Qué bonito gesto la compañía Lego
15+ Pruebas de que los maestros del servicio al cliente viven entre nosotros
Un buen y amable servicio hacia los clientes es algo que siempre tendrá relevancia. Es muy agradable cuando los representantes de distintos ámbitos recuerdan que, en cualquier situación, se tiene que ser amable mutuamente. Y no solo para que el negocio prospere, sino simplemente para levantar el estado de ánimo de una persona. En este artículo verás precisamente ejemplos de esto.
Genial.guru experimentó un verdadero placer al preparar este material para ti. Al final, como bono, te espera algo un poco rudo y cursi a la vez.
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Mi viaje en tren tenía prevista una parada de 49 minutos en una ciudad. Tenía hambre y quería ordenar sushi. En ese lugar, la señal telefónica frecuentemente se perdía, los restaurantes rechazaban mi pedido y estuve a punto de resignarme... Pero en eso encontré un establecimiento que aceptó preparar mis alimentos y entregarlos en menos de una hora hasta el vagón del tren. ¡Chicos, muchas gracias, son increíbles! © Lunarfa / Pikabu
" ¡Gracias por su compra!
Calle: Tren en la estación
Casa: Vagón 10
Notas: ¡El tren parte a las 23:45!"
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Estaba tramitando el envío de un pequeño paquete en el sitio de una empresa de mensajería. Durante el proceso del trámite, me encontré con dos errores gramaticales graves. Así que decidí enviarles un correo, mencionando que su sitio web tenían algunos errores. Como respuesta obtuve lo siguiente: “Gracias por prestar atención. Por consiguiente, su envío será gratis”. ¡Genial! © AlexFly2019 / Pikabu
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Mi esposa me contó lo siguiente:
Llamé al salón de belleza para hacer una cita con anticipación (E: esposa, R: recepcionista).
E: “¡Buenos días! ¿Puedo hacer una cita para un corte de cabello?”.
R: “¡Sí, por supuesto!”.
E: “¿Mañana por la mañana hay espacio?”.
R: “A las 9:30. ¿Está bien?”.
E: “Sí”.
R: “Disculpe, ¿qué corte va a querer?”.
E: “Un corte bob”.
R: “Mmm... ¿A las 12:30 puede?”.
E: “¿Qué tiene, pasa algo?”.
R: “El problema es que no le puedo garantizar que el estilista de las 9:30 pueda hacer tal corte, pero el de las 12:30 lo hará sin duda”.
Al final, mi esposa hizo su cita a las 12:30, todo salió bien y fue un corte garantizado. © tatmachok / Pikabu -
Los amables choferes en los autobuses de mi ciudad te hacen sonreír desde la mañana. El autobús aparentemente es nuevo, pero el techo ya gotea. En algunos asientos se puede encontrar esta advertencia. © Imperskij / Pikabu
“Mojado”
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Hoy fui a una cafetería a almorzar. Es bastante decente: tiene un excelente interior, siempre está limpia, cocinan rico y los meseros son amables. Hice mi pedido y me quedé esperando. En ese momento, vi una cucaracha en el suelo. Pensé que, al ser verano y tener las ventanas y puertas abiertas, podrían ocurrir este tipo de cosas. La mesera me trajo mi comida y le mencioné lo sucedido: “Una cucaracha entró a su establecimiento, pero no se preocupe, ya me he encargado de ella”. La mesera se sorprendió, se disculpó y dijo que ellos frecuentemente fumigan el lugar (yo le creo). Le respondí que no pasaba nada, que era la primera cucaracha que había visto ahí en todos los años que he visitado el lugar. Ella se retiró murmurando que le haría la observación a la administración. Después de un par de minutos, regresó con un té que había ordenado y un enorme pastelito (debo aceptar que estuvo delicioso) que no había pedido. Resultó que era un regalo por parte del establecimiento como disculpa. Para ser sinceros, no lo esperaba y fue una agradable sorpresa. © 2.718 / Pikabu
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Mi esposa y yo adoramos las semillas. Frecuentemente, compramos unas bolsas de color amarillo. De un tiempo para acá, las semillas de mis preciadas bolsitas saben un poco raro: algunas están muy húmedas, pequeñas e incluso amargas. Me quedé perplejo, ya que conozco muy bien esta marca y, a mi gusto, eran las mejores. Les escribí un correo preguntado qué había pasado. Recibí una respuesta muy rápidamente: “Querido cliente, lamentamos informarle que este año, el clima no fue el mejor, nuestras semillas de clase prémium simplemente no crecieron y debido a esto la calidad se vio afectada. Pero para compensarlo de alguna manera, estamos dispuestos a enviar a un mensajero de nuestra red local a su lugar de residencia para que le entregue un par de bolsas gratis”. Acepté y escribí mi número de teléfono. Al día siguiente, un chico llegó a nuestro hogar en un pequeño camión con el logotipo distintivo de la marca y nos dio dos grandes paquetes, nos pidió firmar de recibido, nos deseó buen provecho y se fue a seguir con su negocio de semillas de girasol. @ RicardosMuertes / Pikabu
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No dejo de asombrarme con la empresa Lego. Tenemos un pequeño tren con números del 0 al 9. Un día, mi hijo vio en el patio de juegos que unas niñas tenían una pieza Lego Duplo con la cifra 10. ¡Quedó fascinado! Él adora los números, a los 3,5 años ya podía contar hasta 100. Todos sus juegos y libros favoritos están relacionados con los números. ¡No podía tranquilizarlo, ya que él solo tenía hasta el número 9 y había uno más! Él quería urgentemente esta pieza con el número 10. Comencé a buscar en qué kit se podía encontrar esta pieza. Su cumpleaños sería pronto y quería regalarle este kit, pero ya no se vendía. Me enteré de que se podían comprar algunas piezas por separado. Entré al sitio oficial de Lego y les escribí un correo diciendo que mi hijo adoraba los números y los juguetes Lego, pero le hacía falta una pieza con el número 10, les pregunté si podía comprarla por separado. Al día siguiente, me respondieron que no tenía que comprar nada, me pidieron mi dirección y dijeron que ellos mismos me enviarían esta pieza gratis. No lo podía creer. Después de 20 días, enviaron a nuestro país desde Dinamarca el cubo Lego con la cifra 10. ¡Esto es lo que llamo atención al cliente! Se lo daré a mi hijo el día de su cumpleaños y quedará contento. © tishakot / Pikabu
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Hoy compré unas cartas de tarot en una tienda. Cuando me senté cerca de la estantería para verlas mejor, un gato parecido a Salem brincó sobre mis rodillas. Esto es lo que llamo un buen servicio. © iamhellcat / Twitter
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Hice una cita para hacerme manicura a través del sitio web del salón de belleza y dejé allí mis datos de contacto. ¡Para confirmar mi cita, no me llamaron, sino que me escribieron por WhatsApp! Impresionante, genial, qué buen servicio, de antemano les pongo un 11 de 10. © alinkerka / Twitter
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Sistema de evaluación de la calidad en el servicio en una tienda: “Por favor, califica la calidad del servicio de nuestros especialistas”. Yo, al recordar que ningún especialista se acercó a mí, ni mucho menos me preguntaron ni me aconsejaron nada: “10 / 10, excelente servicio”. © Wizard_Severus / Twitter
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Entré a la farmacia por una crema D-Panthenol. La vendedora era una mujer madura y me preguntó: “¿La quieres para un tatuaje?” (qué servicio tan increíble, pensé). Sí. Ella comenzó a contarme que la crema era grasosa, sin embargo, resecaba un poco, después me mostró su mano y allí tenía unos pajaritos que recién se acababa de tatuar. © kodfgofo / Twitter
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Fui a una tienda cerca de mi casa para comprar un helado. En la caja me dijeron: “Este producto tiene una promoción ’1+1′, ve a tomar otro”. Les dije que era la última pieza. ¡Ellos me respondieron que podría regresar mañana con el ticket para que me dieran mi segundo helado! © vzrosly_content / Twitter
Mi tostadora tiene el botón “Un poco más”
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Fui al dentista en una clínica privada. El dueño del establecimiento, quien también era dentista a tiempo parcial, trajo un piano y lo colocó en el pasillo. Él se puso a tocar famosas obras para sus clientes. No me quería ir del lugar. © “Oído por ahí” / Ideer
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Mi amigo y yo entramos a una tienda para comprar un cargador. Una guapa vendedora se acercó y nos preguntó:
—¿Lo quieren para su casa o para el coche?
—Da igual.
—¡No tenemos ninguno!
Qué buen servicio. Lo principal es mantener una conversación con compradores potenciales. Y, por supuesto, el producto es lo de menos. Desde ese día, siempre voy a esta tienda. © “Oído por ahí” / Ideer -
Hace poco tomé un taxi con mi hija. Nos sentamos, el conductor se volteó y nos preguntó: “¿Jovencitas, qué prefieren escuchar?”. Respondí: “Escuchemos ’La vaca Lola’. ¡A mí hija le encanta!”. Él se tardó un poco en buscar, sacó una USB y ¡eureka!, puso la canción. ¡Qué servicio y persona tan maravillosa! © Habitación № 6″ / Vk
El área de espera de esta montaña rusa tiene un contenedor de basura alto
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Hoy tuve una fuerte congestión nasal. Mientras mis manos se encontraban bajo la lámpara, a una buena manicurista no le dio asco limpiar mi nariz llena de mocos. ¡Qué buen servicio! ¡Para la próxima vez, también acudiré con ella! © Habitación № 6 / Vk
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Entregué mis zapatos a un taller de calzado. Allí, el zapatero tomó mis botas, me devolvió mi bolsa y me entregó el ticket. Llegué a recogerlas y me di cuenta de que no tenía nada para guardarlas. Al ver mis ojos, el zapatero sacó de debajo de la mesa una bolsita y me la dio diciendo lo siguiente: “¡Tengo que ofrecerle un buen servicio!”. © Habitación № 6 / Vk
Bono: a veces también pasan estas cosas
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Hoy me pusieron una nota dentro de la capucha de mi sudadera. Llegué a casa, marqué el número y resultó que lo tenía guardado en mi guía telefónica como “Reparación de teléfonos”. Este chico del centro de reparación realmente me gustó. ¡Y él logró poner su nota, hurra! © Habitación № 6 / Vk
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Mi amigo compró un auto nuevo. Un Camry recién salido de agencia, pero algo en él comenzó a hacer un ruido. Revisaron el auto en el taller mecánico y no encontraron nada. ¡Pero el ruido seguía escuchándose! Al final, fue con un experto que desmontó todo el auto a mano y ¡eureka! Detrás del radiador, en un lugar oculto, se encontraba escondido el origen del ruido: unos tornillos. Y tenían una nota con lo siguiente: “¡Finalmente los encontraste! ¡Te doy 5 puntos, Sherlock!”. © Habitación № 6 / Vk
¿Alguna vez has quedado impresionado por un excelente servicio? Cuéntanos tu historia en los comentarios
Comentarios
Me vendrían bien una tostadora con ese botón ;)