15 Alimentos que no deberíamos guardar en el refrigerador (y uno que ha generado debate)

Mantener en buen estado nuestros alimentos durante el mayor tiempo posible no solo beneficia a nuestra salud, sino también a nuestra economía. ¿Guardas limones en el refrigerador? ¿No logras mantener la albahaca sin que se marchite? Entonces este artículo está pensado especialmente para ti.

En Genial.guru nos interesa la alimentación saludable y la conservación eficiente de la comida, por eso elaboramos esta lista de consejos que podrían resultarte útiles.

• Plátanos. Lo mejor es que permanezcan a temperatura ambiente. La humedad del refrigerador solo acelerará su descomposición. Por eso, quienes saben del tema recomiendan mantenerlos fuera.
• Papas. Es sabido que son un alimento versátil: se pueden comer de mil maneras. Hay que conservarlas sin lavar en un lugar fresco y seco. De lo contrario, dicen los expertos, el almidón que contienen tiende a transformarse en azúcar. Esto modificará su sabor cuando las cocines.
• Cebollas. Solo es recomendable refrigerarlas cuando ya las has pelado y cortado. En ese caso, usa un recipiente con tapa y no las guardes más de siete días. Pero la regla es: fuera de la nevera, para evitar que se humedezcan y se oxiden de forma prematura.

• Aguacates. Recién comienzan a madurar cuando son cosechados de la planta. Su refrigeración pone en pausa este proceso, por eso es recomendable mantenerlos a temperatura ambiente hasta que alcancen su punto ideal.
• Ajos. Están entre los vegetales mejor preparados para su conservación en el ambiente, según la FAO. En esas condiciones pueden durar hasta siete meses. Por eso, guardarlos en la nevera solo acelerará la formación de moho y les dará una textura mucho más blanda.
• Pan. Los panaderos más reconocidos explican que el producto se enmohece más rápidamente dentro del refrigerador. Ya de por sí es húmedo, porque se compone de agua y harina. La nevera solo le agrega humedad. Lo mejor es protegerlo con un trapo de algodón.

• Jitomates. El escritor especializado en química alimentaria Harold McGee en uno de sus libros explica con contundencia: “El tomate proviene de climas cálidos y debe ser almacenado a temperatura ambiente”. El frío, detalla, rompe membranas internas y provoca pérdida de sabor y una textura harinosa.
• Café. El grano de café tiene dos enemigas: la temperatura y la humedad. Por eso, para mantenerlo fresco, hay quienes eligen almacenarlo en la nevera, olvidando que esa es una gran fuente de humedad. Según los expertos, esto facilita la formación de hongos y produce una pérdida de sabor.
• Miel. Este maravilloso alimento natural resiste muy bien el paso del tiempo si se lo conserva bien cerrado. La miel, dicen los productores, tiene muy poca agua, lo que dificulta la generación de microorganismos. La nevera, como en el caso del café, sería una fuente innecesaria de humedad.

• Calabazas. Otro alimento para cuyo almacenamiento es importante que no haya exceso de humedad. El frío también afecta negativamente su conservación. Especialistas del sector agroalimentario recomiendan tenerlas en lugares ventilados y al abrigo de bajas temperaturas.
• Sandía. Si aún no ha sido cortada, se mantiene bien en un ambiente fresco y seco. Una vez dividida, sí se puede guardar en la nevera con alguna envoltura plástica. Conservará su sabor y textura durante tres días, según el Departamento de Agricultura estadounidense.
• Aceite de oliva. Suele ser práctico dejar la botellita en la puerta de la nevera, pero es otro error común. Para que dure mucho tiempo, debe estar en un recipiente hermético y en un sitio oscuro y fresco.

• Naranjas, mandarinas, limones. El frío, además de interrumpir la maduración de los cítricos, les puede causar manchas o un color opaco, que pueden o no afectar su interior. Para protegerlos y darles mejor aspecto comercial, los productores suelen aplicar una capa de cera a algunos frutos.
• Albahaca. Jamás la dejes en la nevera si quieres que dure. Trátala como a una plantita más: mantenla en agua. Necesita humedad, así que, como recomienda la famosa cocinera Martha Stewart, puedes cubrirla con algo plástico.
• Zanahorias. Recuerda: Bugs Bunny no tenía nevera. ¿Notaste que pierden su rigidez y su sabor cuando están frías? Eso se debe a que el frío y la humedad las afectan, tal como describen los especialistas del Mercado Central de Buenos Aires.

Bono: la polémica del kétchup. ¿Refrigerador o alacena?

Este es un punto debatido. Para tratar de solucionarlo, nos remitimos a la investigación histórica. Polly Russell, historiadora culinaria, cuenta que este aderezo existe desde antes de que los hogares tuvieran nevera. Por lo cual, si no era necesaria la refrigeración antes, tampoco lo sería hoy.

En la misma línea, la dietóloga y nutricionista Sarah Schenker afirma que no es necesario guardarlo allí. “No solo contiene vinagre, sino también el ácido natural del tomate, y ambos hacen que este producto se preserve a temperatura ambiente”, afirma.

Por el contrario, la etiqueta trasera de Heinz, la marca de kétchup más conocida, indica: “Para mejores resultados, refrigérese luego de abrir”.

Y tú, ¿a qué club perteneces? ¿Disfrutas de que el kétchup enfríe tus papas fritas o lo prefieres a temperatura ambiente? Queremos saberlo.