13 Mitos sobre China en los que por algún motivo todavía crees (nosotros también estábamos equivocados sobre el feng shui)

Asia es uno de los lugares más misteriosos y atractivos del mundo, y por supuesto que China no es una excepción. A pesar de que el mundo moderno es abierto y sus fronteras son borrosas, China vive su propia existencia, que muchas veces es incomprensible para los demás. Por eso abundan los mitos y los estereotipos sobre este país. Pero la mayor parte de ellos son infundados, y es hora de desmentirlos de una vez.

Genial.guru decidió desacreditar los mitos más populares sobre la vida en el Reino del Medio.

1. La población de China crece demasiado rápido, por lo que la gente tiende a irse

Sí, China sigue siendo el país más poblado del mundo, pero el crecimiento de la población hoy en día solo es de 0,39% por año. A modo de comparación, podemos decir que en Noruega, Estados Unidos y Canadá, el crecimiento de la población es aproximadamente 2 veces mayor.

La ley “una familia, un niño” ya no tiene sentido. La mayoría de las familias, antes de tener un hijo, evalúan razonablemente su situación financiera y sus condiciones de vida. Además, la población también está creciendo gracias al aumento de la esperanza de vida.

Aparte, no hay demasiada emigración de China, sino más bien migración a ella. La mayor parte de las personas que dejan el país son gente muy rica que busca una vida tranquila. Los estudiantes que se van a estudiar al extranjero, luego regresan a su tierra natal, ya que con la educación recibida en el extranjero no es un problema encontrar un trabajo con un buen salario.

2. Todos los chinos son delgados

A los chinos les encanta comer. Durante el período de la hambruna en el país, a veces, en lugar de preguntar “¿Cómo estás?”, preguntaban “¿Comiste hoy?”. Hace mucho tiempo que ya no hay hambre allí, pero los hábitos alimentarios se han mantenido.

Entre los chinos se ha desarrollado una actitud especial hacia la segunda comida: el almuerzo. Dura 2 horas. Y en ese momento, casi todo el trabajo se detiene: primero hay que comer y luego dormir. Los chinos comen mucho, por lo que el problema de la obesidad se ha arraigado firmemente en sus vidas. Es especialmente fuerte en los adolescentes que son aficionados a la comida chatarra.

3. La mayoría recibe un salario bajo

Como en cualquier otro país, el salario en China depende de la región. Pero esto no significa que la gente trabaje por poco dinero. En las grandes ciudades, como Beijing o Shanghai, el salario oscila alrededor de los 1 000 USD. En las ciudades más pequeñas, es de 600 USD a 1 000 USD.

Por supuesto que hay excepciones, pero solo se aplican a las áreas pequeñas, que por ciertas razones están aisladas de los centros de desarrollo económico. A la vez, en China trabajan todos, porque si bien allí hay una jubilación paga, no hay ningún beneficio de desempleo.

4. La población de China vive bajo censura

Existe una opinión generalizada de que en China la existencia de la censura, y la ausencia de las redes sociales populares, le quitan a la población todas las oportunidades de comunicarse y enterarse de noticias. Pero solo es un mito. Los chinos son lo suficientemente conscientes de cómo evitar las prohibiciones y los bloqueos, por lo que tienen acceso fácil a toda la información que les interesa.

No los asusta la ausencia de las redes sociales conocidas en todo el mundo, porque usan sus propias versiones de redes de comunicación, y algunas hasta superan a sus “colegas” extranjeros en cuanto a la popularidad.

5. En China, siempre hay que estar alerta porque la gente local quiere engañarte

Aquí hay que decir que lo ideal es tener cuidado en cualquier país, no solo en China. Además, incluso si en el Reino del Medio hay personas con intenciones de engañar a alguien, le será indistinto si la víctima de su fraude es una persona local o una extranjera.

Para no caer en posibles trampas, por ejemplo en los mercados, será suficiente con estudiar los precios y las características del comercio en diferentes lugares. Y prepararse para recibir mucha atención de la población local, porque una persona occidental siempre les causa curiosidad.

6. Las personas de diferentes regiones no se entienden entre sí

Esto fue cierto hasta la década de 1980. En China solía haber varios dialectos que diferían significativamente los unos de los otros, por lo que era bastante lógico que las personas de distintas regiones no se entendieran entre sí.

La situación con el idioma cambió cuando sobre la base del dialecto de Beijin se creó el idioma chino, con cuya ayuda el gobierno pretendía unir a todo el país. Y para fines del siglo 20, el nuevo idioma chino comenzó a utilizarse en la enseñanza, lo que excluyó la posibilidad de que los habitantes pudieran no entenderse entre sí.

7. En China, el hombre es más valorado que la mujer

En cuanto al patriarcado, la situación es doble, porque depende mucho de la zona. Así, en los asentamientos pequeños realmente se cree que los niños pueden traer más felicidad que las niñas. En esos lugares, las mujeres son, en primer lugar, personas que cuidan el hogar.

En cambio en las grandes ciudades la situación es diferente. Las mujeres trabajan en los mismos puestos que los hombres. El número de mujeres chinas en las listas de empresarias exitosas que ganaron su fortuna en lugar de heredarla, supera al de las representantes de otros países.

8. En China todo está controlado por el Partido Comunista

Esto también es un mito. Sí, el Partido Comunista que gobierna el país controla toda la producción y los bancos estatales. En las pequeñas y medianas empresas, prevalece una competencia razonable: en las calles, las diferentes tiendas, salones y cafés que ofrecen los mismos servicios funcionan cerca las unas de las otras.

Además, en el comunismo nada es gratis: la educación, los servicios médicos, los servicios públicos, todo debe pagarse, aunque sea en pequeñas cantidades. En China no es así. Y además, en el mundo nunca hubo un estado verdaderamente comunista.

9. La población es absolutamente fanática del trabajo

A los chinos les gusta descansar y no hacer nada, igual que a cualquiera de nosotros, si tienen esa oportunidad. Su buen desempeño laboral se explica fácilmente por la alta competencia existente en el país, condición que fuerza a tener un enfoque práctico de lo que está sucediendo para mantenerse a flote. En otras palabras, al igual que en el caso de cualquier otra persona, si hay una necesidad de trabajar, los chinos trabajarán; si no, disfrutarán del descanso.

10. Hay una atmósfera constante de miedo en el país, porque el estado vigila a todos

El Partido Comunista de China realmente mantiene bajo control las organizaciones públicas, pero no se mete en la vida privada de los ciudadanos. Todos pueden hacer absolutamente lo que quieran, siempre que su acciones no constituyan una amenaza para la sociedad.

En las calles de las grandes ciudades se puede encontrar una gran cantidad de cámaras, cuya tarea principalmente es la de mantener la seguridad. Tal vez, hayan sido esas medidas las que llevaron al hecho de que la tasa de criminalidad en el país sea bastante baja, y que la policía local no tenga demasiado trabajo.

11. No son creativos y solo saben copiar

La idea de que en China no se produce nada original probablemente se deba al hecho de que este país es el fabricante y el proveedor de la mayoría de las cosas que usamos en nuestra vida cotidiana. Pero es un error creer que en este país no hay personas que puedan inventar algo que no existía antes.

Dicho sea de paso, fue en China donde se inventó el tenedor, el barco a vapor, la tarjeta de visita, los naipes, el menú de restaurante y el papel higiénico, entre otros. En cuanto a las tecnologías modernas, se puede observar que las computadoras chinas son, quizás, las más rápidas del mundo.

A lo largo de toda su historia, este pueblo vivió según sus propios estándares y cánones. Siempre trataron de inventar e innovar. En la actualidad, los especialistas chinos en diversos campos tienen demanda en muchos países del mundo.

12. En China, todo se hace respetando el feng shui

El feng shui es una tendencia que intentó seguir mucha gente. Qué ángulos son “buenos” y cuáles son los “malos”, en qué parte de la habitación es mejor poner la cama, de cara hacia qué dirección hay que dormir, etc. Pero hay un pequeño detalle: en China no existe el feng shui, que es tan popular en otros países. No existe tal “enseñanza”: existe una cosmovisión especial, inherente a los chinos literalmente desde el nacimiento. Saben desde la cuna cómo hacer que la casa sea acogedora y qué talismanes usar para atraer todo tipo de beneficios.

Además, históricamente el feng shui se usaba para determinar el lugar apropiado para una tumba, y no como un conjunto de reglas para decorar la casa.

13. La medicina del Reino del Medio es muy buena

No debe de existir una persona que no haya escuchado sobre la acupuntura y sobre la milagrosa medicina china. Pero, por alguna razón, es muy difícil encontrar a un curandero popular en el país. Y todos estos secretos de la “gran medicina china” se han convertido en un simple buen movimiento de marketing. Porque incluso en la consulta con el “mejor” médico de la clínica existe la posibilidad de obtener una banal y ya conocida receta para el tratamiento del hígado y el entumecimiento de las manos.

¿Ha cambiado tu opinión sobre China? ¿Solías creer en alguno de estos mitos?