desde el interior del zapato y pásalo por el bucle más pequeño. Ya está. Haz lo mismo con la otra mitad de la agujeta del otro lado. Cuando hayas terminado, cruza los extremos sueltos de las agujetas y haz un nudo normal. Cuantos más bucles dejes, más grande será el “lazo de regalo”.

Ahora, pasa la agujeta por los dos agujeros inferiores del calzado. Toma un extremo y pásalo por todos los agujeros de un lado, haciendo una espiral como esta. Debes dejar pequeños bucles después de cada agujero. El segundo paso es tomar el segundo extremo del cordón. Tienes que hacer lo mismo, solo que ahora debes pasar la agujeta por los nuevos bucles antes de pasarla por el agujero. Paso a paso, llega a la parte superior del zapato y haz un nudo normal. Otro más. Vuelve a pasar la agujeta por los agujeros superiores del calzado. Toma un extremo y vuelve a meterlo por el mismo agujero, colocándolo dentro del zapato. Asegúrate de dejar un pequeño bucle en el exterior.

Pasa la agujeta del zapato por el siguiente agujero y vuelve a meterla, dejando otra vez un bucle. Haz lo mismo con todos los agujeros del zapato. A continuación, repite esta operación en el otro lado. Deberías terminar con dos extremos sueltos de la agujeta en la parte inferior del zapato. Cruza los extremos y empieza a ajustarlos, pasándolos a través de cada lazo hasta la parte superior. Ajusta los bucles de la misma manera. Cuando llegues a la parte superior, haz un nudo normal. Esta es otra versión del estilo anterior. Una vez más, haz bucles cerca de cada agujero del zapato en cada lado, pero deja dos agujeros vacíos en la parte superior. Los extremos sueltos de la agujeta deben estar en la parte inferior. Ahora, toma el extremo izquierdo de la agujeta y deslízalo por todos los bucles de la derecha. Desliza el extremo derecho de la agujeta por todos los agujeros de la izquierda. Ajusta las agujetas para hacer una figura en forma de “o”. Asegúralas como siempre, a través de los dos agujeros sueltos de la parte superior, y haz un nudo normal. ¡Listo! Vaya, este mudo me dejó nudo. Jaja.