Odio planchar, solo lo hago si es estrictamente necesario
12 Razones para limpiar con menos frecuencia (Y esto solo aportará beneficios)
Según las estadísticas, el 94 % de las personas en el mundo creen que es muy importante mantener el hogar limpio. Se dedican varias horas a la limpieza semanal. Por regla general, la mayor parte de las tareas domésticas suele recaer en las mujeres. Resulta que algunos de estos quehaceres aburridos y monótonos pueden ser suprimidos con facilidad.
Genial.guru recurrió a investigaciones científicas y se apresura a traer buenas noticias a todos aquellos que están cansados de las tareas domésticas: se recomienda eliminar algunos puntos de la lista semanal de deberes del hogar.
Planchar algunas prendas es perjudicial
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Planchar las sábanas es una tarea tediosa. Los científicos afirman que no es necesario perder tiempo y esfuerzo en esto. Las sábanas y las fundas nórdicas planchadas absorben peor la humedad y son menos transpirables. La razón de esto responde a un cambio en la estructura de sus tejidos. El lavado afloja las fibras, pero la presión de la plancha a altas temperaturas las comprime. Como resultado de esto, el individuo duerme peor sobre ropa de cama planchada.
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Los verdaderos adictos al orden también planchan las toallas. Esta actividad en casa también puede ser descartada. Si lo haces para eliminar bacterias, es más fácil lavar a una temperatura más alta. Y no añadas suavizante: después de su aplicación, las toallas absorben peor el agua.
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No cesa nunca el debate sobre si es necesario o no planchar las prendas infantiles a altas temperaturas. Las más obstinadas en esto son las madres primerizas. Aquí, tanto los partidarios como detractores exponen sus propios argumentos. El vapor es realmente capaz de combatir las bacterias, pero el bebé no necesita una esterilidad excesiva. Puedes planchar la ropita y las mantitas mientras el bebé tenga un par de meses, pero para niños mayores no es necesario.
Una limpieza minuciosa puede ser peligrosa para la salud
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Intentando hacer que la casa quede como oro en paño, no solo desperdicias tu energía, sino que también perjudicas la salud de los habitantes de la casa. En primer lugar, están en riesgo los niños. Es necesario cierta cantidad de microorganismos para que se desarrolle el sistema inmunológico. Además, la “alergia” empezó a diagnosticarse en todo el mundo con más frecuencia después de que una gran cantidad de productos químicos de limpieza del hogar llegara a nuestras vidas.
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No siempre vale la pena utilizar el detergente en todos lados. Comprueba si los productos químicos domésticos en tu hogar contienen triclosán. En varios países está sustancia está prohibida: existe riesgo de sufrir trastornos hormonales y alergias.
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Muchas personas suelen considerar el inodoro como el objeto más sucio de toda la casa. En realidad, esto no es así; es suficiente con lavarlo con un producto desinfectante solo una vez por semana. Y el tiempo ahorrado, mejor dedicarlo a limpiar los grifos en la cocina: contienen 44 veces más microbios.
- Si constantemente limpias el departamento y friegas los platos, puedes sufrir una dermatitis de contacto. La irritación de la piel es fruto de una reacción al agua y a las sustancias químicas que contienen los detergentes. Así que, por el bien de tu salud, puedes ser un poco perezoso.
Realiza con menos frecuencia aquello que requiere de un esfuerzo físico serio
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Las posturas incómodas que es necesario adoptar tratando de limpiar lugares de difícil acceso son un factor de riesgo para aquellas personas que ya sufren problemas con la presión sanguínea. Esto es especialmente relevante con las tareas domésticas en las que la sangre sube a la cabeza.
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¿Friegas los suelos a mano y arrastrándote de rodillas? Renuncia a este mal hábito. Puede ocasionarte problemas con las articulaciones. No resulta extraño que, antes, la bursitis, es decir, la inflamación de la bolsa articular, se llamara “la rodilla de criada”.
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Aquellos que tienen problemas con la vista también pueden renunciar a fregar el suelo a mano. Con la miopía, los médicos no recomiendan ejercicios en los que es necesario agacharse. Haciéndolo así, uno puede sufrir consecuencias suficientemente graves que provocan incluso hasta un desprendimiento de retina.
Comparte los deberes
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Si vives con otra persona, siéntete libre de delegar las tareas domésticas. Estudios demuestran que los hombres todavía hacen menos trabajo en casa que las mujeres. Además, la distribución relativamente equitativa de las mismas tiene un efecto positivo en la convivencia familiar. No vale la pena hacerse cargo de más del 60 % de los quehaceres en casa.
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Compaginar una carrera y las tareas domésticas también es perjudicial. Mientras te preocupas por si te da o no tiempo, después de la oficina, hacer la compra, preparar la cena y limpiar la casa, tu presión arterial se incrementa. El cuerpo reacciona al estrés. Así que aleja de ti tales pensamientos desagradables: deja que los juguetes de los niños se queden esparcidos por algunas zonas, así no arruinarás tu estado de ánimo.
Bono: en vez de una limpieza otoñal en tu jardín, simplemente, pasea disfrutando de las hojas caídas
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Si el próximo fin de semana tienes planeado limpiar tu jardín, no dudes en rechazar quitar las hojas caídas. En los últimos años, cada vez con más frecuencia, oímos que dejar el follaje es útil y ecológico. Al pudrirse el mismo, el suelo se vuelve más fértil. Además, durante las heladas, una capa de hojas es capaz de proteger a algunas plantas e insectos beneficiosos.
Ya estamos pensando a qué dedicar nuestro nuevo tiempo libre. Queda por decidir hasta qué edad vale la pena planchar la ropa infantil. Y tú, o tus amigos, ¿cómo lo hicieron?
Comentarios
Pues yo soy muy de limpiezas minuciosas
Compartir las tareas del hogar es básico en cualquier familia
No puedo con las hojas caídas en el jardín, me ponen muy nerviosa
Pues nada a limpiar menos ;)