15+ Personas cuyos intentos de conocer a alguien para formar una familia se convirtieron en un fracaso épico

Historias
hace 3 años

Probablemente, cada uno de nosotros, al menos una vez en la vida, tuvo una cita fallida. Está claro que todo el mundo quiere tener una relación cálida y duradera: alguien necesita un compañero de vida y una persona con ideas afines, otro decide crear una familia fuerte o quiere con todo su corazón tener un romance apasionado. Pero para encontrar al amor de tu vida, necesitas conocer a mucha gente. Solo que no todos somos compatibles, lo que a veces se vuelve especialmente claro en la primera cita.

En Genial.guru sabemos que en ocasiones nos resulta difícil encontrar un buen interlocutor, y mucho más un ser querido. Algunos internautas han logrado sobrevivir a todas las sorpresas de una primera cita y han compartido esta experiencia única. Al final, también habrá un pequeño bono que demuestra que, aunque te parezca que todo se va al infierno, todavía no es una razón para olvidarse del final feliz.

  • A la edad de 15 años conocí a una chica en Internet, y acordamos encontrarnos al lado de una estación de metro. Llegué a tiempo, esperé media hora, pero la chica no vino. Le envié un SMS, y luego tuvimos este diálogo:
    —¿Dónde estás? Ya estoy aquí esperándote.
    —¡Te esperé unos 15 minutos, no pude soportarlo y me fui!
    —¿A qué hora llegaste?
    —A las 11.
    —Pero si dijimos a las 12.
    —Bueno, sí, ¿y qué?
    Nunca volví a escribirle. © ImNexus / Pikabu
  • Un día fui al cine en mi primera cita con una chica. Llegó tarde y la película ya había comenzado. Luego se le antojó charlar conmigo en la sala llena de gente. No le grité ni nada por el estilo, pero todas mis respuestas a sus preguntas fueron monosilábicas, ya que trataba de terminar la conversación y simplemente ver la peli. Aproximadamente en el medio del filme, se puso de pie y me dijo que obviamente no estaba interesado en ella. Tenía toda la razón. © pzycho / Reddit
  • Conocí a un italiano y me invitó a tomar un café. Llegué 5 minutos antes, pedí un café. Viene este chico, se sienta en la mesa:
    —Hola, Helga.
    —Hola.
    —¿Cómo estás?
    —Bien.
    —¿Dónde está el baño?
    —Allí está.
    Va al baño. Tarda unos 10 minutos, 20, 30. Lo llamo, no responde. Nunca volví a verlo. © vesna1945 / Pikabu

“Si la chica no ha venido a la cita, no te pongas triste. Después de todo, ¡tendrás más comida solo para ti!”.

  • Me lo contó mi amiga. En la escuela secundaria, su madre tenía dos empleos. Como decía su mamá, trabajaba en uno y descansaba en el otro. Su segundo empleo era en una tienda de música. A veces, mi amiga reemplazaba a su madre, trabajando de vendedora.
    Entonces, un día, la madre llamó a su hija a la hora del almuerzo para pedirle que la reemplazara después de las clases. La chica no se opuso, pero estaba molesta, porque recientemente había conocido a un joven maravilloso y aquel día se suponía que iban a tener una tercera cita. Sin embargo, mi amiga encontró una solución. Llamó al chico, le explicó la situación y le ofreció que fuera a trabajar con ella. El chico estuvo de acuerdo, pasaron varias horas increíbles charlando y riendo. Al final del día, cuando ya se estaban yendo a sus casas, el joven preguntó:
    —Bueno, ¿la mitad del dinero para mí?
    —¿De qué dinero? —mi amiga no lo entendió.
    —Bueno, por medio turno. Pasé este tiempo contigo, ¡así que me pertenece la mitad de lo ganado! © axuta.ru / Pikabu
  • Un chico me regaló 3 salchichones para nuestra primera cita. SALCHICHONES, ¡maldita sea! Para la segunda cita, trajo una caja enorme de bombones con 10 bombones en su interior. Era un individuo muy creativo. © “Oído por ahí” / Ideer
  • Una vez tuve una cita a ciegas. En cinco minutos me di cuenta de que ella no era muy inteligente, pero yo era demasiado educado para irme. La cita duró solo una hora y ella ya quería presentarme a sus padres. “Ahora que estamos comprometidos, tendrán que conocerte”. Pagué la cena y me fui. © marcomeckert / Twitter

“Mi hermana tiene una cita. Esto es lo que ella envió desde su baño: ‘Olvidaré el hecho de que estás hurgando en mi botiquín si te olvidas de la cámara que instalé en mi baño. Es una broma’”.

  • Ocurrió hace 15 años. Mi amigo tenía una cita casi a ciegas, y me pidió que lo llamara en media hora para decidir si huir de la cita o quedarse. Dije que lo llamaría, y para pasar el rato, puse Quake III Arena. Dos horas después, recibí su llamada. Agarro el teléfono y escucho: “¡Eres un traidor!”. © xmDmitriy / Pikabu
  • Una vez al año, hago esto. Llego a casa y, sabiendo que no tengo que ir a ningún lado, como cebollas cortadas en rodajas finas, pepinos, pan y tocino. ¡Una sola vez al año! ¿Por qué exactamente en medio de este día el hombre de mis sueños decidió invitarme a una cita? Me pregunto: ¿por qué? Tuve que negarme. © “Oído por ahí” / Ideer
  • Una vez llevé a una chica a la pizzería local para nuestra primera cita. Condimentó su rebanada de pizza con ajo en polvo, me miró y dijo: “Esto es por si tienes pensado besarme después”. © BattleOTBeltway / Twitter

“Mi novia me abandonó antes del Año Nuevo, así que voy a celebrarlo con mi mascota”.

  • En aquel entonces tenía 18. Tuve una cita en el cine con un chico. Vino a buscarme en su camioneta y de camino escuchamos música deprimente. En el cine, mi compañero no paraba de enviar mensajes de texto a otras chicas, y luego se inclinó hacia mí y dijo que tenía suerte de estar con él porque todas esas chicas querían estar en mi lugar. © Kyoshi-atemycabbages / Reddit
  • Me lo contó una amiga. “Cuando mi amiga tuvo una cita con un chico que conoció en un sitio de citas, me dio una orden: llamarla en 15 minutos. Si no le gusta y quiere retirarse, entonces responderá mi llamada para luego decir que sucedió algo urgente y tiene que irse. La llamé, pero ella estaba contenta: aparentemente le gustó. 20 minutos después vino a mi casa llorando: su compañero recibió una llamada a los 15 minutos y tuvo que ir urgentemente a alguna parte”. © umorist / Pikabu
  • Nos conocimos en línea y nos comunicamos un rato antes de encontrarnos en vivo. Poco después de comenzar la cita, empezó a hablar sobre cómo les contaríamos la historia del encuentro a nuestros nietos. Para ser honesta, podría haber sido una historia romántica, pero en cambio, lo único que hizo fue asustarme. © SweetSitty / Reddit
  • Me preparé para salir en una cita. Estoy hecha un hada. Incluso me hice la manicura. Mi compañero también luce guapo y está sonriendo. Conversamos sobre el trabajo, sobre nuestros intereses, sobre lo que hacemos en nuestro tiempo libre. Estamos en la mesa tomando tranquilamente un café. Entonces el chico dice: “Me uní al equipo de ensueño, mi supervisor y yo nos dedicamos a la distribución de cosméticos. Ahora busco gente talentosa y sociable como tú. Únete a nosotros”. Intentando ocultar mis emociones, escuché concienzudamente la presentación sobre el “equipo de ensueño” y me fui a casa. © TildaGamadrilda / Pikabu

“Nunca sabes lo que te espera en una cita, especialmente si se conocieron por Tinder”.

  • La conocí en el hospital (yo era paciente de ambulancia). La invité al cine y luego a cenar: tuvimos una gran charla sobre cómics y películas. Estaba seguro de que era una cita. Al final, cuando le dije que me gustaría volver a verla, ella dijo que su prometido no estaría feliz si se enteraba de ello. © boyz2man / Reddit
  • Antes tenía que mudarme con frecuencia, por lo que las citas no eran algo raro. Una vez acordamos encontrarnos con una señora para dar un paseo. En plena cita, la llamó su novio. Cuando le pregunté, me dijo: “Pronto vamos a separarnos, no quiero ofenderlo”. Tal vez no quería perder el tiempo. © asillisa / Pikabu
  • Recuerdo haber mantenido una comunicación con una chica en línea. Platicamos sobre la vida, sobre nuestros pasatiempos. Me pareció simpática, aunque ni siquiera nos intercambiamos fotos. Yo no tenía a nadie, ella tampoco. Entonces me ofreció una cita a ciegas. “Déjame ir a tu casa, desde otra ciudad, con todas mis cosas, enseguida nos casaremos y viviremos juntos. Creo que es justo: no te he visto, tú tampoco me has visto a mí. ¿Te atreves?”. Después de eso, nuestro vínculo se fue disipando y pronto nuestra amistad se acabó por completo. No me atreví. © XXDok / Pikabu
  • Conocí a un chico en Internet y en nuestra primera cita fuimos al cine. Al final de la noche, cuando actuó como si fuera a besarme, me sopló en la nariz y, riendo, dijo que les hacía eso a sus perros y lo llamaba “trompeta de cachorro”. © snooki_cookie16 / Twitter

Bono: Cuando incluso la peor cita puede terminar bien

  • Cuando nos conocimos, ella era un poco fría. Mientras íbamos en el auto, se mareó. Luego, estábamos por llegar a nuestro destino cuando alguien chocó contra nosotros. Entonces me pareció que ella me odiaba. Después fuimos a cenar a un pequeño restaurante. Era vegetariana y no tenían nada para ella... Sin embargo, llevamos 10 años casados. © sb10421 / Twitter

¿Has tenido alguna cita fallida que todavía recuerdas con una risa?

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