15 Divertidas historias que confirman que ser papá es un mundo completamente distinto al de mamá

Los padres pueden ser de todo tipo: confiables o despistados, bromistas o muy serios, involucrados en la vida de sus hijos o completamente relajados con la crianza. Sin embargo, hay algo en lo que suelen coincidir: muchos hijos e hijas pueden recordar un par de historias que comienzan con la frase: “Una vez, mi papá...”.

La historia de una mamá desaparecida

• Antes de casarme, vivía con mis padres. Recuerdo que una noche estaba con mi papá viendo Terminator. Mi mamá llegó del trabajo, se asomó, pero como no le interesaba la película, se fue a la cocina y luego se fue al estudio a ver una serie de detectives. Cuando se acabó Terminator, me iba a dormir y de repente mi papá entró en pánico y dice:
  — ¡Tenemos que hacer algo! Ya casi es medianoche y mamá aún no ha llegado del trabajo.
  No se dio cuenta de que había vuelto y pasó toda la noche preocupado. Mamá estaba en la habitación de al lado.

“Dejé el pastel listo en el horno y fui a bañar al bebé. Mi papá quiso ’ayudar’ y le puso encima rebanadas de queso barato”

• Le pregunté qué había hecho y él simplemente se encogió de hombros diciendo que ahora el pastel era mejor. Me molesté bastante porque ya tenía una costra de queso perfecta. © HelloMikkii / Reddit

Cuando papá se confundió un poco

• Cuando estaba en la escuela, fui a la clínica con mi papá porque mi mamá no podía. Entramos, nos dieron una ficha y el doctor preguntó:
  — ¿Cuántos años tiene el niño?
  Mi papá se volteó hacia mí y me preguntó:
  — ¿Cuántos tienes ahora?
  Todos se rieron... menos yo..

“Ayer cumplí 19 años. Esta es la tarjeta de felicitación que me dio mi papá”

La tarjeta decía: "Cumples 3 años".

Cómo elegir ropa correctamente

• Trabajaba como vendedora en una tienda de ropa de bajo costo en 2011. Un papá llegó con su hija a comprar un abrigo. Se lo probaron, pero yo ya sabía que no había más tallas disponibles. La prenda estaba bien confeccionada, pero tenía un par de hilos sueltos. El papá empezó a quejarse, pidiendo otro abrigo. Como sé de costura, intenté explicarle que eran solo hilos del final de la costura y que no afectaban nada. Finalmente, fui al almacén, corté los hilos y regresé con el mismo abrigo en una bolsa diferente.
  — ¡Este sí está bien! ¡Nos lo llevamos!

"Mi papá convirtió una vieja botella de kétchup en un dispensador de champú"

El maestro de las reparaciones

• Mi papá es un todo un “yo lo arregló”. Un día, el tanque del inodoro empezó a gotear. Él vino a arreglarlo y, mientras trabajaba, me quedé dormida. Cuando desperté, ya no estaba. Fui al baño... y salí corriendo a llamarlo. No contestaba el teléfono.
  Resultó que, en lugar de reparar el tanque, simplemente lo quitó por completo. Problema resuelto: ya no había fugas porque ya no había tanque.

"Mi papá logró ponerle contraseña al termostato"

Lo más importante es que haya pan en casa

• Tengo 18 años y vivo con mi papá. Un día salí a dar una vuelta y las cosas se fueron alargando... Al final, regresé a casa tres días después. Entré y mi papá me miró y dijo:
  — ¿Y por qué no trajiste pan?
  O sea, él pensó que había salido a la tienda… ¡por tres días! Máximo nivel de preocupación.

"Mi papá horneó un monstruo de pan"

La misteriosa lógica de los papás

• Siempre supe que mi papá era un perfeccionista, pero hoy se superó. Me prohibió bañarme en casa. ¿Por qué? Porque le quita demasiado tiempo, ya que tiene que secar cada gota de agua que cae en el piso. Ahora, según él, debo bañarme en algún gimnasio con condiciones dudosas y poco higiénicas. Lo mejor de todo es que él mismo se baña hasta dos veces al día.

"Mi papá usa el 100% de su cerebro. Miren su pizza: tiene el cuchillo, la espátula y hasta un tenedor incorporado"

• En una galería de arte mínimo te pagarían $10,000 por esto. © Geronimo_Grospe / Reddit
• Les cuento cómo pasó. Mi papá terminó de comer su pizza, luego metió la tabla de cortar y los cubiertos al horno para que los gatos no se robaran los restos. Después, sin darse cuenta, encendió la estufa y “cocinó” esta obra de arte. © atohner / Reddit

Los métodos de crianza de papá

• En un avión, un niño de unos 4 o 5 años estaba sentado detrás de mí y no paraba de patear mi asiento. Su papá le llamaba la atención, el niño se calmaba, pero solo por un rato. Para la tercera vez, ya me había resignado. Pero el papá resolvió el problema de la manera más simple y genial: le quitó los zapatos y le puso calcetines gruesos. Resultado: patear el asiento ya no era tan divertido.

“Sexto intento de mi papá para engañar a su gata anciana y hacer que tome su medicina para la presión”

Sobre papá y mi diario escolar

• Yo estaba en segundo o tercer grado cuando mi papá, de la nada, decidió revisar mi diario escolar. Era la primera y probablemente la última vez que lo hacía. Mi mamá se sorprendió con tanto entusiasmo y le pidió que firmara la semana. Antes, siempre firmaba ella. Lo más probable es que hubiera una mala calificación en conducta... algo bastante frecuente en mi caso. Pues firmó. Hizo un garabato raro. Incluso yo tenía una firma mejor en ese entonces. La semana siguiente, la maestra vio la firma cuando puso otra mala calificación en conducta y me regañó, convencida de que había falsificado la firma. Me dio tanta rabia, yo sabía que decía la verdad, pero ella insistía en que esa no podía ser la firma de un adulto. Al final, llamaron a mi mamá, quien confirmó la historia. La maestra no se disculpó y solo lo tomó como una broma. En fin, a partir de entonces, cada vez que había una nota más seria en mi diario, yo mismo hacía el garabato y nadie volvió a dudar. © SIRoejka / Pikabu

Parece que esta otra historia también podría interesarte: hemos recopilado 20 relatos curiosos sobre encuentros inesperados en internet.