14 Cosas “modernas” que existían en el pasado y resurgieron en su forma más evolucionada
Si encuentras un objeto ultratecnológico con pinta de ser innovador, hay una alta posibilidad de que haya sido creado por algún inventor del siglo antepasado. Pero, por A o B motivo, apenas comenzó a repuntar tras los avances científicos que surgieron en las últimas décadas. Es por eso que hicimos una selección de diversos artefactos modernos, para compararlos con sus versiones antiguas y cómo fueron evolucionando hasta la actualidad.
¿Qué objetos que usas ahora ya los usaban tus padres y abuelos en su juventud? ¿Qué otras versiones piensas que pueden aparecer en el futuro?
1. Carriolas para bebés
La primera carriola surgió en 1733, cuando el pintor y diseñador William Kent creó un modelo por encargo de un duque que quería trasladar a sus hijos de forma más cómoda. Durante la época victoriana, las carriolas se volvieron muy populares. En ese periodo, había varios diseños, como aquellos que tenían sombrillas, los que incluían frenos y los que se doblaban.
Con el tiempo, la carriola fue perfeccionándose y variando según la necesidad. Por ejemplo, en 1889, surgió la carriola reversible para que el bebé pudiera mirar hacia sus padres. Y, en 1965, se integró el marco de aluminio para hacerlo más ligero. Actualmente, el modelo más popular es el buggie, en el que el bebé se mantiene sentado y mirando hacia adelante.
2. Reproductor de sonido para autos
La incorporación de una radio en el automóvil surgió a inicios del siglo XX. Pero hasta la década del 50, solo admitía frecuencia AM. En 1953, se pudo introducir la frecuencia FM, pero los conductores querían algo más. Y con el auge del tocadiscos, surgió la idea de diseñar un reproductor de discos para vehículos en la década del 60.
Tras varias pruebas y ensayos, también se logró añadir espacio para reproducir casetes. En los años 80, se pudo crear radios con reproductor de CD y ganaron una gran popularidad en la década del 90. Entre el 2000 al 2010 también se diseñaron reproductores de música con Bluetooth, USB y lector de tarjeta de memoria.
3. Bañera con puerta
Las bañeras ya existían en la antigua Grecia con la idea de relajar el cuerpo sumergido en agua. No obstante, la versión de bañeras con puerta es relativamente reciente. Su inventor, Per Bergman, incorporó una abertura que se puede abrir y cerrar para facilitar el acceso a personas de edad o con alguna discapacidad.
Actualmente, se las conoce como bañeras accesibles y hay varios modelos. Están desde las que vienen con una puerta que se abre hacia adentro hasta las que se deslizan de abajo hacia arriba. Algunas versiones incluyen, además, un asiento para mayor comodidad.
4. Cambiadores de baño portátiles
Entre los siglos XVIII y XX, en las playas se instalaban artefactos de baño para poder cambiarse antes de sumergirse en el mar. Fue en el año 1929 que surgió una divertida forma de hacerlo con el skreenette, o cambiador de baño portátil. Este consistía en un largo tubo en el que la persona podía entrar, quedando la cabeza y las piernas afuera para recorrer la playa.
Lo más cercano que hay a un skreenette en la actualidad es la bata Dryrobe. Su diseño se asemeja al de un saco largo que, además de ser un cambiador portátil, mantiene seco el cuerpo. Debido a su practicidad, también comenzó a usarse en muchos otros ámbitos fuera de la playa.
5. Silla para subir gradas
La idea de crear una silla para subir gradas surgió en 1923, cuando un empresario visionario llamado Sr. Crispen visitó a un vecino con problemas de movilidad. Durante el año 1964, el profesor Mederith también creó una especie de silla eléctrica con ruedas dentadas que salían cuando la persona debía subir una gradería.
La diferencia entre una y otra silla es que el invento del Sr. Crispen funciona con un mecanismo similar a un elevador, solo que va en sentido diagonal. Por su parte, la silla de ruedas dentadas está pensada para moverse sin requerir de una instalación previa en el lugar. Actualmente, existen modelos de sillas de ruedas autoequilibradas, capaces de transitar en gradas de caracol.
6. Traje de buceo
En el año 1710, dos inventores ingleses diseñaron los primeros trajes de buceo que consistían en un barril lleno de aire y un orificio de vidrio para la vista. Poco después, surgió un modelo hecho de cuero con casco, al cual se le añadieron tubos para poder respirar. En 1830, un ingeniero alemán llamado Augustus Siebes integró la lona y realizó uno que otro ajuste.
Por casi tres siglos, lo fabricaron con una lámina de caucho sólido que lo hacía más ligero que sus antecesores. Incluso hay un registro fotográfico de 1918, en el que un soldado luce un traje de ese estilo. Pero no fue sino hasta 1951 que surgió el traje de neopreno, que fue inventado por un físico estadounidense llamado Hugh Bradner. Este material es mucho más ligero y se adapta a cualquier tipo de temperatura.
7. Sacapuntas
El primer sacapuntas surgió en 1822, en Francia, creado por el Sr. Boucher. En 1833, se lanzaron los primeros modelos en Inglaterra, que consistían de dos limas bien afiladas sostenidas con un palo. Fue así como, a lo largo del siglo XIX, aparecieron más versiones, pero casi todas eran máquinas pesadas destinadas al uso en oficinas.
No fue sino hasta 1847 que se diseñó el primer sacapuntas manual, que es la forma más conocida en la actualidad. Estos materiales son bastante económicos y prácticos, además de que existen varios modelos. Están desde los escolares hechos con aleación de aluminio hasta los de plástico duro de diferentes colores.
8. Drones
Los primeros vehículos aéreos no tripulados aparecieron en 1894 y estaban hechos con globos. Pero fue hasta en los años 1900 que se inventaron los primeros drones, que tenían forma de pequeñas avionetas. Su función inicial era la de apoyar en las prácticas militares, pero también se usaron para monitorear ciertos terrenos desde los aires.
Entre la década del 1980 y 1990 surgieron los drones miniaturizados, tal como los conocemos ahora. Y aunque inicialmente estaban reservados para uso militar, pronto comenzaron a expandirse a otros ámbitos, como la fotografía aérea y la vigilancia ambiental.
9. Videollamadas
Ya en 1870 se tenía la idea de crear un sistema de videoteléfono para las comunicaciones a distancia. Esta tecnología fue desarrollada durante los años 20, llegando a verse una imagen representativa en 1922. Pero recién en la década del 70 apareció el primer servicio de videoconferencia en el mundo. Este consistía en una cabina telefónica en la cual se podía llamar a una persona desde su casa u oficina.
Lamentablemente, el servicio fue un fracaso debido a los altos costos. Y si bien surgieron diversos modelos portátiles durante los años 90, como los videoteléfonos japoneses, no prosperaron. Recién después de los 2000, y con el auge del internet, fue que las videollamadas accesibles a todo el público se hicieron realidad.
10. Rayos X
Los primeros experimentos con rayos X surgieron entre los siglos XVIII y XIX, cuando se descubrió que las corrientes eléctricas pasadas a través de un tubo de vidrio lograban crear “fotografías eléctricas”. Y tras saberse que se podía ver los huesos de los seres vivos, pronto se les dio una aplicación médica. Durante el siglo XX, se usaron placas con sal para disminuir la exposición constante a solo unos minutos.
Actualmente, los rayos X sirven para hacer radiografías del cuerpo humano. La idea es diagnosticar alguna fractura o irregularidad en un órgano que no se puede ver a simple vista. Con los avances informáticos, esta técnica se está desarrollando para crear imágenes tridimensionales que ayuden a determinar ciertas condiciones de un paciente de mejor manera.
11. Videojuegos
Los primeros videojuegos se inventaron entre los años 50 y 60 y eran muy simples, como el Tenis para dos, que se jugaba en una computadora analógica. También estaba Guerra espacial, desarrollado en 1961, que fue el más popular en su momento.
Recién entre los 70 y 80 aparecieron las primeras consolas para su distribución en los hogares. También aparecieron los juegos portátiles de la mano de Nintendo, que, en el 2017, lanzó su primera consola con pantalla incorporada. La industria del videojuego fue expandiéndose con el surgimiento de la realidad aumentada y los dispositivos móviles, pudiendo así ser cada vez más sofisticada.
12. Automóvil eléctrico
Los primeros vehículos eléctricos surgieron en el siglo XIX, pero no se sabe con exactitud quién los inventó. En su mayoría, tenían un mecanismo similar a los tranvías, debido a que usaban rieles para transportarse. A inicios del siglo XX, en cambio, surgieron los coches alimentados con batería y se volvieron muy populares, pero como eran muy costosos, cayeron en desuso rápidamente.
Esto se debía a que no duraban mucho tiempo, lo cual suponía una desventaja para los viajes a larga distancia, además de que los carros de gasolina eran más resistentes y baratos. Sin embargo, en la década del 2000, se implementaron varias mejoras para que los autos eléctricos pudiesen andar en carreteras, alcanzando los 320 km por cargas.
13. Motocicleta eléctrica
Paralelo a los carros eléctricos, también surgieron las primeras motocicletas eléctricas, siendo su primera patente en 1895. Estos modelos consistían en bicicletas con motores incorporados hacia adelante o en el centro que eran alimentados con batería.
Las motos eléctricas modernas cuentan con baterías recargables de litio que se pueden conectar con un cable a una base de alimentación para conducir por varios kilómetros. Sin embargo, también se están lanzando algunos prototipos con baterías de hidrógeno que pueden durar hasta los 160 km.
14. Reloj de pulsera
Ya durante el reinado de la reina Isabel I de Inglaterra surgió la idea de crear un reloj de pulsera. Se dice que la monarca recibió un modelo que fue descrito como “reloj armado”. Aunque comenzaron a fabricarse durante el siglo XIX, los relojes de bolsillo todavía seguían siendo populares hasta a principios del siglo XX.
La practicidad de los relojes de pulsera fue tal que, poco a poco, comenzaron a usarse en el ámbito militar y de la aviación. En 1950, aparecieron los primeros relojes eléctricos, que funcionan con pequeñas pilas para hacer mover las manecillas. Y con los avances informáticos, ahora están los relojes digitales de pantalla táctil que, además de la hora, muestra otros datos, como la temperatura.