15+ Anécdotas de personas que ven el romance a su manera

No a todas las parejas les gustan las cenas a la luz de las velas o los ramos de flores enormes para cada fiesta. A algunas, para sentir amor, cariño o insinuaciones de flirteo, les basta con una lata de conservas o un paquete de pastillas para el dolor de cabeza. Y este artículo tratará de lo diferente y peculiar que es cada persona a la hora de entender lo romántico.

• Caminaba por la carretera cuando un taxi me roció con el agua turbia de los charcos. Estaba a punto de echarme a llorar. Pero entonces el taxi se detuvo, bajó un hombre, gritó al conductor y corrió hacia mí. Me llevó a su casa, me lavó la ropa y me dio té. Empezamos a vernos y nos casamos. Solo 10 años después mi marido me confesó que había pagado un extra al taxista para que me salpicara. Yo le había gustado, ¡maldita sea! © No todo el mundo lo entenderá / VK
• Dormía en la mesa de café junto a mi mujer cuando la operaron de la cadera. Así podía masajearle los costados en cualquier momento para que se tumbara cómodamente. Hice esto durante cuatro semanas. Créeme, dormir en la mesa baja es un calvario, pero lo volvería a hacer si fuera necesario. © Obvious-Tale-1762 / Reddit
• Tenía un novio al que le gustaba mucho hacer ejercicio y practicaba artes marciales. Un día le pedí que me enseñara un movimiento y me derribó, luego me agarró y me besó. Fue muy atractivo. © sleepyhollow_101 / Reddit

• Mi actual esposa, y en aquel momento mi novia, es una ferviente defensora de los animales. Así que decidí proponerle matrimonio en un restaurante de lujo de Tokio, que solo sirve 3 mesas y al que constantemente se le ocurren todo tipo de trucos innovadores. Nunca sabes con qué te sorprenderán. Y entonces, entre platillo y platillo, el chef saca un pequeño jarrón de cristal con calamares luciérnaga flotando en él y nos ofrece a jugar con ellos. Mi mujer estaba encantada y prácticamente les puso nombre. Y dos platillos más tarde, los calamares volvieron a aparecer... como platillos principales, sobre un plato de cristal, iluminados desde abajo y colocados para que pareciera que nadaban. A pesar de todo, dijo que sí a la propuesta, pero nunca me dejó olvidar que la había llevado a la peor cena por la que había pagado más dinero que nunca. © wooshoofoo / Reddit
• Mi novio tiene una fantasía, pero al parecer muy especial. Le insinué que quería un gesto romántico. Asintió comprensivo y puso cara de perplejidad. Al día siguiente vino a mi trabajo, me tomó de la mano y se me llevó en silencio. Me dijo que lo había acordado todo con mis jefes. Pienso, bueno, todo, ahora habrá un ramo de rosas, confesiones... Qué va. ¡Me llevó al jardín botánico! Me dijo: "Aquí tienes unas flores para que las disfrutes". Paseamos por los invernaderos, contó algunos datos sobre plantas raras, ya he olvidado mi ofensa, porque, sinceramente, fue genial. Al final, no recibí un ramo banal, sino una cita elegante. Supongo que así es aún mejor. © Caramel / VK

• Mi marido y yo llevábamos casados 3 meses, cuando fuimos a una tienda, allí me enamoré de un bolso azul. Y mi esposo decidió regalármelo por mi cumpleaños. Fue a la tienda y no se acordaba de cuál era. Sacó todos los bolsos azules, los puso en fila, no sirvió de nada. Entonces llamó a mi amiga, que también sabía qué bolso me gustaba, y le pidió ayuda. Ella le dio una pista y él, satisfecho, compró uno. La mañana de mi cumpleaños, nos íbamos de viaje y encontré mi regalo junto con un ramo de rosas en el asiento del coche. Fue muy dulce y aprecié su impulso, y el bolso era bonito. Excepto que, después de todo, había comprado uno diferente. © Shravs / Quora
• Estaba en una fiesta de Halloween. Un chico se me acercó y me dijo que me había echado un ojo. Después me entregó un resbaladizo globo ocular artificial. © janeosb / Reddit
• Hace un par de años, la enfermedad crónica de mi esposa empeoró. Y yo quería hacerla feliz de alguna manera... Así que salí y compré una sola rosa roja. Bonita, agradable, todos contentos... pero al cabo de 7 u 8 días, la flor empezó a marchitarse. Así que, mientras mi mujer estaba en el trabajo, fui y compré una nueva rosa del mismo color. Mi mujer se recuperó, pero a mí me quedó la costumbre durante mucho tiempo... Así que siempre tenía la flor fresca para otro año. © Serracer / Pikabu

• Éramos compañeros de clase en la universidad y solo éramos amigos. Como la universidad estaba a una hora de distancia, a menudo lo llamaba mientras iba allí y charlábamos. Un día lo llamé por la mañana y me quejé de que me dolía la cabeza. Y él trajo pastillas para el dolor de cabeza, una botella de agua y un postre de yogur. En otra ocasión le comenté que se me había acabado el delineador de ojos, así que se pasó una hora en una tienda de cosméticos porque no sabía ni lo que era, preguntó de todo a las dependientas y por la mañana me trajo el delineador. Llevamos casados 4 años y sigue siendo tan dulce como antes. © d***itnoobnoob / Reddit
• Tengo una debilidad: adoro las puestas de sol. Las fotografío y vendo calendarios de ellas. Una vez participé en un estudio médico en el que yo y los demás participantes estuvimos aislados en una habitación durante 2 semanas. Un chico que me gustaba me enviaba fotos de puestas de sol todas las noches porque no quería que me las perdiera. Acabó siendo mi esposo. © ceerz / Reddit

“Así se ve el amor verdadero. Mi novio estuvo sentado a mi lado 12 horas al día cuando me rompí la cadera y estaba en el hospital”

• Trabajaba con una mujer y nuestras mesas estaban una al lado de la otra. Y entre los escritorios había una mesita con un botón de alarma en la parte inferior. Cada vez que se acercaba a ese botón, yo le advertía: "No toques el botón de la alarma". Ella lo tocaba en broma, yo la agarraba de la mano y la apartaba. Esto duró meses. Un día murmuré juguetonamente: "¡¿Qué te importa ese botón?!". Y ella respondió: "Es que me gusta que me tomes de la mano". Nunca me había emocionado tanto. Me gustó su franqueza, y después de eso nos limitamos a tomarnos de la mano bajo la mesa, sin tonterías. © zack5504 / Reddit
• Un viernes por la noche mi esposa y yo estábamos aburridos y le propuse salir. Llegamos al centro y le pregunté adónde quería ir. Señaló con el dedo. Caminamos, charlamos, comemos helado. Pasamos junto a un café y dije: “¿Entramos?”. Estaba lleno. Fui a preguntar por una mesa y me encontraron una. Mientras mi esposa hojeaba la carta, fui al baño y, en secreto, cancelé por teléfono las reservas en otras cinco cafeterías. Para los paseos espontáneos con mi esposa prefiero prepararme con anticipación. © BerkutM / Pikabu

“Mi novia está esperando a que le pida matrimonio. Tengo este tarro de conservas desde hace dos años para la ocasión. No nos lo vamos a comer”

“¿Quieres casarte conmigo? (Serie San Valentín)”.

• Las flores compradas no me agradan en absoluto. Además, siempre he tenido la sensación, cuando los chicos me regalaban ramos de flores, de que intentaban engañarme: provocar una fuerte emoción por una pequeña acción; son tan fáciles de comprar como una simple lata de refresco. En general, no me impresionan los ramos de flores comprados. Pero recuerdo haber celebrado mi cumpleaños con mi esposo en un viaje de acampada. Entonces no estábamos casados, el día anterior fue una subida difícil, pero él se despertó al amanecer, salió a gatas de la tienda y fue Dios sabe dónde y encontró flores. Ni siquiera sé de dónde las sacó, no las vi cerca del campamento. Fue entonces cuando me emocioné de verdad, me pasé toda la mañana mirándolas y admirándolas. © Roksanis / Pikabu
• Mi infancia fue pobre, y soñaba con tener siempre helado en la nevera. De hecho, deseaba tener todo un congelador lleno de helado en casa, ¡igual que en la tienda! Para que en cualquier momento me apeteciera y me lo llevara, y más aún para poder elegir entre diferentes tipos. Hablaba con mi novio sobre los sueños de la infancia. Y el 8 de marzo, llenó el congelador de helados. Lo abrí y allí estaba... En fin, ya no tengo novio, sino esposo. © Ms.Starlight / Pikabu

Pero para algunos enamorados, el romance no es suficiente. Y están dispuestos a compartir secretos el uno con el otro ante millones de espectadores para poner a prueba la solidez de su relación.