Así luce hoy día la niña que hace unos años fue nombrada como la más bella del mundo

El verano es época de bodas y eventos, y a muchas nos gusta utilizar zapatos de tacón, ya que hacen que las piernas se vean más estilizadas y nos dan una apariencia muy elegante. Sin embargo, ellos no son los mejores aliados de las mujeres, y es que aguantarlos varias horas sin sufrir es una misión imposible la mayoría de las veces.
En Genial.guru hemos reunido algunos trucos que te harán sufrir menos con tus zapatos de tacón, y queremos compartirlos contigo para que puedas llevarlos siempre que quieras sin preocuparte por el dolor.
Si metes tus tacones al congelador durante 30 minutos, al poner tu pie caliente en el zapato frío, el material de este cederá adaptándose a su forma. También puedes colocar una bolsa de agua en el interior del calzado y meterlo al refrigerador hasta que el líquido se congele.
Humedece unos calcetines de algodón en agua caliente y póntelos antes de colocarte el calzado. Si los usas en casa antes de llevarlos a la calle, el zapato dará un poco de sí y no te irritará.
Este adhesivo se pega al pie y al zapato, para que así la planta no se resbale y evites que se vaya hacia delante, provocando dolor en los dedos.
Ya sean de silicona o de tela, las plantillas fijarán tu pie al zapato para que no se mueva, además de acolchar su suela. Si el calzado es abierto, prueba con almohadillas de silicona plantares. Con ellas conseguirás el mismo efecto.
Aplicar crema hidratante en el interior del zapato antes de ponértelo evitará posibles rozaduras, sobre todo si el calzado es nuevo.
Este material que todos tenemos en casa evitará que el pie sude y se resbale, minimizando así los roces y las posibles torceduras.
Tienes que envolver el tercer y cuarto dedo con cinta adhesiva para evitar la presión producida en el nervio que se encuentra en ellos, el cual provoca dolor.
Si te quitas tus zapatos para descansar, lo único que conseguirás es que tus pies se inflamen y que, cuando quieras volver a ponértelos, la molestia sea peor.
Utiliza tus zapatos de tacón en casa una semana antes de ponértelos para salir, sobre todo si son nuevos, así acostumbrarás tu pie al calzado y este tomará tu forma.
Debes echártelo antes de ponerte el zapato en las zonas del pie donde pueda haber roce, para evitar así la fricción y las molestias.
Camina de vez en cuando, ya que estar de pie quieta con zapatos de tacón acabará causándote más dolor que si te mueves. También puedes sentarte y descansar un rato, pero recuerda: sin quitarte el calzado.
Si tus talones están agrietados o tienes durezas y callosidades, tus zapatos van a incidir en estos problemas causándote más dolor.
Si nunca has usado este tipo de zapatos antes, no te pongas unos de aguja muy altos, ya que no aguantarás mucho con ellos. Opta por un tacón de menos centímetros y más ancho. También puedes elegir calzado que tenga un poco de plataforma en la parte delantera, o unas cuñas.
Lleva siempre en tu bolso tiras adhesivas sanitarias, y productos para curar ampollas y aliviar su dolor. Serán de gran utilidad si finalmente los zapatos te hacen daño.
¿Conoces otros trucos que sean efectivos para poder utilizar cómodamente tacones y no se encuentren en esta lista?