El dicho “La mentira siempre sale a la luz” a la mayoría de la gente le parece una exageración. Pero solo hasta que ellos mismos sienten el poder de su autenticidad. Justo con una situación así se tuvieron que enfrentar los héroes de este artículo.
Genial.guru siempre quiere que la verdad prevalezca, aunque no sea agradable. Y aquí están las historias de aquellos a quienes el destino les trajo la verdad en una bandeja de plata.
- Mis padres me contaron esto hoy. Ellos trabajan en la universidad (papá es profesor y mamá es profesora adjunta). Una vez los abuelos de una chica fueron a la recepción del rector: “Nuestra nieta vive con nosotros, sus padres están en la provincia. Ella estudia muy bien, pero ahora está llorando porque no le han dado el diploma. ¡¿Cuál es el motivo?!”. El rector le pidió a la secretaria que averiguara lo que sucedía en la oficina del decano. Resultó que esa chica tan buena había sido expulsada hacía dos años por falta de asistencia. © PhoeniXAAM / Pikabu
- Oxímetro de pulso. Descubrí una “función adicional”. Puse esa cosa en el dedo de mi hija y la prendí. Pulso de 53 a 54 latidos por minuto. Le pregunté: “¿Has hecho tu tarea?”. Ella me dijo: “Sí”. Y en ese momento el ritmo cardíaco saltó a 72. Me fijé y no la había hecho. Así que es un artículo muy útil, lo recomiendo. © maka20044 / Pikabu
- Ayer fui a la clínica con mi hijo. No había cola, solo una mamá con su bebé. Tenía turno para las 9:00, eran las 8:59. Quería ir pasando, pero noté que me miraba molesta. Por las dudas pregunté:
—¿Tiene turno?
—Sí.
—¿Para qué hora?
—8:45.
—Bien, entonces pase primera, mi turno es para las 9:00.
Mientras tanto, empecé a preparar a mi hijo, revisar los papeles y cosas así. Al mismo tiempo, la puerta del médico estaba abierta y me pareció que había escuchado nuestra conversación, ya que salió, anunció mi nombre y preguntó:
—¿Para las 9:00?
—Sí, soy yo, pero aquí la señora tiene turno para las 8:45...
—Todos los de las 8:45 ya se fueron.
Miré a la mujer y hasta se puso colorada. © pablo62 / Pikabu
- Llegaron las vacaciones. Algunos se iban de la ciudad, a pescar y cosas así... Fui a la casa de campo de mis padres para ayudar, cambié los tubos de la ducha de jardín, los enterré bajo tierra. Además me puse a replantar la frambuesa, cavé mucha tierra. Como no tenía la costumbre de hacer estos trabajos, me aparecieron callos en las manos. Las vacaciones terminaron y llegó el primer día laboral. Estábamos con los muchachos contando cómo había pasado las vacaciones cada uno. Alejandro, un compañero que era el hijo de una familia muy rica que acababa de comprarse una casa enorme, dijo:
—Todas las vacaciones las pasé cavando los cimientos, desde temprano hasta la noche. No saben cómo me cansé, parece que ni tuve vacaciones.
Y yo, sabiendo cómo era Alejandro, le mostré mis manos y le dije:
—Amigo, muéstrame tus manos.
Alejandro se puso colorado mientras mostraba sus palmas rosaditas y bien cuidadas. Todos se rieron mucho. © cma4000 / Pikabu - Me di cuenta de que la factura de gas del departamento de mi abuelo era más alta de lo habitual y por mucho. Decidí verificarlo, ya que mi abuelo no solía cocinar. Fui a su departamento y vi que la estufa estaba prendida, aunque en el departamento hacía calor sin ella. Resultó que el abuelo mantenía el gas constantemente encendido para ahorrar en fósforos. Ahorrar en fósforos, chicos. © kit932 / Pikabu
- Trabajo en un almacén. Mesas, sillas, computadoras y otras cosas acumulando polvo mientras esperan a ser compradas. El recuento físico reveló que faltaban dos sillas. Las hemos buscado durante tres días. Resultó que estábamos sentados sobre ellas. © unknown author / Bash.im
- Me lo contaron los vecinos. Un gato callejero a veces les arrojaba un ratón atrapado al porche, demostrando así su idoneidad profesional y expresando el deseo de recibir comida. Quitaban el ratón del porche y el gato a veces obtenía su comida. Después, en una conversación con otros vecinos, resultó que también les llevaba ratones. Pero un día de casualidad pude seguir al gato y descubrí que el sinvergüenza llevaba el mismo ratón a todos los vecinos y de esta manera tan sencilla tenía un estilo de vida bien alimentado. © unknown author / Bash.im
- Mis amigos tienen un bebé pequeño, de alrededor de un mes. Durante mucho tiempo no podían entender por qué lloraba tanto por las noches. Luego resultó que el pequeño se tiraba un gas durmiendo, se despertaba por el ruido, se asustaba y lloraba. © unknown author / Bash.im
- Mis amigos compraron en una tienda de segunda mano una chaqueta de cuero para su hijo de un año, como de motociclista. Les costó ponérsela, pero después de varios intentos lo lograron; todo parecía estar bien, solo que las mangas eran cortas y anchas. Cuando se fijaron en la prenda más de cerca, resultó que era una chaqueta para bull terrier. © unknown author / Bash.im
- De repente todos en el trabajo a la vez se quedaron sin Internet. Se les informó a los administradores. Comenzaron a buscar a Andrés, quien podía arreglarlo. Resultó que Andrés por accidente se había quedado encerrado en la sala de servidores, no pudo salir y cortó el Internet él mismo para que alguien se diera cuenta de su ausencia. © unknown author / Bash.im
- Fuimos a cenar a la casa de mi abuela. Mi tío tomó unas copas de más e insinuó que estaba teniendo una aventura romántica con mi madre. Después de un par de meses y dos pruebas de ADN, descubrimos que mi hermana es en realidad su hija. Mi padre nunca volvió a hablar con su hermano. Y, por supuesto, mis padres se divorciaron. © oliveotherraindeer / Reddit
- Tenía 26 años cuando me enteré de que tengo un hermano que fue entregado inmediatamente después de nacer. Y lo que es aún más extraño es que vivía a pocos kilómetros de donde yo crecí. Si lo hubiera visto antes, seguramente lo habría reconocido. Después de todo, él era mi copia exacta. © nannyalan / Reddit
- Paseaba por la calle, un niño muy sonriente corrió hacia mí, se cayó justo a mi lado y comenzó a llorar fuerte. Yo, por supuesto, me incliné de inmediato hacia él, lo ayudé a levantarse, lo calmé, y él gritó: “¡Paaaaaapáááá, estoy aquí!”. El papá se acercó, miré hacia arriba... y vi a mi novio, quien hasta ese momento no era casado ni había tenido hijos. © Oídoporahí / Ideer
- Descubrí que mi marido era infiel. Estábamos en la cocina, él metió los ravioles en la olla y tomó el tiempo. Solo que miró hacia la pared donde nunca habíamos tenido un reloj. Cuando le pregunté “¿quién es ella?”, no pudo negarlo, pero tampoco pudo entender cómo lo había descubierto. © Oídoporahí / Ideer
¿Y cuál es tu historia sobre un secreto que fue revelado?