15 Historias donde la inteligencia práctica fue la protagonista

Algunas personas siempre están llenas de ideas, a veces realmente extraordinarias, y, sin la menor sombra de duda, quieren ponerlas en práctica. Por supuesto, no todas las ideas se hacen realidad a la perfección, pero siempre es divertido observar el proceso.

• A mi sobrina adolescente le encantan los fideos instantáneos y su madre le prohíbe terminantemente comerlos. Sin embargo, eso no hace que a la niña le apetezcan menos los fideos, así que se le ha ocurrido un superplan. Una hora antes de que llegue la madre, come los fideos en su habitación, en el cajón deslizante de su escritorio. Si es necesario, puede volver a deslizarlo. Abre la ventana de par en par y disfruta. Luego mete el recipiente en el bolso y lo tira por la mañana. Es inútil prohibirle a un niño que coma algo. Déjale comer lo suficiente una vez y no volverá a pedirlo. © Overheard / Ideer
• He descubierto que mi novio sale con otra. Intuición femenina + ingenio y encontré a esta chica en las redes sociales, le envié un mensaje y le expuse la situación. Me invitó a su casa para hablar. Llegué y su casa estaba hecha un desastre. Hablamos hasta altas horas de la noche, y en un momento se quedó dormida, así que limpié su casa y me sentí mucho mejor después de eso. Usé su teléfono para enviarle una foto mía y de ella a mi novio y la subtitulé: "Cuídala". Eso es solidaridad femenina. © Overheard / Ideer
• Cuando era estudiante, decidí ganar algo de dinero haciendo helados caseros. De la noche a la mañana hice una página web, compré una heladora y publiqué anuncios en las redes sociales. A la mañana siguiente recibí un pedido de medio kilo de helado para una fiesta de cumpleaños. Llevé el helado ya preparado al metro, y entonces me di cuenta de que se derretiría sin una bolsa refrigerante. Con impotencia, advertí de ello a la clienta. Y por la noche, me quedé estupefacta al recibir mensajes de agradecimiento de ella. Me dijo: "El helado se derritió, claro, pero era como un glaseado muy sabroso, que todos comieron con gusto". Pero aun así decidí cerrar mi startup, y por estrés y culpa, me olvidé de este incidente durante 10 años.

• Tengo un puesto en un mercadillo. Lo más lucrativo son los caramelos liofilizados que compro a una empresa local. Compro al por mayor, con un margen de beneficio del 100 %, ¡y aun así vendo un montón de caramelos! También me ayuda el hecho de que en el centro comercial local tienen prácticamente lo mismo por el triple de precio. La gente quiere probarlos, pero no quiere pagar esos precios, así que se emocionan cuando ven los míos y compran 3 por el precio de 1 caramelo del centro comercial. Es una tontería, pero estoy feliz con ello. © GreenOnionCrusader / Reddit
• En el trabajo tenemos un director muy severo, y para que no te pillen navegando por Internet, tienes que darte la vuelta cien veces para asegurarte de que no viene. Así que empecé a poner en la estantería una polvera abierta con un espejo, ajustándola según hiciera falta, y a usarla como espejo retrovisor. © Overheard / Ideer
• ¡Vendo esquejes y plantones de plantas! En primavera vendo los pimientos y tomates que me sobran, y tengo algunas plantas de interior muy queridas a las que hay que cortar el pelo de vez en cuando: enraízo los esquejes en el agua y, con el tiempo, los pongo en macetas y los vendo. No es mucho dinero ni nada por el estilo, pero es una buena forma de amortizar mi afición con el tiempo. También he estado cultivando granadas a partir de semillas porque donde vivo son plantas de interior poco comunes. El centro de jardinería local vendía árboles pequeños por más de 129 dólares. No tuve ningún problema en cultivar los pequeños durante unos meses y venderlos por 20 dólares, mientras que los paquetes de semillas costaban 5 dólares. © induceddaftfan / Reddit

• En nuestra escuela hacían unos hotdogs deliciosos. Pero se agotaban rápidamente y mucha gente no los conseguía. Cuando estaba en la escuela primaria, me di cuenta de esto, así que iba al baño 5 minutos antes de que terminara la clase, iba a la cantina para ser el primero en la fila, compraba de 10 a 15 hotdogs y los vendía al doble de precio a los que no los conseguían. Así fue como ahorré para comprarme un Lego. Y ahí nació en mí un futuro empresario. © Overheard / Ideer
• De pequeño, cuando estaba de vacaciones en casa de mi abuela en el campo, en nuestra calle vivían un montón de niños de mi edad. Y entre todos ellos, solo yo tenía una bicicleta de 2 ruedas. Recuerdo que se la alquilaba a todos durante 5-10 minutos, y me pagaban con flores de los parterres de sus madres: gladiolos, ásteres, flores de terciopelo. Le regalaba los ramos a mi abuela. Ahora soy adulta y estudio empresariales. Me doy cuenta de que tengo un espíritu emprendedor desde la infancia. © Not everyone will understand / VK
• Antes me molestaban los sermones de mi esposo en la cocina. Encontré una salida: en cuanto empezaba a darme la lata, aplicaba desengrasante en la placa y los azulejos de alrededor. Su olor expulsa a mi marido de la cocina en un par de minutos, y yo tengo un campo para la actividad, donde "desahogarme", si el cónyuge me ha hecho enfadar. El resultado es el silencio, y el plus es la cocina limpia. © Overheard / Ideer

• Cuando me quedé embarazada, tenía una visión clara de la habitación de mi bebé en la que una cuna amarilla era un atributo obligatorio. Empecé a buscar una pero solo encontré 2 opciones y por un precio demasiado elevado para nuestra familia. Así que le pedí a mi marido que hiciera una cuna él mismo. Compró los materiales de madera necesarios, la hizo él mismo y yo la pinté. Y la cuna quedó tan bonita que algunos de nuestros amigos me pidieron que les hiciera una cuna parecida. Y entonces abrimos nuestra tienda online, recibimos muchos pedidos. 2 años más tarde tuvimos nuestra gran producción. Y estoy muy feliz de que mi simple deseo haya desembocado en una etapa tan buena de nuestras vidas. © No todo el mundo lo entenderá / VK
• En 8.º curso, me cambié de escuela. Allí, los chicos malos enseguida quisieron relacionarse conmigo. Yo, por supuesto, acudí solo a la conversación, y ellos eran 10. Me llevé mis diplomas y nadie se interpuso en mi camino. Al día siguiente toda la escuela empezó a saludarme, todos pensaban que era mejor no cruzarse conmigo porque todos mis diplomas eran de lucha libre. Los hice en casa con la computadora, los imprimí y puse mi nombre en todas partes. © Overheard / Ideer
• Cuando mi esposo estaba en la universidad, todo el mundo dejaba el detergente de la ropa etiquetado con su nombre en la habitación con la lavadora y la secadora. Alguien usaba el suyo. Se hartó, tiró el resto de la botella y la rellenó con almidón líquido. No dañaría la ropa de nadie, solo la dejaría rígida como una tabla y necesitaría varios lavados para volver a la normalidad. El ladrón no volvió a robar sus cosas. © ChaoticForkingGood / Reddit

• Mi esposo le compró a su madre un terreno para una casa de veraneo cerca de nosotros, para que tuviera algo que hacer cuando se jubilara. Al principio, nos tiranizaba con la siembra: nosotros mismos plantábamos su huerto. Luego pasó lo mismo con las malas hierbas y el riego. Pero a la hora de cosechar, ella es la más sana. El año pasado ocurrió lo mismo. Una de las tardes estaba a punto de venir mi suegra, así que decidí cosechar yo misma sus verduras.
  Me levanté temprano y lo recogí todo, incluso tuve tiempo de congelar y encurtir algunas. Hubo muchos gritos, ahora soy su enemigo número 1. Ya no viene a la casa de verano y no se comunica conmigo. La parcela pertenece a mi esposo, y yo conseguí un trozo de tierra extra. Y fue suficiente para cosechar sus verduras una vez. © Overheard / Ideer
• Estoy en el lado más corpulento. No poco saludable. IMC dentro de los parámetros "normales". Pero tengo curvas. Fui a una tienda con uno de esos tops que se ciñen por debajo del pecho, por encima de la cintura. Supongo que acentuaba las curvas (no volveré a ponérmelo, eso seguro). Una señora mayor se me acerca, me pone la mano en la barriga y me pregunta cuándo voy a dar a luz. Me sonríe como si ya fuéramos las mejores amigas. Estaba radiante. Le pongo la mano encima, le devuelvo la sonrisa y le digo: "No estoy embarazada. Solo estoy gorda". Se le cae la cara de vergüenza. Intenta retirar la mano. Pero yo la mantengo ahí, contando los segundos, radiante. Cuando por fin la suelto, se escabulle sin decir ni una palabra. © QfromP / Reddit
• En la escuela nos asignaron hacer figuras geométricas tridimensionales. Si no las hacías, suspendías. Así que mi amigo y yo las hicimos juntos. Y le ofrecí hacer algunas más. Me preguntó por qué, y le dije que lo más probable era que todos se olvidaran y, para no suspender, estuvieran dispuestos a comprárnoslas. Hicimos 4 bolsas y acertamos. Efectivamente, casi nadie hizo nada y nuestras formas se vendieron como rosquillas. Luego estuvimos haciéndolas unos días más para aquellos a los que el profesor concedió una prórroga y para otras clases. Nunca he tenido dinero más fácil en mi vida. © Unknown author / Pikabu